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Berlín, 4 dic (EFE).- El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, y el canciller alemán, Olaf Scholz, presidieron este lunes la segunda edición de las consultas de alto nivel germano-brasileñas, que se celebraron bajo el signo de las turbulencias en la negociación del acuerdo comercial UE-Mercosur.
Ambos líderes señalaron en la rueda de prensa posterior que "no se rendirán" e intentarán convencer a todas las partes implicadas para que el pacto, que inicialmente estaba previsto concluir antes de finales de año, pueda ser salvado.
La cumbre de países del Mercosur el jueves que viene en Río de Janeiro será un momento "decisivo", aseguró Lula, que manifestó la esperanza de que "la UE se decida si está interesada o no en concluir el acuerdo".
"Disposición al compromiso"
"No me rendiré antes de haber hablado con todos los presidentes", dijo Lula, que afirmó que tras 23 años de negociación "sería irrazonable" que no se avanzara con el acuerdo.
A las dificultades que implica el traspaso de poderes en Argentina se suman las reticencias francesas, dijo Lula, que según él tienen una larga tradición relacionada con los intereses políticos de los agricultores franceses.
Scholz, por su parte, pidió "el mayor pragmatismo y la mayor disposición al compromiso posibles" a todos los implicados, ya que la conclusión del acuerdo sería a su juicio "un gran avance".
Al mismo tiempo expresó el convencimiento de que si la Comisión Europea (CE) logra completar las negociaciones, no habrá dificultades para que el Consejo de la UE y el Parlamento Europeo ratifiquen lo acordado.
"Estoy convencido de que habrá una mayoría en ambas instituciones", afirmó.
Sector económico alemán urge al acuerdo
La economía y la industria alemanas aprovecharon la visita de Lula para resaltar el "potencial" de Brasil como socio comercial y para urgir a la conclusión del acuerdo comercial con el bloque de países formado por Brasil, Argentina, Uruguay y Paraguay.
El presidente de la Federación de la Industria Alemania, Siegfried Russwurm, instó a los políticos a avanzar con "flexibilidad y voluntad de compromiso" hacia la firma del pacto antes de que acabe el año.
Destacó que con este acuerdo, la UE y Sudamérica podrán crear "la mayor zona comercial del mundo, con más de 720 millones de personas, que abarcará casi el 20 % de la economía mundial y más del 31 % de las exportaciones mundiales de mercancías".
También el presidente de la Iniciativa Latinoamericana de la Economía Alemana (LAI), Ingo Kramer, alertó de que si no hay un acuerdo antes de que termine el año "existe el peligro de que esto se convierta en una 'neverending story' (en inglés, una historia interminable)"