Con los tanques asegurados, ahora el gobierno de Zelensky reclama misiles de largo alcance

KIEV.– Después de asegurarse la entrega de decenas de modernos tanques por parte de Estados Unidos y de Alemania, el presidente ucraniano, Volodimir Zelensky, renovó hoy su llamado a las naciones occidentales para que suministren a Ucrania armas más potentes, incluido el sistema de misiles tácticos del Ejército norteamericano, conocido como Atacms, para ayudar a Kiev a defenderse de los ataques rusos desde lugares alejados de la línea del frente.

“No puede haber tabú en el suministro de armas para protegerse contra el terror ruso”, dijo Zelensky en un discurso en la madrugada de hoy.

Kiev argumenta desde hace tiempo que necesita las armas fabricadas en Estados Unidos para atacar objetivos rusos en lugares como Crimea, que se han utilizado para lanzar ataques con misiles y aviones no tripulados en ciudades ucranianas, con efectos devastadores.

Hasta ahora Washington se ha resistido a entregar ese material bélico a Kiev. Los militares y funcionarios de la Casa Blanca consideran que proporcionar a Ucrania un arma capaz de alcanzar objetivos dentro de Rusia podría escalar el conflicto que el mes próximo cumplirá un año.

En ese contexto, el jefe del gobierno aleman, Olaf Scholz dijo el domingo que Alemania no enviará aviones de combate a Ucrania, a pesar de las peticiones de Kiev a Occidente.

“Solo puedo aconsejar no entrar en una constante guerra de ofertas cuando se trata de sistemas de armamento”, dijo Scholz en una entrevista con el diario Tagesspiegel.

”Si, tan pronto como se ha tomado una decisión [sobre los tanques], se inicia el siguiente debate en Alemania, eso no parece serio y mina la confianza de los ciudadanos en las decisiones del gobierno”, añadió.

Estados Unidos, Alemania y los aliados occidentales sí accedieron esta semana al envío de sofisticados tanques de batalla a Ucrania para ayudar a Kiev a inclinar a su favor el campo de batalla en momentos en los que la invasión rusa ingresa a su 12mo mes.

El anuncio representa la primera etapa de una labor coordinada por parte de Occidente para proporcionar decenas de armas pesadas que, según los comandantes militares ucranianos, permitirán realizar contraofensivas, reducirán el número de bajas y ayudarán a restablecer los menguantes suministros de munición.

Estados Unidos enviará 31 tanques M1 Abrams a Ucrania, informó el presidente Joe Biden el miércoles, desistiendo de los argumentos que presentó durante meses de que la operación y el mantenimiento de los tanques eran demasiado complicados para las fuerzas ucranianas.

La decisión se tomó poco después de que Alemania aceptó enviar 14 tanques Leopard 2 A6 de su propio arsenal. El gobierno alemán había dicho que no enviaría los Leopard a menos que Washington pusiera a disposición los Abrams, ya que no quería provocar la ira de Moscú sin que Estados Unidos comprometiera de forma similar sus propios tanques.

“Tripulaciones de tanques ucranianos han llegado al Reino Unido para comenzar a entrenarse para su lucha continua contra Rusia”, informó por su parte el ministerio de Defensa británico a través de Twitter.

”El Reino Unido suministrará tanques Challenger 2 a Ucrania junto con países socios globales, lo que demuestra la fuerza del apoyo a Ucrania a nivel internacional”, agregó la publicación.

Rusia respondió al anuncio diciendo que se trata de una “implicación directa en el conflicto, y vemos que [esta implicación] crece”, afirmó a la prensa el vocero de la presidencia rusa, Dmitri Peskov el jueves.

Ataques

Los anuncios se produjeron mientras continúan los despiadados ataques del ejército ruso en el marco de su “operación especial” en el este de Ucrania, luego de haber tomado el control de Soledar.

Durante el fin de semana, las fuerzas rusas luchaban por el control de las aldeas en el este de Ucrania cerca de la ciudad asediada de Bakhmut, el último punto álgido en una batalla que Moscú considera crucial para su intento de apoderarse de toda la región oriental de Donbass.

El Estado Mayor de Ucrania dijo el domingo que sus soldados habían repelido los ataques contra el pequeño pueblo de Blahodatne y varios otros asentamientos en el área. La declaración se produjo un día después de que el grupo Wagner de Rusia, una compañía militar privada que ha llevado a cabo gran parte de los combates en Bakhmut en nombre de Moscú, afirmara que sus fuerzas habían capturado Blahodatne.

“Blahodatne está bajo nuestro control”, dijo el sábado Yevgeny Prigozhin, un empresario ruso y jefe del grupo Wagner, en un comunicado publicado en un sitio web de una de sus empresas. El Ministerio de Defensa de Rusia no ha confirmado el informe y la afirmación no pudo ser verificada de forma independiente. Prigozhin ha buscado presentar a sus mercenarios como la fuerza de combate más efectiva en el área y anteriormente se atribuyó el mérito de los avances en el campo de batalla antes de la confirmación del Kremlin.

Blahodatne se encuentra entre Soledar, una ciudad minera de sal que las fuerzas rusas capturaron recientemente después de semanas de intensos combates, y una carretera que va hacia el norte desde la ciudad de Bakhmut. El camino sirve como una línea de suministro crucial para las fuerzas ucranianas que defienden la ciudad.

Desde el verano, Bakhmut se ha convertido en un punto focal de los combates en el este de Ucrania y el objetivo de la ofensiva más importante de Moscú. Moscú tiene como objetivo rodear Bakhmut, cortar sus rutas de suministro y luego obligar a los defensores de la ciudad a retirarse. A pesar de algunos éxitos recientes, el progreso de Rusia en la campaña, que comenzó durante el verano, ha sido terriblemente lento, y ambos bandos han sufrido muchas bajas en intensos combates.

Pero desde que capturaron Soledar este mes, las fuerzas rusas han intensificado los bombardeos de las aldeas al oeste, incluido Blahodatne.

Muchos civiles han seguido una directiva del gobierno de Kiev de abandonar Donetsk, que es el hogar de Bakhmut y una de las dos regiones que componen la región de Donbass. Los civiles que se han quedado siguen siendo vulnerables a los bombardeos y los ataques de artillería, con decenas de muertos en las últimas semanas.

Agencias ANSA, AP y The New York Times