“Monotech”: el Gobierno confirmó que el proyecto de ley para freelancers será tratado en sesiones extraordinarias

A dos meses del lanzamiento del dólar tecno, el tipo de cambio diferencial para la industria vinculada a la economía del conocimiento que vende servicios al exterior, fuentes oficiales confirmaron que el próximo 20 de diciembre el Gobierno anunciará finalmente la presentación el proyecto de ley que permitirá a los trabajadores tecnológicos monotributistas -los llamados “monotech”- facturar y cobrar en moneda extranjera.

El proyecto de ley, que había sido anticipado en septiembre por el secretario de Economía del Conocimiento, Ariel Sujarchuk, y que fue postergado hasta ahora, será tratado en el periodo de sesiones extraordinarias del Congreso. En tanto, el acto de presentación de la iniciativa oficial se realizará en el Centro Cultural Kirchner (CCK) y estará encabezado por el ministro de Economía, Sergio Massa, Sujarchuk y el ministro de Cultura, Tristán Bauer.

Si bien en las últimas semanas trascendieron críticas a la iniciativa por parte de las cámaras empresariales debido a la falta de competitividad que implicaría la medida para contratar y retener a las personas, y a la necesidad de gozar de un beneficio fiscal similar, fuentes consultadas por LA NACION confirmaron que el proyecto mantiene su espíritu original. “No tiene cambios”, aseguraron en el Gobierno.

La iniciativa está dirigida a los profesionales que facturan sus servicios basados en el conocimiento (SBC) al exterior y a personas que participen en competencias de e-sports (nivel profesional). Si se aprueba, permitirá a los trabajadores freelancers ingresar hasta US$30.000 por año al país de manera legal, sin obligación a liquidarlos.

De esta manera, quedaría establecido un nuevo esquema tributario para los profesionales del mundo “tecno”. Además, el proyecto busca aumentar la recaudación de divisas por servicios de exportación no registrados, evitar el paso de los trabajadores tecnológicos a la informalidad y fomentar la registración en el sistema tributario de forma “ágil y sencilla”, con acceso a obra social, entre otros puntos.

Las oficiales fuentes consultadas aclararon que “la medida es sin costo fiscal” y que “habrá distintas categorías disponibles de facturación” para contemplar a los exportadores de SBC y a los e-gamers, ya sean autónomos o pequeños grupos. Según dijeron, la industria de los videojuegos en la Argentina está constituida por más de 100 empresas nacionales de gamming y 1500 profesionales (freelancers, full y part time). Asimismo, movilizan el mercado por unos US$72.300.000 y exportan más del 70% de su producción.

Dada la relevancia del subsector es que, además, el Gobierno presentará el programa “Potenciar Industria de los Videojuegos”, para “fomentar la transferencia interregional de conocimientos, habilidades y tecnología para la producción de videojuegos; promover la producción nacional de desarrollos de entretenimiento digital e interactivo; e incentivar la inversión y el desarrollo de recursos técnicos y humanos especializados”. Financiará proyectos por $250 millones.

Asimismo, se anunciará el financiamiento de iniciativas de producción audiovisual en las que esté asociado el trabajo de entre al menos una productora nacional y una o más empresas internacionales. Según precisaron las fuentes oficiales al tanto del tema, ambas partes deberán comprometerse a liquidar un mínimo de US$500.000 o su equivalente en otras monedas en el Mercado Único y Libre de Cambios (MULC).

Críticas al proyecto

Si bien aún no hay datos oficiales, en la industria estiman que unos 30.000 profesionales trabajan actualmente para el exterior como consecuencia del incentivo que genera el hecho de cobrar en moneda extranjera.

“El proyecto de ley que está evaluando el Congreso para los profesionales freelancers del sector tecnológico es una respuesta cortoplacista a una necesidad urgente de divisas, pero representa una amenaza para la industria a mediano plazo”, expresó la Red Federal de Polos y Clusters de Tecnología, en un comunicado semanas atrás.

“Esta fuga de talentos del rubro tecnológico pone en evidencia una situación muy compleja y difícil de resolver en el corto plazo: la falta de competitividad para las empresas locales de contratar y retener a sus talentos como consecuencia de la brecha cambiaria” , agregaron desde la entidad.

La red, que está integrada por representantes de 25 clusters, asociaciones y cámaras tecnológicas de todo el país, considera que el “monotech” es una forma de contratación “liviana” para generar flujo de divisas para paliar la coyuntura. “Es importante pensar en medidas que faciliten el crecimiento de las exportaciones, pero éstas no deben ser contraproducentes para el futuro de la industria”, aseguraron.

Y precisaron: “Complementar el monotributo tech con medidas que brinden igualdad de condiciones a las empresas que exportan sólo agravaría la situación de la enorme mayoría de las pymes tecnológicas de nuestro país”.

Por su parte, desde la asociación sindical Unión Informática (UI) reconocen la competencia que implicaría el “monotech” para las grandes empresas, pero, aun así, entienden que representaría un incentivo para el mundo de los freelancers. “Si bien es positivo y estamos de acuerdo con que haya un tipo diferenciado para liquidar las divisas acá, [la medida] no es suficiente”, expresó Ignacio Lonzieme, secretario general de UI.

El informático relativizó el alcance real que podría tener la medida y el interés que despierta en los profesionales. “Hay falta de expectativa respecto de que esto [monotech] haga crecer efectivamente al sector. Aunque va en el sentido correcto, si termina siendo muy engorroso administrativamente, muchos van a terminar no haciéndolo y recurriendo a las metodologías que van por fuera de la formalización”, opinó.

Incluso, Lonzieme fue más allá de la iniciativa oficial. “Lo que habría que hacer es crear un sistema de registro porque hay muchos [profesionales] que quieren liquidar acá, que les gustaría hacerlo por derecha, sin que la liquidación los liquide y, a su vez, establecer un esquema de fomento de creación de empresas porque actualmente hay un montón de responsables inscriptos y la tendencia va a seguir creciendo”, aseguró.

Desde el sindicato consideran que “hay que reformular el ecosistema” , teniendo en cuenta que “la actividad [informática] se mueve mucho por proyectos de tres, cuatro, cinco empleados, o por una infraestructura que funciona básicamente como una microempresa”.

“Se deben crear registros para que de la misma manera que las empresas puedan liquidar a un tipo de cambio diferenciado, puedan registrar a los profesionales de otra forma, ya que muchas veces trabajan por seis meses o un año” , explicó Lonzieme. Y concluyó: “[Las empresas] quieren seguir manteniendo un esquema que en un mundo ya no existe más; deben formalizar de otra manera y con las herramientas que hay hoy alcanza y sobra”.