Perspectivas de los activos digitales: Bitcoin, Ethereum y más
Aprobación de los ETPs sobre Ethereum al contado y tendencias de adopción
La aprobación de los ETPs sobre Bitcoin en EE.UU. en enero de 2024 se ha traducido en unas entradas netas de más de 17.000 millones de dólares1, procedentes en su mayor parte de los inversores minoristas. En julio de 2024, la largamente esperada aprobación en EE.UU. de los ETPs al contado sobre Ethereum amplió el acceso de los inversores a las criptomonedas más allá del Bitcoin. La contratación inicial de los ETPs al contado sobre Ethereum fue más baja en comparación con los ETPs sobre Bitcoin, pero era una evolución que se esperaba debido a la menor capitalización de Ethereum. Sin embargo, este producto podría atraer a otros grupos demográficos que buscan una alternativa de inversión familiar y sencilla dentro de sus carteras actuales.
De acuerdo con la edición 2023 de la Encuesta sobre activos digitales a inversores institucionales de Fidelity Digital Assets, más del 50% de los inversores encuestados había invertido en activos digitales y el 65% pretendía comprarlos. Está aumentando el interés entre los inversores asiáticos y europeos y más de una cuarta parte de los encuestados refirió un cambio positivo en su percepción de los activos digitales.
En qué se diferencia Ethereum de Bitcoin
Aplicaciones que tienen: Bitcoin funciona como un sistema de pago peer-to-peer descentralizado, mientras que Ethereum es una plataforma multifunción que facilita la creación de varias aplicaciones y servicios usando contratos inteligentes.
Mecanismo de consenso: Bitcoin utiliza la prueba de trabajo (Proof of Work, PoW), mientras que Ethereum realizó la transición a la prueba de participación (Proof of Stake, PoS) en 2022. Ambas suponen un sacrificio de capital o riesgo, pero difieren en su enfoque. La PoW de Bitcoin conlleva consumir electricidad, potencia de cálculo y equipos informáticos, priorizando la descentralización y la seguridad. Por el contrario, la PoS de Ethereum supone poner a disposición los tokens de Ether, lo que reduce el consumo de energía en más de un 99% y mejora la sostenibilidad y la escalabilidad.
La tesis de inversión: La oferta limitada de Bitcoin lo convierte en un activo monetario y un depósito de valor aspiracionales, especialmente en un mundo cada vez más digital. Por otro lado, Ethereum es capaz de procesar transacciones complejas y se entiende mejor como una plataforma tecnológica con valor percibido ligado al uso de la red, lo que permite diversas aplicaciones más allá del uso monetario.
Formas de acceder a la economía descentralizada: Bitcoin puede evolucionar hasta convertirse en el nuevo oro digital debido a su oferta limitada, mientras que Ethereum podría complementar o incluso sustituir a toda la columna vertebral de las finanzas. Aunque históricamente Bitcoin y Ethereum han estado muy correlacionadas, existe la posibilidad de que se desvinculen a medida que madure esta clase de activos. Es importante entender sus diferentes aplicaciones y distinguir entre estos activos, ya que sus precios pueden evolucionar de forma muy dispar, lo que ofrece ventajas tangibles a los inversores.
Consideraciones en torno al Bitcoin como ingrediente de una cartera moderna
El Bitcoin puede ser un valioso componente de una cartera moderna, pero los inversores deben considerar cuidadosamente sus objetivos y tolerancia al riesgo. Con sus características únicas, Bitcoin podría ofrecer rentabilidades más altas, ventajas de diversificación y una mejor liquidez, y se diferencia de otros activos alternativos por su alcance mundial, su contratación ininterrumpida y su liquidez mejorada.
Históricamente, la rentabilidad del Bitcoin ha mostrado un sesgo positivo al alza y la mayor parte de la volatilidad histórica ha sido positiva, como muestra el ratio de Sortino. Aunque el Bitcoin lleva aparejada una gran volatilidad, esta ha disminuido con el paso del tiempo.
En comparación con los activos tradicionales, el Bitcoin ha mostrado una correlación baja desde 2010. Desde mediados de 2023, la correlación entre el Bitcoin y el S&P 500 en un periodo de 30 días ronda el cero. Su correlación con la renta fija es baja, del 0,26, lo que lo convierte en una opción atractiva con fines de diversificación.
Para los inversores que están considerando la posibilidad de exponerse al Bitcoin, el concepto de “dejar atrás el cero” sugiere que destinar al Bitcoin incluso un pequeño porcentaje, inferior al 1%, puede tener un impacto relevante en las rentabilidades ajustadas al riesgo y en el ratio de Sharpe de una cartera tradicional. Sin embargo, es importante tener en cuenta que asignar más del 3% al Bitcoin puede dar lugar a una mayor volatilidad en comparación con las rentabilidades recibidas.
Perspectivas de los activos digitales y sucesos clave a tener en cuenta
El impacto de la reducción a la mitad del Bitcoin, que tuvo lugar en abril de 2024, ha despertado un interés considerable en el universo de los activos digitales. La reducción de los ingresos de los mineros después de cada reducción a la mitad ha ido seguida históricamente de una recuperación del hash rate del Bitcoin, que es la medida de la potencia de cálculo conectada a la red del Bitcoin por los mineros, lo que indica una red resistente. En particular, el hash rate del Bitcoin ha descrito una trayectoria ascendente y tocó techo cuando el Bitcoin alcanzó su máximo histórico en la primera mitad de 2024. A pesar de haber alcanzado un nuevo máximo histórico antes de la reducción a la mitad, posiblemente en previsión del lanzamiento de los ETPs en EE.UU., el comportamiento posterior a la reducción ha sido más moderado.
En el segundo semestre de 2024, el mercado de los activos digitales estará influenciado por varios factores, como la evolución macroeconómica, los cambios normativos y los fundamentales.
Aunque Bitcoin presenta una baja correlación con los activos tradicionales, la volatilidad extrema de un mercado puede afectar a otros. Sin embargo, los fundamentales a largo plazo del Bitcoin no han sufrido cambios, mientras que su liquidez ininterrumpida y su alcance mundial lo posicionan como una potencial fuente de financiación durante una fase de liquidación de posiciones en los mercados.
La introducción de ETPs sobre BTC/ETH al contado en EE.UU. y la tendencia mundial hacia la creación de marcos reguladores para los activos digitales aportan más certidumbre a los inversores.
Aunque las direcciones de Bitcoin no reflejan directamente los usuarios activos debido a la posibilidad de que un usuario tenga varias direcciones, la constante tendencia al alza de las direcciones es una señal positiva de crecimiento a lo largo del tiempo.