Yahoo Finanzas El presidente de Uganda rechaza que el PE critique un polémico oleoducto
Nairobi, 16 sep (EFE).- El presidente de Uganda, Yoweri Museveni, rechazó hoy la resolución aprobada este jueves por el Parlamento Europeo (PE) que denuncia violaciones de derechos humanos y contra el medio ambiente durante la construcción de un macro-oleoducto entre Uganda y Tanzania.
"Deberíamos recordar que (la empresa francesa) Total Energies me convenció de la idea del oleoducto. Si eligen escuchar al Parlamento de la UE, encontraremos a otro con quien trabajar", advirtió Museveni en su cuenta de la red social Twitter.
"De cualquier manera, tendremos nuestro petróleo saliendo para 2025 como estaba previsto. Por tanto, el pueblo de Uganda no debería preocuparse", añadió el presidente, que dirige el país desde 1986 con mano de hierro en cuanto a la disidencia política.
Anteriormente, el vicepresidente del Parlamento ugandés, Thomas Tayebwa, había subrayado que "esta resolución representa el más alto nivel de neocolonialismo e imperialismo contra la soberanía de Uganda y Tanzania".
Este jueves, el PE pidió demorar durante un año la construcción de un oleoducto -financiado en parte por la multinacional francesa Total- de 1.450 kilómetros que transportará petróleo desde el oeste de Uganda hasta el puerto tanzano de Tanga, en el Índico.
La tubería será, de hecho, el oleoducto calefactado más largo del mundo.
El PE también propuso buscar una ruta alternativa para el oleoducto que esquive espacios naturales protegidos, y denunció violaciones contra los derechos humanos como el arresto arbitrario de activistas que se opusieron a la construcción de esta infraestructura o el desalojo forzado de comunidades.
Además, los eurodiputados aconsejaron a los países miembros de la Unión Europea (UE) que no brinden apoyo diplomático ni financiero a la construcción del oleoducto.
Sin embargo, Tayebwa indicó que esa resolución estaba basada en informaciones erróneas o tergiversadas deliberadamente.
Según él, más del 70 % de las personas afectadas por la adquisición de terrenos para construir el oleoducto han sido indemnizadas o reasentadas, y se están realizando esfuerzos para compensar completamente a todas las comunidades afectadas.
El oleoducto, que permitirá a Uganda distribuir su petróleo en los mercados de todo el planeta a través de buques de carga, está financiado tanto por la multinacional francesa Total como por la empresa estatal China National Offshore Oil Corporation (CNOOC).
Mientras Tanzania y Uganda defienden esta megaobra como una oportunidad para crear puestos de trabajo y expandir las economías de ambos países, organizaciones como Oxfam o la Federación Internacional de Derechos Humanos (FIDH) advierten de que pondrán en peligro reservas naturales y los medios de subsistencia de miles de personas.
Está previsto que el oleoducto, que costará unos 10.000 millones de dólares, empiece a funcionar en 2025.
Entonces, Uganda espera convertirse en una nación exportadora de petróleo, posición a la que aspira desde 2006, cuando geólogos hallaron la cuarta reserva de petróleo más grande de África subsahariana alrededor del lago Alberto, en la frontera ugandesa con la República Democrática del Congo (RDC).
(c) Agencia EFE
