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FCC reduce a la mitad sus pérdidas en 2014
El grupo español de construcción y servicios FCC redujo a la mitad sus pérdidas en 2014, a 724,3 millones de euros, después de haber perdido 1.500 millones en 2013, a causa de unas fuertes provisiones y el coste de las reestructuraciones frente a la crisis del sector.
El volumen de negocio del grupo, que ahora tiene entre sus accionistas al magnate mexicano Carlos Slim y al estadounidense George Soros, cayó un 6,2%, a 6.334 millones de euros.
En cambio, el excedente bruto de explotación (EBITDA) creció un 12,1% y sumó 804 millones de euros.
La reducción de la facturación es "atribuible en su mayor parte a la contracción que aún se produce en la demanda de la construcción en España y al crecimiento más selectivo llevado a cabo en dicha área en el exterior", explicó en grupo en un comunicado. "En concreto, los ingresos de construcción ceden un 20,1% interanual debido al continuado ajuste, durante los últimos años, de la inversión pública en infraestructuras en España", agregó. "De este descenso, cuatro quintas partes corresponden al mercado español y solo un quinto al resto de obras en distintos países del mundo", puntualizó.
FCC también subrayó el éxito de la ampliación de capital de 1.000 millones de euros, tras la cual Slim se convirtió en su mayor accionista. A mediados de enero, FCC había anunciado la entrada a su consejo de administración del magnate mexicano, quien además nombró a otros tres miembros del consejo, con lo que pasó a tener tantos representantes como la hija del fundador del grupo, Esther Koplowitz, según había indicado el grupo. El rey mexicano de las telecomunicaciones se convirtió en diciembre en el primer accionista de FCC, justo por delante de Koplowitz, al adquirir un 25,6% de su capital.
Después de dudar durante mucho tiempo, la hija del fundador decidió ceder las riendas del gigante español, asfixiado por una deuda de 6.430 millones de euros a finales de septiembre. El origen de esta deuda es, principalmente, la explosión de la burbuja inmobiliaria en España, donde el grupo había multiplicado sus inversiones.
FCC renegoció la financiación de la deuda con sus acreedores antes de iniciar la ampliación de capital.
Antes de cerrar el trato con Slim, los accionistas del grupo habían entablado negociaciones con el estadounidense George Soros, que en enero había adquirido alrededor del 4% del capital, para que aumentara su participación, pero no llegaron a un acuerdo.
