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Rajoy se presenta como garante del Estado de Bienestar ante la demagogia

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, protagonista el 24 de febrero de 2015 en el debate sobre el Estado de la Nación, en el Congresod e los Diputados, en Madrid

El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, se presentó este martes como garante del Estado de Bienestar frente a la "demagogia", ante un frenético año electoral que puede confirmar la fuerte eclosión de Podemos.

"Con demagogia no se mantiene el Estado de bienestar, se destruye", declaró en el Congreso de los Diputados durante su discurso sobre el Estado de la Nación, donde arremetió contra aquellos que "hacen promesas al aire", en una alusión a Podemos y sus aliados griegos de Syriza. "Si no hubiéramos logrado reducir a la mitad los intereses de la deuda, habríamos tenido que reducir las prestaciones sociales", afirmó Rajoy, en su balance de los tres años en el poder del Partido Popular, que podría verse desbancado por Podemos en las legislativas de finales de año.

"Es muy peligroso pensar (...) que una política social que no esté sostenida por una sólida política económica es posible", afirmó el líder del PP, uno de los más fieles defensores de las políticas de austeridad en Europa a pesar de las numerosas protestas que eso ha generado en España.

Pero tras tres años de legislatura reclamando paciencia y sacrificios a los ciudadanos, Rajoy presumió ante el Congreso de los Diputados del cambio de tendencia registrado en la cuarta economía de la zona euro: en 2014, se puso fin a cinco años de recesión o estancamiento con un crecimiento del 1,4% y se crearon 400.000 empleos. "Hemos conseguido aquello que muchos creían posible", se felicitó, recordando que a finales de 2011, cuando llegó al poder, cada día 3.200 personas perdían su empleo. Sin embargo, este optimista diagnóstico no lo comparten todos en España, donde el desempleo afecta al 23,7% de la población activa, la segunda cifra más elevada de la Unión Europea después de Grecia (25,8%).

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"Nunca como hoy ha habido tanta precariedad laboral en este país", replicó el líder de la oposición socialista, Pedro Sánchez. "Usted ha hecho que lo que era una pesadilla antes de la crisis, ganar mil euros por mes, se convierta en un sueño inalcanzable para miles de españoles", añadió, criticando la liberalización del mercado laboral.

- Rescate global evitado -

"Es muy peligroso pensar que el Estado de Bienestar se puede levantar sobre hipotecas o, peor aún, que se puede salir adelante con dinero ajeno", insistió Rajoy, tratando de contrarrestar los ataques contra su política de austeridad marcada por severos recortes en sanidad, educación y prestaciones sociales.

"La gran medida social de esta legislatura fue evitar el rescate" de la economía española al que tuvieron que recurrir Grecia, Irlanda y Portugal, aseguró Rajoy que, sin embargo, solicitó una ayuda europea de 41.300 millones de euros en 2012 para salvar su sector bancario.

En su último debate sobre el Estado de la Nación, Rajoy defendió su gestión económica ante un año cargado de citas electorales -municipales, autonómicas y legislativas-, por lo que el discurso del presidente del Gobierno tomó tintes de precampaña electoral. Así, anunció una mejora del crecimiento económico del 2,4% y la creación de más de 500.000 empleos en 2015, al mismo tiempo que lanzó una batería de medidas destinadas a ayudar las clases medias, como un mecanismo para permitir a los particulares sobreendeudados reestructurar o condonar su deuda.

El habitual dominio de populares y socialistas de la política española puede verse amenazada este año por la eclosión de dos nuevos partidos en el Parlamento, Podemos -segunda e incluso primera fuerza en algunos sondeos- y Ciudadanos. Ambos denuncian la corrupción y el desempleo que corroen España, pero mientras Podemos ataca con dureza la austeridad y propone cambios drásticos en la economía, el discurso de Ciudadanos es más moderado, lo que puede atraer a votantes desencantados del PP.