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Crear cuero a partir de soja, la última tendencia ecológica

Algunos lo conocen como “cuero vegano” y es uno de los tejidos fabricados con una idea de lo sostenible que más está llamando la atención en ferias sobre ecología, redes sociales y hasta en los consumidores de vestimenta y accesorios de Indonesia.

A partir de ahora, cuando hablemos del cuero de soja, nos estaremos refiriendo a “soya c(o) u(l)ture”, el resultado del trabajo de XXLab, un colectivo femenino que se enfoca en el arte, la ciencia y la tecnología libre, con sede en la ciudad indonesia de Yogyakarta.

Productos elaborados con el cuero obtenido de los desechos de la fabricación del tofu. Una idea original del colectivo femenino XXLab.
Productos elaborados con el cuero obtenido de los desechos de la fabricación del tofu. Una idea original del colectivo femenino XXLab.

Las integrantes de XXLab se han enfocado en lograr un tejido resistente, sólido, que reduzca la contaminación de las aguas, llegue a reemplazar al cuero animal y ofrezca al público un producto sustentable.

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Este cuero de soja se une a la lista de proyectos necesarios para la humanidad como son el del cuero biodegradable de Piñatex, fabricado a base de piña, el cuero de champiñón “Muskin” o el cuero a base de kombucha, creado por investigadores de la Universidad Estatal de Iowa.

Según se explica en la página web de XXLab, se toman los desechos líquidos que resultan de la producción de tofu, se les hierve con vinagre, azúcar y fertilizante, se le agregan bacterias y luego se espera 10 días para que la mezcla se convierta en celulosa microbiana, momento en el que se pasa al proceso de prensado y secado.

El resultado de esta sugerente creación es un tejido sostenible, de bajo costo y con cero desechos, que ya se ha utilizado para confeccionar zapatos, bolsos y billeteras.

“Hay una gran cantidad de desechos de soja arrojados al río debido a la producción de tofu, así que pensamos qué podemos hacer con este desperdicio y convertirlo en algo valioso”, detalla una de las implicadas en el proyecto.

Si bien el cuero de soja aún no está disponible para el público, la diseñadora Ratna Djuwita espera que pronto se convierta en una “nueva tendencia de material” en el futuro y que, al compartir el proceso, las personas “puedan aplicarlo de forma gratuita”.

De acuerdo con sus declaraciones, también se están realizando investigaciones para convertir “los residuos líquidos de soja en celulosa comestible o biocombustible”.

El tofu, de cuya elaboración se aprovechan los residuos para elaborar este “cuero”, es uno de los alimentos más comunes para los habitantes de Indonesia, y contiene una gran cantidad de proteínas.

Con una producción de tofu y tempeh que va desde la pequeña escala (industria doméstica) hasta gran escala (fábrica), Indonesia genera una cantidad enorme de desechos líquidos que contaminan y envenenan las aguas de los ríos. Precisamente lo que pretenden estas jóvenes es evitar la contaminación y producir objetos útiles y agradables para los seres humanos.

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