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¿Gastar menos o ganar más?: qué elegir para conseguir tus objetivos financieros

El verano está en ese momento álgido en el que llegan la mayoría de cenas, fiestas, regalos o eventos. Durante estas fechas, siempre empezamos a plantearnos cómo intentar gastar menos, aunque también ronda por nuestra mente ganas más o tener un ingreso extra.

De la combinación de ambos es de donde surge el dinero que nos permite afrontar estas opciones de ocio. Pero muchos a veces solo apuestan por una, que suele ser ahorrar más. ¿Realmente es mejor gastar menos que gastar más?

Cada uno de ellos posee ventajas e inconvenientes particulares. El equilibrio de ambos puede llegar a ser lo más interesante de cara a conseguir una estabilidad financiera. Las dos son necesarias porque nos permiten controlar, ahorrar y además, hacer que nuestros ingresos sean cada vez mayores. No obstante, existen varias razones que explican por qué es mejor ganar más dinero en lugar de gastar menos.

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El equilibrio entre ganar más y gastar menos puede llegar a ser lo más interesante de cara a conseguir estabilidad financiera. Getty Creative.
(Ridofranz via Getty Images)

Reducir el gasto a largo plazo es difícil

En demasiadas ocasiones habremos oído que es más fácil controlar el gasto que el ingreso, pero esta frase a largo plazo puede convertirse en una falsedad. En un principio, revisar el presupuesto que tenemos y controlar qué vamos a gastar parece sencillo. Se trata de invertir tiempo en detectar todos los gastos y posteriormente intentar reducir algunos de ellos basándonos en prioridades.

Estas decisiones son fáciles de tomar para los meses próximos, pero no es tan sencillo para aquellas épocas en las que el nivel de ingresos puede variar. Los planes de reducir los gastos a medio largo y plazo pueden estar llenos de obstáculos que no dependen de nosotros. Es cierto que se puede, pero requieren de mucho esfuerzo y tesón.

Debemos tener en cuenta también que el ahorro tiene unos límites, existen gastos que va a ser imposible que elimines. Llegará un punto en el que nos vamos a poder "apretar" más el ahorro.

Ganar más permite un estilo de vida más cómodo

Para conseguir tus objetivos financieros es necesario contar con un estilo de vida sostenible, que te permita darte algunos caprichos de vez en cuando. Además de esto, la reducción de los gastos supone un sacrificio que puede afectar de lleno en el plano emocional.

Por tanto, una de las principales razones para optar por la opción de generar más ingresos es para cuidar estos aspectos psicológicos. Siempre está bien cuidar la cantidad de dinero que gastar, pero privarse de todo el ocio o de aquello que nos hace distraernos o disfrutar puede ser un grave error.

Aumentar ingresos

Existe una creencia generalizada en relación con que es imposible generar más ingresos. No obstante, esto no es cierto. Se trata de buscar nuevas fuentes de ingresos que compensen el déficit económico que tenemos cada mes. Mientras que el ahorro tiene unos límites, por el contrario, la capacidad de generar dinero es infinita.

Para hacerlo, es posible buscar trabajos ocasionales que complementen a nuestro empleo principal. Se podría optar por un trabajo a tiempo parcial o plantearse emprender un pequeño negocio propio. Puede ser algo sencillo como cuidar de niños los fines de semana , pasear perros o dar clases particulares a conocidos.

Todo depende del interés individual

Realmente decidir entre una de las dos opciones está más relacionado con la situación personal de cada uno que con la teoría. Cuando alguien está pasando por una situación de poca estabilidad laboral y económica, sí sería conveniente reducir gastos, aunque sin perder nunca de vista la posibilidad de ganar más dinero en un futuro.

En el supuesto contrario, si nos encontramos en una situación estable podría resultar más interesante plantear posibilidades que generar ingresos. No solo se trata de ganar dinero, sino también de buscar la calidad de vida que nos permite vivir con comodidad.

Todo lo anterior expuesto, se podría resumir en un solo concepto: la frugalidad, que se basa en plantear un sistema económico doméstico a largo plazo que suponga un verdadero ahorro. Es decir, consistiría en tener una planificación lo suficientemente clara para que el éxito financiero venga finalmente de ese ahorro. Pero un estilo de vida frugal significaría tener muchos menos caprichos, por ello la tendencia debería siempre dirigirse hacia ese equilibrio entre ganar y ahorrar y así poder perseguir nuestras metas de una forma más sencilla.

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