Se avecina una nueva era de dinero fácil a medida que la Fed se acerca al primer recorte de tipos desde 2020
La Reserva Federal (Fed) se aproxima al final de una era, ya que el banco central recortará las tasas de interés por primera vez en cuatro años.
Si la Fed relaja su política monetaria en la próxima reunión del 18 de septiembre, como se espera, marcará oficialmente el final de su campaña de lucha contra la inflación más agresiva que ha aplicado desde la década de 1980. Su tasa de referencia se encuentra actualmente entre el 5,25 y el 5,5 %, un máximo de 23 años.
Se espera que la nueva era de dinero fácil del banco central dure hasta 2025 y 2026. Ese cambio incidirá en la economía de Estados Unidos, ya que hará que los estadounidenses puedan acceder a préstamos más asequibles para comprar casas y automóviles o usar las tarjetas de crédito.
A las empresas también les resultará más fácil acceder a préstamos para financiar sus operaciones.
√Evolución de las tasas de interés en EEUU durante los últimos años:
“Parece que en septiembre comenzaremos ese ciclo de recortes de tasas, partiendo de un punto en el que los tipos de los fondos federales no habían estado desde hace más de 20 años”, le dijo a Yahoo Finanzas el jefe de estrategia de renta fija de WisdomTree, Kevin Flanagan. “Existe toda una generación de inversores que nunca ha vivido recortes de tipos a ese nivel”.
Para el presidente de la Fed, Jerome Powell, ese punto de inflexión podría permitirle reivindicar un logro que muchos de sus predecesores no consiguieron, incluido su ídolo en la lucha contra la inflación, Paul Volcker.
Powell ha reconocido que admira mucho a Volcker, quien elevó las tasas de interés a un asombroso 22 % en la década de 1980 en un esfuerzo por controlar la inflación. Pero al final Volcker no pudo evitar una recesión ya que sus tasas tan elevadas afectaron a millones de estadounidenses y empresas.
Powell vivió su momento Volcker en 2022 cuando prometió que iba a “doler” mientras la Fed ponía en marcha su campaña de subidas de tipos. Luego experimentó una crisis bancaria en la primavera de 2023 que puso a prueba al banco central mientras se esforzaba por mitigar el pánico entre los depositantes bancarios en todo Estados Unidos.
Pero el logro que ahora podría estar al alcance de su mano es el inusual “aterrizaje suave”, un escenario en el que la inflación retrocede al objetivo del 2 % de la Fed sin forzar a la economía estadounidense a sufrir una dolorosa recesión.
Esther George, expresidenta de la Fed de Kansas City, dijo que la Reserva Federal no podrá darse por satisfecha hasta que asegure su objetivo de inflación del 2 %.
“Podrían estar en el buen camino, pero creo que es demasiado pronto para saber en qué senda estamos”, afirmó George. “Se está haciendo más evidente que la FED puede alcanzar ese 2 %, pero todavía no hemos llegado a ese punto”.
Debate sobre la magnitud del recorte
Todavía existe el peligro de que la situación del mercado laboral empeore, un factor que tiene el potencial de arrastrar a la economía estadounidense y obligar a la Fed a bajar las tasas de interés de manera más agresiva.
Es probable que ese sea el debate que marcará la agenda de los próximos días mientras la Fed se prepara para su próxima reunión.
Powell dejó claro en su último discurso que el banco central está a punto de comenzar su ciclo de recortes de tasas, diciendo en Jackson Hole, Wyoming, que “ha llegado el momento de ajustar la política”.
Sin embargo, no dijo nada sobre la magnitud del primer recorte o si se producirá tras la reunión de septiembre.
El presidente de la Fed de Atlanta, Raphael Bostic, le dijo a Yahoo Finanzas que septiembre o noviembre son las fechas que “se manejan sin lugar a dudas” y que una reducción inicial de 25 puntos básicos “podría ser la mejor opción para comenzar a avanzar”.
El presidente de la Fed de Filadelfia, Patrick Harker, también le dijo a Yahoo Finanzas en otra entrevista que espera que el banco central comience con un recorte de 25 puntos básicos, pero que estaría abierto a una bajada mayor si el mercado laboral se deteriora repentinamente.
Por el momento, los inversores de bolsa están apostando por un pequeño recorte para empezar. Las probabilidades de una reducción de 25 puntos básicos en septiembre son ahora de aproximadamente el 65 %.
Intentando ponerse al día
La lucha de varios años de la Fed contra la inflación comenzó con lo que muchos consideran un paso en falso y tuvo muchos altibajos en el camino.
El paso en falso fue creer que la inflación sería “transitoria”. Esa creencia persistió durante gran parte de 2021, ya que los responsables de la política monetaria de la Reserva Federal observaron que los precios subieron debido a las dislocaciones de la pandemia y las interrupciones en la cadena de suministro causadas por la crisis sanitaria de la COVID-19.
