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Piénsalo dos veces antes de seguir usando esa ropa: estas son las telas más tóxicas para el planeta

Las telas contaminantes están hechas con materiales que han envenenado tierras y mares para su fabricación (Foto: Getty)
Las telas contaminantes están hechas con materiales que han envenenado tierras y mares para su fabricación (Foto: Getty) (Yogesh Singh / EyeEm via Getty Images)

Las telas más contaminantes son, probablemente, las que llevas puestas en este momento. Un popular “blue jean” combinado con una franela de algodón y unos zapatos de cuero sintético conforman el tradicional outfit casual de hoy, y también el más tóxico para el medio ambiente.

La industria textil es una de las más contaminantes del planeta y la mayoría de los habitantes tiene armarios repletos de ropa que ya han esparcido su toxicidad en el mundo tan solo en el proceso de elaboración.

La ecóloga Johanna Segovia, investigadora asociada del Instituto de Ciencia y Tecnología e Innovación de la Universidad Francisco Gavidia de El Salvador explica a Yahoo que la industria textil requiere una gran cantidad de agua, tierras, como en el caso del algodón, y “los tintes y productos de acabado son responsables del 20 % de la contaminación de agua potable en el mundo” que en su mayoría “no son biodegradables”.

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“La contaminación se observa por todos lados, en la mala disposición y gestión en tierra y también en residuos de los procesos de blanqueado, fijación de color y tinción en los ríos”, señala la investigadora que dice que es “impactante observar las aguas de colores azul o rojo que llegan al mar” debido a los tintes.

También alerta acerca de la cantidad de fibras sintéticas que llegan a las aguas que no son “percibibles por el ser humano” pero de igual forma lo perjudica.

Ropa desechable

Los consumidores deben evitar la trampa de la moda rápida si quieren evitar más daños al planeta (Foto:Getty)
Los consumidores deben evitar la trampa de la moda rápida si quieren evitar más daños al planeta (Foto:Getty) (netrun78 via Getty Images)

Otra historia, igualmente dañina, es la de la vida útil de esa prenda que dejará microfibras en el agua de los mares y ríos con cada lavada y después afectará otros espacios cuando sea desechada.

A esta rutina de contaminación textil que ya tiene muchos años se suma ahora el efecto acelerador de la llamada “moda rápida”, una nueva tendencia que implica que la ropa se puede comprar, usar y desechar en muy poco tiempo porque los precios de las prendas son muy bajos.

En esta centrífuga fashionista el precio de la ropa es bajo pero el costo que tiene sobre el medio ambiente es muy alto.

Por eso Segovia señala también al consumidor en la reparticipon de responsabilidades en la contaminación que causa la industria textil y agrega que queda del lado del comprador el saber elegir prendas de bajo impacto ambiental “con criterios ecológicos”.

La ecóloga pide “comprar solo lo necesario y donar en lugar de botar porque, independientemente de la tela, el mal manejo de los residuos textiles produce crisis sanitaria y económica”.

La toxicidad causada por telas se comprueba cada día. La “fast fashion industry” deja unas 92 millones de toneladas de desechos y consume 79 trillones de litros de agua al año de acuerdo con un estudio de Nature.

Por eso es importante montarse en la ola ecofriendly, evitar caer en la trampa de la “moda rápida”, procurar vestir con telas de fibras menos contaminantes y animarse a llevar piezas de diseñadores que han adoptado una forma ecológica de trabajar que, por fortuna, son cada vez más.

Estas son algunas de las telas que más contaminan:

Algodón

La industria del algodón está vinculada al envenenamiento de tierras, aguas y violación de derechos humanos (Foto:Getty)
La industria del algodón está vinculada al envenenamiento de tierras, aguas y violación de derechos humanos (Foto:Getty) (CR Shelare via Getty Images)

La tela de algodón es el producto de un proceso muy tóxico que implica el uso de los pesticidas más nocivos que no solo contaminan las aguas sino también la calidad del aire y la salud de los trabajadores que se encargan de manipularlo.

