Una victoria para la UE: Apple pierde y la Justicia le obliga a pagar 13.000 millones de euros de impuestos
Apple ha perdido un pleito de 13.000 millones de euros ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea por los bajos impuestos que pagó durante años en Irlanda. Se trata de una sorprendente victoria para Bruselas en su campaña contra los acuerdos ventajosos con las multinacionales.
La sentencia, publicada este martes, da la razón a la Comisión Europea y anula una sentencia anterior del Tribunal General de rango inferior. Bruselas apuntaba que los tipos del impuesto de sociedades tan bajos (del 0,005%) pagados por el gigante tecnológico representaban una ayuda ilegal.
"Irlanda concedió a Apple una ayuda ilegal que Irlanda está obligada a recuperar", declaró el Tribunal de Justicia en un comunicado, dictando una "sentencia definitiva" en la materia.
La batalla de Bruselas contra las grandes tecnológicas
Se trata de una de las dos victorias de hoy en la batalla de Bruselas contra las grandes tecnológicas, ya que Google perdió otro recurso contra una multa de 2.400 millones de euros de la UE por favorecer sus propios servicios.
Esto pone fin a la carrera de Margrethe Vestager, cuyo doble mandato como jefa antimonopolio de la UE termina dentro de un par de meses. La victoria de la Comisión significa que Apple deberá pagar hasta 13.000 millones de euros (o incluso más, con intereses y costes) al Tesoro irlandés.
La conclusión inicial de la Comisión, ahora confirmada, se produjo tras las revelaciones de LuxLeaks sobre resoluciones fiscales que implicaban a Jean-Claude Juncker, el ex dirigente luxemburgués que era entonces presidente del Ejecutivo de la UE.
La actuación de Vestager contra grandes multinacionales, en su mayoría estadounidenses, como Starbucks, Fiat Chrysler y Amazon, le valió que el entonces presidente Donald Trump la calificara de "señora impuestos" de la UE que "odia de verdad a Estados Unidos".
El caso representó una inusual y controvertida incursión de Bruselas en la política fiscal, que normalmente establecen las capitales nacionales, y la UE solo interviene si las exenciones fiscales distorsionan el mercado interior del bloque.
El asunto giraba en torno al tratamiento de los ingresos por propiedad intelectual del fabricante del iPhone y también en torno a si la Comisión tenía razón al afirmar que esos beneficios debían asignarse a su base europea en Irlanda.
El Tribunal General de la UE falló en contra de la Comisión en 2020, pero, tras las conclusiones preparadas ante el Tribunal de Justicia el pasado noviembre, el abogado general Giovanni Pitruzzella cuestionó el razonamiento jurídico de los jueces de primera instancia. En términos financieros, representa el mayor caso de la campaña fiscal de la UE, que por lo demás no ha tenido un gran éxito en los tribunales.
La Comisión perdió los recursos interpuestos contra McDonald's, Starbucks y Engie, aunque en una entrevista reciente con el podcast Radio Schumann de 'Euronews', Vestager argumentó que su cruzada había dado lugar a una serie de reformas fiscales nacionales e internacionales.
A pesar de los miles de millones que iba a ganar, el Gobierno irlandés se opuso al caso de la Comisión; el país se ha convertido en el centro europeo de varias empresas tecnológicas estadounidenses.
Michael McGrath defendió anteriormente a la empresa como Ministro de Finanzas irlandés, y ahora se trasladará a Bruselas como comisario europeo, cuya cartera anunciará la presidenta Ursula von der Leyen en los próximos días.
Apple mostró su "decepción" por la decisión
"Siempre pagamos todos los impuestos que debemos allí donde operamos y nunca ha habido un trato especial", dijo un portavoz de la compañía, añadiendo que es uno de los mayores contribuyentes del mundo.
"La Comisión Europea está intentando cambiar retroactivamente las reglas e ignorar que, como exige la legislación fiscal internacional, nuestros ingresos ya estaban sujetos a impuestos en Estados Unidos", añadió la empresa, que argumenta que ya ha pagado 20.000 millones de dólares (18.000 millones de euros) en impuestos estadounidenses por los mismos beneficios.
Pero la sentencia ya ha sido aplaudida por los activistas fiscales, que llevan tiempo reclamando el cierre de lo que consideran lagunas en el impuesto de sociedades.
"Esta sentencia pone al descubierto el idilio de los paraísos fiscales de la UE con las multinacionales", declaró en un comunicado Chiara Putaturo, experta en fiscalidad de la UE de la organización benéfica Oxfam. "Hace tiempo que se debería haber hecho justicia después de más de una década en la que Irlanda se mantuvo al margen y permitió que Apple eludiera impuestos".
La Comisión y el Ministerio de Hacienda irlandés no respondieron de inmediato a una petición de comentarios, aunque Vestager tiene previsto hablar con los periodistas más tarde.