Pero cuando los aumentos de precios se extendieron a una gama más amplia de bienes y servicios, quedó claro que la inflación iba a ser más persistente de lo que se pensaba, sobre todo a medida que los precios del petróleo se dispararon tras el inicio de la guerra de Rusia en Ucrania.
En marzo de 2022, la variación anual de la inflación, medida por el Índice de Precios al Consumidor, alcanzó el 8,5 %, la cifra más alta en 40 años. Incluso excluyendo los alimentos y la energía, el aumento siguió siendo del 6,5 %, un número inaceptablemente alto si se compara con el objetivo del 2 % de la Fed.
Ese mes, la Reserva Federal decidió en su reunión de política monetaria subir los tipos de interés por primera vez desde 2018, comenzando con un modesto incremento de un cuarto de punto porcentual.
GRÁFICO | La inflación llegó al 14,6% en 1980: IPC de EEUU en tasa interanual desde 1970
“Cuando miré alrededor de la mesa en la reunión de hoy, vi a un comité muy consciente de la necesidad de devolver la estabilidad de precios a la economía y decidido a usar nuestras herramientas para hacer precisamente eso”, le dijo Powell a los periodistas tras esa reunión.
Pero la inflación siguió aumentando. El incremento anual del IPC se aceleró al 8,6 % en mayo y al 9,1 % en junio.
A continuación, la Fed se puso en modo compensación y apretó el gatillo con una subida de tipos del 0,75 %, la mayor en más de un cuarto de siglo. Sería la primera de cuatro subidas consecutivas del 0,75%.
A medida que Powell se volvió más agresivo, desplomó los mercados con un discurso de agosto de 2022 en el que advirtió que el “enfoque general de la Fed en este momento es reducir la inflación a nuestro objetivo del 2 %” y que esto causará “cierto dolor a los hogares y las empresas”.
“Sin embargo, si fracasamos en restaurar la estabilidad de los precios, implicaría un dolor mucho mayor”, agregó.
La Fed volvió a subir los tipos de un cuarto de punto a inicios de 2023, desafiando algunas predicciones que decían que la crisis bancaria regional que sacudía el mundo financiero en ese momento podría impedir que endureciera aún más su política monetaria.
La última subida se produjo en julio de 2023, situando el tipo de interés de los fondos federales en un máximo de 22 años del 5,25 % al 5,5 %. Desde entonces se ha mantenido en ese nivel.
“Las cosas pintan bastante bien”
Los inversores comenzaron 2024 pensando que la campaña de lucha contra la inflación de la Fed había terminado, esperando que aplicara seis recortes a lo largo del año.
Eso generó inmediatamente una tensión entre la Reserva Federal y Wall Street. Los funcionarios de la Fed rechazaron varias veces esas expectativas, diciendo que necesitaban ver más avances en la inflación antes de disponerse a dejar de subir los tipos.
Su cautela pareció justificada cuando la inflación volvió a subir durante el primer trimestre, lo que hizo que los responsables de la política monetaria revisaran sus propias predicciones de múltiples recortes a uno solo para todo 2024.
Pero a medida que la inflación reanudó su ritmo descendente en el segundo trimestre y el desempleo comenzó a subir, volvieron a aparecer algunos críticos de la Fed.
Argumentaron que el banco central había mantenido las tasas demasiado altas durante mucho tiempo y que se corría el riesgo de sabotear la posibilidad de un aterrizaje suave.
GRÁFICO | La creación de empleo en EEUU se frena en julio y la tasa de desempleo sube al 4,3%
Alan Blinder, ex vicepresidente de la Reserva Federal y profesor de economía en la Universidad de Princeton, es uno de los que argumentó que la Fed podía haber comenzado a recortar las tasas en julio.
La Fed, le dijo a Yahoo Finanzas, estaba “un poco rezagada”.
Blinder no cree que las posibilidades de que se produzca una recesión hayan aumentado, señalando que los datos económicos no parecen muy diferentes en este momento de los que tenían en julio. Pero el mercado laboral no puede deteriorarse “mucho más” sin aumentar el riesgo de caer en una recesión, explicó.
“La tasa de desempleo ha subido suavemente, una décima de punto. No querrás seguir así durante un año. Si lo haces, aumentas 1,2 puntos porcentuales”, agregó en una entrevista.
Cuando le preguntaron si el mercado laboral podría deteriorarse sin conducir a la economía a una recesión, Bostic, de la Fed de Atlanta, comentó: “es posible, tendremos que ver si ocurre”.
Pero añadió que una recesión “no forma parte de mi pronóstico”.
La expresidenta de la Fed de Cleveland, Loretta Mester, dijo que ahora el banco central tiene una “buena oportunidad” para lograr un aterrizaje suave.
Harker, de la Fed de Filadelfia, estuvo de acuerdo.
“En este momento las cosas pintan bastante bien”, apuntó.
Jennifer Schonberger