Yahoo Finanzas El extraño caso de Manaos: la gaseosa argentina que llegó hasta el territorio menos pensado
Sabemos que a la hora de posicionar una gaseosa en el mercado, la inversión en espacios publicitarios juega un papel fundamental. Pero cuando el presupuesto no alcanza para contratar grandes agencias o armar superproducciones, el ingenio deberá suplir ese lugar para lograr destacarse.
El último comercial de Manaos, una marca pequeña y de fuerte sentimiento nacionalista por Argentina, tiene por eje su llegada hasta uno de los rincones más remotos del continente: las Islas Malvinas. Un territorio en disputa entre Argentina y Gran Bretaña, aunque hayan pasado más de 30 años de finalizada la guerra de 1982.
La campaña lleva por nombre “Diálogo por Malvinas”, y podemos ver el recorrido que la gaseosa cola hace desde su producción en una modesta fábrica de Buenos Aires hasta el archipiélago situado en la plataforma continental de América del Sur.
Si bien en la actualidad se las considera como una colonia británica, la tierra se encuentra dentro de los límites que incluye el mar argentino. Pero sin que parezca una provocación con ánimos de conflicto, Manaos parece intentar repatriar un territorio que despierta profundos sentimientos en los argentinos.
“Aunque sea difícil, aunque parezca un sueño”, son las palabras que eligieron para dar mayor fuerza a lo que intentan transmitir como concepto: llevar el sabor de la gaseosa Argentina a toda la Argentina. La campaña también manifiesta su apoyo a la cruzada “Diálogo por Malvinas”, que busca una reunión seria y a conciencia entre ambos países. Pero por ahora sólo cuenta con apenas más de mil seguidores en redes sociales.
Bajo presupuesto con altas aspiraciones
Si bien la marca se jacta de haber llegado hasta las “Falkland Islands”, y reclamar su soberanía al cambiar el letrero por su nombre en español, no es que haya logrado una distribución oficial y pueda conseguirse en los supermercados de las islas.
Y aun más, no temen mostrar el precario método de llegada. El mismo que podría utilizar cualquiera capaz de pagar el pasaje en avión y hacer un poco de lugar en la maleta para un par de envases de menos de un litro.
Es que no se trata de un nuevo punto de venta o campaña de instalación, sino de dejar en claro que la gaseosa que se autodefine como “bien argentina”, está a favor de recuperar lo que se perdió y planta bandera (literalmente con su producto) en el lugar de los hechos.
¿Qué opinas de esta apuesta que hizo la marca? ¿Provocación o búsqueda de dialogo con buenas intenciones?
