Por qué tener aperitivos gratis en la oficina es bueno para la productividad

Para mejorar su cuenta de resultados, Sprint decidió hace unos días poner fin a la era de los aperitivos de oficina gratis para sus empleados. La medida representa una pequeña fracción de los esfuerzos de la firma de telecomunicaciones por recortar 2.500 millones de dólares sus gastos operativos totales.

El hachazo del snack supone 600.000 dólares de ahorro al presupuesto. Pero ¿a qué coste? "Nunca se hubieran dado los aperitivos si no pensara que estaban ayudando a aumentar la productividad de alguna manera", afirma Andrew Chamberlain, economista jefe de Glassdoor, la web de búsqueda de empleo.

Las empresas deseosas de ahorrar dinero tienden a ser creativas,según cuenta Bloomberg, y entienden que proporcionar gratuitamente comida puede parecer justo el tipo de gasto frívolo que una empresa que entra en una fase de austeridad debería reconsiderar.

Para frenar los gastos, por ejemplo, Kraft a principios de este verano retiró sus palitos de queso gratis y las tazas de Jell-O. Pero las razones económicas para ofrecer snack gratis superan los ahorros relativamente insignificantes que se consiguen- y una vez que un lugar de trabajo se engancha a este beneficio social, no puede fácilmente volver atrás.

Sólo el 22% de las oficinas ofrecen aperitivos y bebidas gratuitas, según la Sociedad para el 2015 del empleado de la Administración de Recursos Humanos Beneficios Encuesta.

(Bloomberg LP es uno de los empleadores que ofrece alimentos gratis- hay una abundante despensa surtida con todo tipo de frutas, barras energéticas o patatas fritas.)

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En la mayor parte del mundo del trabajo, los empleados tienen que asumir ese gasto por sí mismos. Desde el punto de vista más cínico, sin embargo, esto no es sólo un caso de generosidad corporativa. Los snacks mantienen a los trabajadores en la oficina y evita el salir en busca de su sustento durante la jornada laboral.

Un estudio de 2011 de Staples reveló que la mitad de todos los trabajadores salió de la oficina para conseguir snacks al menos una vez al día, y algunas personas salían hasta cinco veces. Las escapadas para conseguir un piscolabis representan 2.4 millones de horas de productividad perdida en los EE.UU., según el estudio.

Debe tenerse en cuenta, por supuesto, que Staples y su jefe tienen un interés común en mantener a las personas en la oficina. “Si la gente tiene comida allí, son propensos a permanecer más tiempo – con lo que se logra una mayor productividad”, dice Ken Oehler de Aon Hewitt, una firma de consultoría de recursos humanos que, entre otras cosas, se especializa en las políticas de contratación de empleados.

El costo de erradicar los aperitivos gratuitos va más allá de la productividad perdida. Una oficina que una vez tuvo aperitivos se pone en riesgo al eliminar esta prestación. "Estos pequeños beneficios, pueden suponer pequeñas cantidades de dólares, pero pueden ser muy simbólicos", dijo Chamberlain. “Son percibidos como un regalo; tirarlo a la basura puede tener un efecto psicológico que es más importante que la cantidad de dólares ahorrados.”
Los snacks, como muchas ventajas sociales, existen para impulsar el “compromiso de los empleados”, siguiendo la jerga de recursos humanos que hace referencia a la inversión emocional de un empleado en su puesto de trabajo.

Muchos estudios han relacionado la buena marcha de los resultados de una empresa con el compromiso, es decir, que los empleados trabajan mejor cuando se preocupan por su trabajo y su empleador. Un estudio de 2012 de Towers Watson descubrió que los ambientes de trabajo que promueven el bienestar físico, emocional y social de los empleados en el nivel más alto tenían márgenes de explotación mucho más altos que los que no tienen políticas de compromiso de ningún tipo. Los empleados acostumbrados a la gratificación pueden sentirse quemados si se suspenden.

En un cliente de Aon Hewitt, por ejemplo, quitaron el almuerzo gratis y “desmotivaron enormemente el personal”, según Oehler. En otra empresa, Aon Hewitt descubrió que cancelar por completo la comida gratuita había causado un gran deterioro en el compromiso con lo cual el ahorro de costes no podía justificar la decisión. “A pesar de que puede que no sea mucho dinero”, dijo Oehler, “la pregunta es, ¿está usted recibiendo el ROI (retorno de la inversión) de los snacks?”

Cortar algo tan visible puede enviar una señal fuerte y estridente a los empleados. “Hay un viejo refrán que dice que el objetivo es arrancar las plumas del ave con la menor cantidad de graznidos”, afirma Chamberlain. Cuanto menos visibles son los recortes, mejor - incluso si eso significa sacar dinero de los bolsillos de los empleados.

“Los cambios en las contribuciones a los planes de jubilación de los empleados”, sugiere como un recorte menos perjudicial que el vaciado de la despensa. “Son más inocuos desde el punto de vista de los trabajadores.”
¿Usted sabe lo que no es intrascendente para la plantilla? Las punzadas de hambre diarias que recuerdan a los empleados sin snacks que una vez los tuvieron.
IDNet Noticias
@Jorcha