En el mundo se producen al año unas 25 millones de toneladas de algodón convencional, que en su mayoría se obtienen de cultivos que fueron genéticamente modificados para evitar plagas pero que en la actualidad requieren más pesticidas que en los tiempos en los que las semillas no habían pasado por un laboratorio.

Este algodón se combina generalmente con tejidos sintéticos como el acrílico y el poliéster cuyas fibras suelen terminar en ríos y mares.

Otro tema es el que afecta directamente a los millones de trabajadores del algodón, una industria que ha sido vinculada con la violación de derechos humanos en los países que más producen y exportan este material: China y Bangladesh.

Jean, mezclilla o tela de vaqueros

Fabricar un solo par de jeans implica el gasto de 10.000 litros de agua (Foto:Getty)
Fabricar un solo par de jeans implica el gasto de 10.000 litros de agua (Foto:Getty) (Yuriy Kovtun via Getty Images)

Aunque esta tela está compuesta, sobre todo, por algodón, el tratamiento y coloración lo hacen merecedor de un análisis aparte.

Un blue jean o vaquero es una prenda indispensable en cualquier closet pero el costo ambiental de tenerlos es mucho mayor que el dinero que pagamos por ellos.

En la fabricación de un simple par de jeans se consumen unos 10.000 litros de agua y el azul índigo sintético con el que se tiñen es un contaminante que contiene cianuro, entre otros venenos.

Todos esos químicos que se usan para lograr el producto final se lanzan a los ríos, mares y océanos.

La popular marca estadounidense Levi’s estima que producir un par de sus jeans libera 33.4 kilogramos de CO2 a la atmósfera, que es el equivalente a conducir más de 1.000 kilómetros en un automóvil, debido a que el denim se fabrica mayormente en China y la India, donde la principal fuente de energía es el carbón.

Los trabajadores de esas fábricas, además, están expuestos a polvos de sílice que causan una enfermedad pulmonar discapacitante llamada silicosis.

El director ejecutivo de Levi’s, Chip Bergh, ha declarado que lo mejor es no lavar los jeans “nunca” y quienes saben de este tipo de tela recomiendan meter el jean en el congelador para eliminar las bacterias en vez de usar la lavadora.

Un estudio de la Universidad de Toronto que se dio a conocer en el año 2020 encontró que lavar los jeans está contribuyendo a contaminar el agua de Canadá, desde lagos suburbanos hasta el Archipiélago Artico.

De acuerdo con los científicos que trabajaron en esta investigación, se encontraron microfibras que desprenden los jeans al ser lavados, hasta a 1500 metros de profundidad en aguas canadienses.

Poliéster

Una prenda de poliéster desprende microfibras con cada lavada que van a dar a ríos y mares (Foto:Getty)
Una prenda de poliéster desprende microfibras con cada lavada que van a dar a ríos y mares (Foto:Getty) (agitons via Getty Images)

La ropa que se usa para practicar casi todos los deportes está hecha, en su mayoría, de poliéster, así como chaquetas, vestidos, pantalones, blusas y un infinito etcétera que tiene que ver con la capacidad de esta tela para imitar otros tejidos como la seda o el algodón.

Por eso es muy difícil conseguir un closet sin piezas de poliéster, una fibra que se obtiene de petróleo crudo y que tarda hasta 200 años en degradarse.

La ropa de poliéster libera fibras con cada lavada y un buen porcentaje de estas partículas terminan en ríos y mares.

VIDEO (8 ideas ingeniosas para reciclar tu ropa usada)

Nylon

En su momento, fines de los años 30, el nylon revolucionó el mundo de la moda pues de este material están hechas las llamadas “medias pantis”.

Es una fibra sintética, elástica, resistente y contaminante. También tiene como base el petróleo y para lograr esa textura, debe ser tratada con otros químicos.

