Boca, entre el lamento por el gol errado de Toto Salvio y la furia de Darío Benedetto con el árbitro

Fue una noche intensa, con sensaciones muy extrañas. El empate 1-1 de Boca ante Corinthians tuvo sabor a poco, justo cuando la producción colectiva resultó alentadora. Incluso, todavía queda en la cabeza de los hinchas de Boca la chance que no pudo resolver casi en soledad Toto Salvio y hasta cierto fastidio por la tarea del árbitro uruguayo Christian Ferreyra, al que Darío Benedetto no lo trató con demasiada dulzura tras la igualdad, en un partido que era clave para que los xeneizes se pudiesen acomodar como primero del Grupo E de la Copa Libertadores y prácticamente sellar su clasificación a los octavos de final.

Lo que generó Boca en la Bombonera permitió borrar, un poco, la pobre actuación ante Racing por la Copa de la Liga. Tuvo una buena cantidad de situaciones como para quebrar la resistencia de Corinthians, pero lo que resuena todavía es la chance de cabeza que tuvo Salvio sobre el final del encuentro. Tan clara resultó que hasta desde la tribuna se escuchó el grito de gol y en la transmisión también los relatores soltaron una expresión similar. Pero la pelota se fue afuera por centímetros.

Se jugaba el tiempo de descuento, Corinthians ya estaba con diez jugadores por la expulsión del colombiano Víctor Cantillo y estaba completamente replegado. Una buena acción colectiva le permitió ya a Óscar Romero llegar hasta el fondo, sacar un centro perfecto, que prácticamente le cayó en la cabeza a Salvio, que entraba a la carrera y sin marca. El delantero de Boca no pudo darle dirección a su remate y se fue a centímetros del palo derecho de Cassio.

Y el sabor amargo por un partido que podría haberle permitido a Boca quedarse con una victoria para acomodar su clasificación, se multiplicó por la tarea del árbitro uruguayo Ferreyra, que no otorgó los minutos adicionales que los jugadores de Boca entendían que tendría que haber habido, y porque le permitió a Corinthians demorar el juego durante todo el segundo tiempo. El partido se detuvo a los 20 minutos del segundo tiempo y se reanudó a los 22, continuó por medio minuto y luego estuvo detenido hasta los 29, con nuevas discusiones y un expulsado (Víctor Cantillo). Además, hubo seis ventanas de cambios (cinco de Corinthians, una de Boca).

Uno de los más molestos con esta situación fue Darío Benedetto, que tras el encuentro comentó: “No nos vamos conformes por el resultado, pero sí por el rendimiento”, arrancó con calma el delantero. Pero perdió la paciencia y soltó: “Fue una vergüenza lo que adicionaron. El partido estuvo parado 12 minutos y adicionaron siete. Ya es es exagerado lo vergonzoso que es esto”.

Recuperó la calma y finalizó: “Pero bueno, el vestuario está bien, unido como siempre. Más de lo que hicimos fue imposible ante un equipo que con 10 se metió todavía más atrás”.

La postura del entrenador de Boca resultó un poco menos intempestiva que la de Benedetto respecto a la tarea del árbitro. El DT del conjunto xeneize valoró la tarea colectiva y sólo una mínima crítica al desempeño de Ferreyra: “El partido lo habíamos pensado de una manera que en el primer tiempo se nos dio. Nos encontramos con el gol en contra en esa pelota parada, salimos a buscar el empate y lo conseguimos. Seguimos buscando, siendo protagonistas, intensos. Tuvimos situaciones. Hubo un equipo que quiso ganar, que fue Boca, que creó las situaciones para poder hacerlo. Solo nos faltó meter el segundo”.

Y agregó sin entrar en demasiadas controversias: “Lo del árbitro... En ese tumulto que se armó se detuvo demasiado el partido, por eso entiendo que quizá estuvo corto en el tiempo que adicionó. Nada más que eso tengo para decir”.

Tiene demasiadas obligaciones el entrenador de Boca, como para detenerse en la tarea del árbitros, por eso prefiere enfocarse en lo que tiene por delante con los duelos claves ante Tigre, el domingo por la final de la Copa Liga Profesional, y el partido con Deportivo Cali, cuando el xeneize espera definir la clasificación a los octavos de final de la Copa Libertadores: “Son objetivos que tenemos por cumplir. Por suerte estamos en carrera en todas las competencias. Se vienen partidos importantes. Son todas finales. Ante Corinthians se jugó como tal. El fin de semana tenemos una por el torneo y después vendrá por la Copa”.