El BCE avisa del riesgo de un creciente apalancamiento en los mercados

Roma, 2 jul (EFECOM).- El presidente del Consejo de Supervisión del Banco Central Europeo (BCE), Andrea Enria, advirtió hoy del creciente "apetito por el apalancamiento" que se está experimentando en los últimos tiempos en los mercados crediticios de riesgo y de renta variable, y dijo que pueden suponer una amenaza para la estabilidad financiera.

"Debemos prestar atención a las señales de advertencia de apalancamiento creciente, complejidad financiera y opacidad que crean el potencial de una combinación peligrosa de factores de riesgo. Los bancos no son los únicos detrás de esas tendencias, pero parecen estar moldeándolas a través de su gestión de riesgos y sus elecciones de estrategia comercial", detalló Enria por videoconferencia en la Università degli Studi di Napoli Federico II.

"Las señales concretas de acumulación de riesgo se han hecho evidentes en los segmentos de activos de riesgo de deuda apalancada y derivados relacionados con acciones, que ameritan una supervisión intensificada", añadió en su intervención.

Indicó que en los últimos meses "los préstamos apalancados se suscribieron para atraer empresas con niveles de apalancamiento cada vez más altos, como lo demuestra la deuda pendiente de los prestatarios que se convierte en un múltiplo cada vez mayor de su capacidad de ganancia".

"Gracias a las intervenciones públicas, los incumplimientos de los préstamos apalancados se han mantenido por debajo de los observados durante la gran crisis financiera. Sin embargo, la calidad crediticia subyacente se deterioró y el apalancamiento empresarial aumentó en el transcurso de 2020", expuso.

"El apalancamiento (...) también se manifiesta en el mercado de renta variable, donde los participantes de todo el mundo han aumentado su exposición a productos financieros con apalancamiento intrínseco, como los derivados de renta variable", prosiguió.

El presidente del Consejo de Supervisión europeo admitió que "la peor fase de la pandemia de la covid-19 parece haber terminado y los pronósticos de consenso apuntan a un repunte económico fuerte y rápido".

Dijo que los bancos son "resistentes y están bien capitalizados", y reiteró el mensaje ya anunciado por la presidenta del BCE, Christine Lagarde, de que se espera que el próximo 30 de septiembre expire la recomendación de no repartir dividendos, dada la mejor evolución de la crisis sanitaria y económica.

"Volveremos a nuestro escrutinio ordinario de dividendos y recompras de acciones, basado en una cuidadosa evaluación prospectiva de la planificación de capital individual de cada banco. Pero esperamos que los planes de distribución sigan siendo prudentes", argumentó.

Las políticas de estímulos y moratorias aprobadas por parte de los países para mitigar el impacto de la pandemia han evitado que este se refleje en las carteras de créditos morosos de los bancos y se notará "cuando se retire la mayor parte del apoyo público de emergencia".

Por eso, "para que la economía resista la última fase de esta crisis y pueda sostenerse por sí misma mientras se retira la mayor parte del apoyo", los bancos tendrán que mantener la atención en la gestión del riesgo crediticio y estar "debidamente equipados para lidiar con los especificidades del entorno actual".

Recordó que en julio y diciembre del pasado año la entidad europea envió cartas a los directivos de los bancos "para enfatizar la importancia de administrar de manera precisa y proactiva el riesgo crediticio", y que tras las comprobaciones realizadas se ha observado que la mayoría "han ajustado sus controles de riesgo crediticio" a las expectativas de supervisión del BCE pero algunas muestran "brechas sustanciales que deben abordarse".

"Los sistemas y procedimientos de alerta temprana de algunos bancos para evaluar la improbabilidad de pagar de los prestatarios dependen demasiado de indicadores ineficaces, calificaciones desactualizadas e información retrospectiva", concluyó. EFECOM

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