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En una jornada muy negativa para el valor de los granos en Chicago, la soja cayó un 5,6%

Luego del feriado por el Día de la Independencia, la primera rueda de negocios de la semana en la Bolsa de Chicago cerró con fuertes bajas para los precios de los granos, producto de la liquidación de contratos ejercida por los administradores de los grandes fondos de inversión, que reaccionaron así ante los síntomas de recesión en la economía de los Estados Unidos y de la Unión Europea, donde hoy cayeron los principales indicadores bursátiles.

Con una quita del 5,6%, la soja fue el producto que registró las peores bajas en la plaza estadounidense, donde la posición septiembre, que marca la entrada de la nueva cosecha, retrocedió de 520,57 a 491,26 dólares por tonelada. Para la oleaginosa hubo un combo bajista que acentuó la decisión de los especuladores de liquidar contratos y de retirar ganancias: Indonesia, petróleo, lluvias y real.

En detalle, la decisión del gobierno de Indonesia de elevar los cupos de exportación de aceite de palma para aligerar sus existencias generó un derrumbe en el mercado de los aceites vegetales que golpeó –y fuerte– al aceite de soja, que terminó la rueda de Chicago con un quebranto del 7,8%, al pasar de 1396,61 a 1288,14 dólares por tonelada. Esa caída se vió agravada por el descenso del valor del petróleo, que superó el 8% y que ubicó al crudo por debajo de la marca de los 100 dólares por barril.

Respecto del clima, lluvias en los últimos días sobre las zonas productoras de granos gruesos del medio oeste de los Estados Unidos, que se sumaron a pronósticos de precipitaciones mayores a las marcas normales en los reportes extendidos, presionaron sobre los precios por su eventual impacto positivo sobre suelos y cultivos.

Y respecto del real, hoy se acentuó su devaluación frente al dólar, un movimiento que mejora la competitividad de las exportaciones de Brasil, el principal proveedor mundial de poroto de soja, que, además, está incrementando su participación en el mercado de la harina.

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Para el caso del maíz, la caída de la posición septiembre fue del 4,4%, con una transición para su ajuste de 243,98 a 233,16 dólares por tonelada. El cereal compartió fundamentos negativos con la soja, como el derrumbe del petróleo, que afecta el valor de las materias primas utilizadas para la producción de biocombustibles; las lluvias que favorecen los cultivos estadounidenses, y la devaluación del real, que mejora el panorama para las ventas externas brasileñas, en pleno avance de su cosecha.

En cuanto al trigo, que en las últimas dos semanas acumuló bajas mayores al 20% como consecuencia del avance de la cosecha de invierno en Estados Unidos, a la que ahora se agregó el progreso de la recolección en el resto de los grandes proveedores del hemisferio norte, hoy cayó en Chicago un 4,6%, con una variación para la posición septiembre de 310,85 a 296,56 dólares por tonelada.

Para el caso del trigo, además de la influencia bajista de la cosecha, hoy también resultó negativa la devaluación del euro frente al dólar, que ubicó a la divisa europea en el nivel más bajo de los últimos 20 años. Esto potencia la competitividad de las exportaciones de la Unión Europea, en detrimento de las estadounidenses, justo cuando el grano nuevo ingresa en el circuito comercial.