Aunque estas fibras sintéticas no necesitan tierras para su existencia y usan poca agua para ser procesadas conllevan el impacto negativo de que no se biodegradan, su existencia se debe a la extracción de combustibles fósiles y sus microfibras, van a dar a ríos y mares.

Las telas más amigables con el ambiente

Hay telas que se fabrican sin contaminar el ambiente (Foto:Getty)
Hay telas que se fabrican sin contaminar el ambiente (Foto:Getty) (photoguns via Getty Images)

Pero, pese a las sombras que cubren al mundo textil, es posible vestirse sin sentir remordimientos por estar causando algún daño al planeta. Hay telas que se obtienen de cultivos y procesos menos contaminantes entre las que se puede escoger, así como ropa que ha sido directamente creada de material reciclado.

Algodón orgánico

Si se escoge usar prendas de algodón orgánico hay que fijarse en las etiquetas de la ropa que se va a comprar para saber que efectivamente se trata de este tejido que, a diferencia del que está modificado genéticamente, está libre de pesticidas y otros productos químicos.

El algodón orgánico exige 71 % menos agua y 62 % menos de energía que el algodón convencional.

Cáñamo

El cáñamo se abre camino en la industria textil (Foto:Getty)
El cáñamo se abre camino en la industria textil (Foto:Getty) (Björn Forenius via Getty Images)

La tela de cáñamo parece estar erigiéndose como la fibra más amigable con la naturaleza. No requiere pesticidas, herbicidas ni otros productos químicos en su cultivo. Los requerimientos de agua son bajos, limpia los suelos contaminados en los que se siembra y es biodegradable.

La tela que se obtiene del cáñamo es muy resistente, duradera e ideal para pieles sensibles.

Una excelente noticia es que la marca Levi’s Strauss ha decidido incorporar la fibra de cáñamo a sus diseños porque “crece rápido, usa menos agua y deja suelos más limpios y saludables”.

Poliéster reciclado

Las botellas de plástico que suelen ser una pesadilla ambiental y protagonistas en las imágenes más tenebrosas de la contaminación en el mundo, pueden ser recicladas y convertidas en tela de poliéster.

Una chaqueta puede ser hecha de 25 botellas de plástico de dos litros.

No quiere decir que esta fibra haya dejado de contaminar, pero al menos, al ser reciclada, disminuye su impacto tóxico porque su producción requiere la mitad de la energía.

Lino

El lino es una de telas orgánicas excelente y lo ideal es que se tiña de colores naturales (Foto:Getty)
El lino es una de telas orgánicas excelente y lo ideal es que se tiña de colores naturales (Foto:Getty) (Evgeniia Rusinova via Getty Images)

La fibra de lino proviene de la planta del mismo nombre y se considera una tela ecológica porque es biodegradable cuando no ha sido intervenida con químicos. Es resistente a las plagas, de ahí que no necesite pesticidas y tampoco fertilizantes.

La parte fea de la moda

El mundo de la moda es responsable de una quinta parte de la contaminación industrial de las aguas. China y Bangladesh son los principales productores de ropa en el mundo, ocupando el primer y segundo lugar, respectivamente.

Un reportaje de CNN publicado en septiembre de 2020 se enfoca en la contaminación que la manufactura de ropa causa en los ríos de Bangladesh por causa de los tintes y químicos que se usan para teñir las prendas de vestir que generalmente terminan en las tiendas de Estados Unidos y Europa.

En 2016 las universidades de California y Santa Ana anunciaron los resultados de un estudio en el que encontraron que, en promedio, una chaqueta de lana sintética libera 1.7 gramos de microfibra con cada lavada y buena parte de esos residuos terminan en mares, océanos y ríos.

En el estudio se subraya que la microfibra sintética es particularmente peligrosa porque tiene el potencial de envenenar la cadena alimenticia.

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