Ni la popularidad de Star Wars salvó a Ewan McGregor de la pesadumbre vivida para terminar la saga

Ser elegido para trabajar en una franquicia como Star Wars es un regalo irrenunciable para cualquier actor o actriz, sobre todo cuando la saga iba a resurgir a finales de los 90 tras el legado de la trilogía original. Eso es lo que pensó Ewan McGregor antes de adentrarse en aquella galaxia muy muy lejana para dar vida a un personaje tan querido como Obi-Wan Kenobi, quien en aquellos años vivía el nacer de su estrellato tras arrasar en el cine británico con películas como Trainspotting. Pero no todo salió como preveía.

A raíz del inminente estreno de la serie de Obi-Wan Kenobi en Disney+, McGregor ha ofrecido una entrevista para Vanity Fair donde ha hablado en profundidad de cómo vivió por aquellos años el renacimiento de las películas de George Lucas, parándose a hablar de cómo las malas críticas que obtuvo La amenaza fantasma en 1999 le llevaron a vivir una pesadumbre de la que no pudo escapar. Aunque también reconoce que el papel no iba con la personalidad que quería proyectar por aquellos años.

Y es que como bien detalla el intérprete, en ese momento se definía a sí mismo como “una especie de actor independiente, urbano y sucio”, por lo que Star Wars no era una franquicia que encajara con la imagen que quería proyectar. “Sentí que era parte de esta nueva ola del cine británico, de verdad, y que Star Wars no era yo, eso no era lo que defendía”. Pero una oportunidad así era irrenunciable para alguien que buscaba avanzar en la interpretación.

A este sentimiento se le sumó el frío recibimiento que tuvo La amenaza fantasma, que si bien obtuvo un nuevo éxito de taquilla con más de 1.000 millones de dólares en todo el mundo estuvo lejos de ser del agrado de la crítica y de los fans. Fue entonces cuando el actor se vio atrapado en un mundo del que quería escapar, debiendo hacer frente por obligaciones contractuales a dos películas por las que no sentía la suficiente motivación.

“Fue difícil porque fue una gran decisión hacerlas, un gran evento”, dijo McGregor. "Fue bastante difícil para todos nosotros lidiar con eso [en referencia a las malas críticas], sabiendo también que tienes un par más que hacer", declaraba al respecto.

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Ewan McGregor volvió a enfrentarse a un nuevo traspiés cuando El ataque de los clones fue aún más vapuleada que la anterior entrega, aunque por suerte los fans galácticos volvieron a quedar encantados con aquella conclusión épica de la trilogía de precuelas que fue La venganza de los Sith. Y no parece que al final el actor saliera con un mal sabor de boca de la franquicia, en especial valorando que pese a los inconvenientes su personaje, al contrario que otros como el Anakin Skywalker de Hayden Christensen, siempre fue del agrado del público.

Y es que estamos a punto de volver a verle encarnar a Obi Wan-Kenobi, aunque admite que, valorando la mala experiencia que vivió con La amenaza fantasma, quiso que este nuevo proyecto tuviera un toque más dramático y profundo, un toque que le permitiera “crecer a nivel personal”. “Solo dije: 'Creo que debería ser una historia sobre un hombre quebrantado, un hombre que ha perdido la fe'”, declaraba McGregor. “Siempre tiene una línea graciosa que decir o siempre parece estar tranquilo y es un buen guerrero o soldado o lo que sea, pero ver a ese hombre desmoronarse y ver qué lo vuelve a unir, ahí es donde comenzamos”.

Originalmente Lucasfilm tenía previsto desarrollar una película de Obi-Wan, aunque tras el fracaso de spin-offs como Han Solo: Una historia de Star Wars y el éxito de series como The Mandalorian en Disney+ el proyecto cambió de rumbo. De esta forma, a lo largo de varios capítulos que llegarán a la plataforma de la casa Mouse a partir del próximo 27 de mayo, conoceremos las aventuras de Obi-Wan viviendo en Tatoonie mientras observaba en las sombras a un joven Luke Skywalker, un arco argumental que presentará a villanos como el Inquisidor Reva e incluso la vuelta de Hayden Christensen como Darth Vader.

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