Un pequeño eclipse para una gran luna
Madrid, 16 sep (EFE).- Va a ser el penúltimo gran evento astronómico del año; un pequeño eclipse parcial de la Luna, pero va a coincidir con el plenilunio de septiembre y con una de las cuatro "superlunas" que se repiten durante los últimos meses de cada año cuando el satélite de la Tierra completa su fase llena.
El eclipse parcial de Luna, último de este año, se producirá durante la madrugada del miércoles, y se trata de un evento que se puede ver a simple vista porque no entraña ningún peligro -a diferencia de los de Sol- y no requiere ningún tipo de instrumentación especial.
El fenómeno será visible desde Europa, América y África, y es el penúltimo de los eventos astronómicos importantes señalados en el calendario de 2024, que se completará con un eclipse anular del Sol el próximo 2 de octubre, aunque éste ya sólo será visible en algunos lugares de Sudamérica.
Desde España (tanto desde la península como desde Canarias) el eclipse será también visible a partir de las 4:12 (hora peninsular), llegará al máximo a las 4:44 y la Luna recuperará todo su esplendor a las 5:18, según los datos del Instituto Geográfico Nacional (IGN).
Y aunque el evento astronómico se podría ver desde España, las predicciones de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) española apuntan que las nubes van a impedir esa contemplación en muchos lugares, ya que los cielos van a estar muy encapotados en muchos puntos, sobre todo en el este peninsular, en Baleares y en Canarias.
El eclipse lunar, que se produce cuando la Tierra se interpone entre el Sol y la Luna generando un cono de sombra que en este caso será muy pequeña, no tiene en este caso un carácter excepcional, ya que cada año se repiten entre cuatro y siete veces (de Sol o de Luna), pero sí puede resultar especialmente llamativo al coincidir con una de las cuatro "superlunas" de 2024.
Las "superlunas" se producen cuando la fase llena del satélite coincide con su mayor aproximación a la Tierra durante la trayectoria elíptica que describe durante su órbita, lo que provoca que el astro parezca mucho más grande y brillante a la vista.
En total, desde se comience la fase "penumbral" del eclipse, el fenómeno completo se va a prolongar durante 4 horas y 6 minutos, aunque la fase de "parcial" -cuando la Luna muestra la sombra que le proyecta la Tierra- será de sólo 1 hora y 3 minutos.
Y a la vista, el eclipse provocará un ligero oscurecimiento -apenas perceptible a simple vista- de todo el disco lunar durante la fase "penumbral" y aparecerá un pequeño mordisco durante la fase de "parcial", aunque éste apenas afectará al 3,5 por ciento de la superficie visible del astro, según han señalado varias páginas web especializadas en observación astronómica.
Tras el del miércoles, la Luna volverá a eclipsarse en dos ocasiones durante el próximo año (los días 14 de marzo y 7 de septiembre), y en los dos casos será un eclipse total visible en numerosos lugares del mundo, y entre ellos España, desde donde se pondrá además contemplar el eclipse parcial de sol del próximo 29 de marzo, pero no el del 21 de septiembre del próximo año.
El eclipse del miércoles coincide con la segunda de las "superlunas" del año, conocida popularmente en España como "Luna de cosecha" por coincidir con el inicio de la recolección en muchos lugares, y llega cuatro días antes del próximo equinoccio -cuando la luz del día y la noche son prácticamente iguales-, el día 22 de septiembre, cuando comience oficialmente el otoño.
(c) Agencia EFE