La pieza resume con un atractivo montaje todo el proceso de fabricación de las baterías, ambientada por la canción “Honey Bee” de Don Hinton, un clásico de 1960.
El potente SSC Tuatara está a la cabeza de la lista de los autos más rápidos del mundo. Pero no está solo.
Los inversores se confundieron y se lanzaron como locos a comprar las acciones de una empresa desconocida, y todo por un simple tweet.