Yahoo Finanzas Ahora se puede encontrar la pareja de tus sueños a través del ADN
Olvídate de Tinder, un número creciente de adultos solitarios están aprovechando las pruebas genéticas en su búsqueda de un alma gemela.
Concertar una cita con alguien que te guste es a veces complicado, razón por la cual algunos jóvenes japoneses abandonan por completo el flirteo. Sin embargo, quieren tener una pareja y con el tiempo casarse. ¿Qué hacer cuando una persona no quiere tener citas, pero quiere encontrar pareja y casarse?
La respuesta obvia es tratar las múltiples aplicaciones para teléfonos móviles en las que puedes conocer a personas con intereses similares, con el nivel educativo que buscas e incluso por el nivel de ingresos que te parece adecuado. No obstante, todos estos datos tampoco te garantizan que seas compatible con las personas a las que les guste tu foto o tus pasatiempos; después de todo, emparejarse basado en una lista de deseos es algo que en la mayoría de los casos no funciona.
Esa fue la razón que llevó a algunas empresas japonesas a buscar algo que fuera más seguro para emparejar a las personas y ahora ofrecen un nuevo servicio que encuentra parejas a través de exámenes de ADN.
Un caso real
Ayumi Miyazaki ya había probado varias opciones y aplicaciones de celulares en los últimos años para tratar de conseguir a su alma gemela, fiestas de solteros, amigos comunes, Tinder, pero nada parecía funcionar para esa arquitecta de 37 años de la ciudad japonesa de Kawasaki.
Cansado de tantos intentos fallidos, en 2017 decidió entregar su destino amatorio a la ciencia y dejar que un laboratorio escogiera su pareja ideal.
Fue entonces cuando se unió a Gene Partner Japan, un servicio de emparejamiento de ADN que tiene su sede central en Tokio y afirma que puede emparejar a las personas en función de su compatibilidad genética.
Solo tuvo que tomar saliva de su boca con un hisopo y ahora, dos años después de que tomará la prueba, está felizmente comprometida con Shun Orihara, un administrador de 34 años que vivía en ese entonces en Yokohama.
El precio por encontrar a su futuro marido fue de 36.000 yenes (unos 330 dólares).
El emparejamiento por ADN es un nicho emergente dentro de la industria de las pruebas genéticas, que han servido para determinar la salud general y rasgos como la ascendencia y el origen étnico de una persona, y en algunos países los están usando para emparejar a las personas.
“Gene Partner me presentó a dos hombres y, según sus resultados de ADN, solo uno era compatible conmigo (…) El hombre con el que era compatible ahora es mi prometido”, aseguró Miyazaki al diario South China Morning Post.
Un nuevo sector en auge
Si bien por el momento no existen cifras exactas que indiquen el tamaño del mercado de emparejamiento por ADN, la industria de pruebas genéticas en Asia-Pacífico se valoró en 1.320 millones de dólares el año pasado y se proyecta que alcanzará los 2.480 millones para 2024, según un informe de la firma de análisis Investigación del Mercado Futuro.
Al auge de las compañías de pruebas genéticas que surgieron se sumaron otras como Nozze, un servicio de emparejamiento con 25 años de experiencia que incorporó a su oferta la prueba de ADN para compatibilidad en enero de 2019 y desde entonces su popularidad se ha ido incrementando con cientos de solicitudes mes a mes.
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Este no es un servicio nuevo a nivel mundial, ya que algunas compañías en Europa y Estados Unidos ya han estado ofreciendo servicios de emparejamiento genético, pero en Japón se ha desarrollado más rápido que en el resto mundo.
Ha sido tanto el interés de los japoneses por esta nueva alternativa que la compañía celebró a mediados de 2019 su primera “Fiesta de Coincidencias de ADN” en Tokio, con el fin de emparejar a 26 hombres y mujeres.
Para unirse a este servicio los solicitantes deben pagar 32.400 yenes (unos 300 dólares) más el costo de la prueba de ADN, que tiene un precio de 54.000 yenes (unos 500 dólares).
El ADN también se extrae de la saliva, y los científicos examinan específicamente el complejo del gen HLA para buscar coincidencias, o más bien diferencias, entre los participantes.
Los genes HLA, que, en términos generales, tienen que ver con el sistema inmune, cuentan con aproximadamente 16.000 variaciones, y aparentemente se pueden compensar las diferencias de la otra persona y esto es clave en el atractivo percibido entre los humanos.
Cuantas más diferencias mejor
Aunque no existen pruebas concretas ni estudios que avalen esta ciencia detrás del emparejamiento genético, la teoría general asegura que muchas especies animales, entre ellas los humanos racionales, por naturaleza prefieren parejas con más variaciones en su ADN con el fin de aumentar la posibilidad de descendencia plausible.
El Laboratorio Médico Shinagawa, que maneja las pruebas de ADN para Nozze, aseguró a Japan Today que entre más diferencias tengan dos personas entre sus genes HLA, más atractivos serán los hombres para las mujeres, y viceversa, y mayor será la probabilidad de embarazo y descendencia entre ellos.
Las empresas de emparejamiento genético usan esta información del laboratorio para dar un valor numérico a la compatibilidad de una pareja, es decir, una pareja es totalmente compatible si el 0% de sus alelos HLA coinciden. De esta manera, las compañías usan un criterio científico para la búsqueda de una pareja adecuada, en lugar de factores como la profesión, ingresos o la apariencia.
Japan Today aseguró que en la primera “Fiesta de Coincidencias de ADN” de Nozze, un total de 26 hombres y mujeres se reunieron por primera vez. Pasaron por el típico proceso de citas rápidas, donde hombres y mujeres podían conversar por tres minutos con cada uno de los participantes del sexo opuesto, pero separados por una cortina para evitar cualquier preconcepción basada en la apariencia.
Cuando se acabó la primera ronda se levantó la cortina y todos pudieron hablar una segunda vez con cada uno de los participantes, pero cara a cara. Al final podían elegir a tres de los asistentes que más les gustaran.
Al final de la fiesta se formaron cuatro parejas, y según los organizadores de la fiesta, todas tenían índices de compatibilidad por ADN por encima del 80 por ciento. Una de las parejas, compuesta por un hombre de 41 años y una mujer de 32 años tenía una compatibilidad del 98 por ciento.
El portal de noticias Livedoor News entrevistó a la mujer y ella indicó que como “ya sabía que era una buena combinación, me resultó fácil hablar con él”, algo que el hombre confirmó señalando que ayudó un poco saber cuán genéticamente compatibles eran.
Después del evento se fueron juntos caminando por Tokio.
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