Esta guerrera se convirtió en millonaria cuando venció a la “invencible’’, pero su riqueza viene de algo superior

Larissa Pacheco es una mujer millonaria. Quizá pudiera pensarse que lo más valorado por la brasileña sería ese $1 millón que conquistó en la final de Professional Fighters League, pero hay algo más que la mueve por dentro y le dice que este solo es el comienzo de otros millones.

Más allá del valor monetario, para Pacheco ha sido una especie de redención su victoria, después de dos intentos fallidos, a fines de noviembre sobre Kayla Harrison, una peleadora que muchos consideraban invencible en este circuito de artes marciales mixtas, porque a la nueva reina nadie le daba posibilidades.

Se trata de un momento inolvidable para alguien que lidió con la adversidad y que, de pronto, ha visto como todos la miran con un respeto diferente. Lo mejor es que Pacheco todavía es muy joven para los deportes de combate y ahora se ha abierto una puerta a retos más importantes.

¿Qué es lo que más recuerdas a días de tu victoria?

“Un poco de todo. Fue una pelea muy dura. Los momentos de mayor impacto para mí fueron de la batalla en que estaba logrando dominar, en que lograba defender sus ataques. Pero sobre todo, recuerdo el momento en que dijeron mi nombre y anunciaron que era la campeona’’.

Harrison, como se esperaba, vino a usar su lucha, pero te defendiste muy bien.

“Sabía que ella me iba a colocar hacia abajo, que buscaría el takedown, pero defendí todo lo posible contra eso. Ella trabaja muy bien el grappling, pero mi experiencia me permitió atacarla con golpes. La pude conectar con muchos golpes y controlar la intensidad de la pelea’’.

La superaste en striking y la obligaste a luchar por completo.

“Sabía que no tenía esa parte del striking tan buena. Sabía que yo era superior a ella. Estaba consciente de la distancia en que me encontraba y sabía que no me iba a caer. Me preparé para negar el juego de ella y que se cansara. Ella quería agarrarme, pero estuve todo el tiempo atacándola. Ella no esperaba eso’’.

Y cuando dijeron tu nombre, ¿qué sentiste?

“Una sensación inexplicable porque yo trabajé mucho durante muchos años para convertirme en campeona de la más grande organización. Lo que siento es grandioso. Es una realización personal que llevó mucho trabajo y dedicación que fueron reconocidos finalmente. Puede mostrar mi trabajo, que soy una gran peleadora. Son varios sentimientos juntos, sobre todo de realización’’.

¿Qué viene de ahora en adelante, porque eres aún muy joven?

“Soy joven todavía, pero comencé muy joven. Estuve en UFC, en Jungle Fight. Tengo mucha experiencia de grandes peleas. Hoy le puedo mostrar al mundo que también puedo ser una grande dentro de esas organizaciones. Es algo maravilloso’’.

¿Regresarías algún día a UFC, donde te cortaron alguna vez?

“No sé, es posible, pero por el momento estoy bien en PFL. Ha sido una casa para mí y me ha dado las posibilidades de buscarme la vida. Hay muchos peleadores que pasan mucho trabajo para mantenerse. En PFL tengo que pelear cuatro veces en el año y eso me mantiene en ritmo. Tienes más chance de ganar $1 millón. Quién sabe en el tema de la UFC’’.

$1 millón, ¿qué vas a hacer con $1 millón?

“Es mucho dinero. Quiero comprarle una casa a mi mamá. También me quiero comprar una para mí para tener mi descanso, la seguridad, vivir de manera confortable. Mis prioridades son esas. Pero no tengo pretensión de gastar ese dinero. Quiero estabilizar mi carrera, estar tranquila para poder trabajar en paz y mostrar mi evolución’’.

¿Habrá una cuarta pelea contra Harrison?

“Quién sabe, todo depende de ella. La posibilidad está ahí. Si ella quiere hacer esa pelea, que sería muy grande para un Pago Por Ver, yo estoy dispuesta. Quero hacer las mayores peleas posibles contra las mejores. Soy la campeona ahora. Estoy abierta a todas las posibilidades’’.