6 famosos que se recuperaron de la quiebra para disfrutar del éxito

Quizás sea la estrella más grande del cine a nivel mundial, pero la carrera de Will Smith no estuvo exenta de obstáculos.
Tras alcanzar el estrellato de forma súbita como miembro del dúo musical que formaba con Dj Jazzy Jeff, el nivel de derroche de Smith lo dejó con una deuda tan grande con el Servicio de Impuestos Internos de Estados Unidos que se vio obligado a entregar la mayor parte de sus posesiones con el fin de pagarla.
Pero solo un año después, Smith firmó con NBC para interpretar al protagonista de El Príncipe del Bel Air. El Servicio de Impuestos Internos recaudó un 70% de sus ganancias por los tres primeros años del programa, pero después de eso quedó libre. El resto es historia (Axelle/Bauer-Griffin/Getty).

Después de su temprano éxito como modelo, Kim Basinger se mudó a Los Ángeles para comenzar una exitosa carrera como actriz.
Tras comprar una gran cantidad de tierras privadas para crear atracciones turísticas, Basinger tuvo que hacer frente a dificultades financieras en los años 90. Se vio obligada a vender una parte de esas tierras, pero cuando se retiró de la polémica película Mi obsesión por Helena, la empresa productora se adjudicó una indemnización de 8 millones de dólares mediante una denuncia en su contra.
Basinger se declaró en bancarrota y se retiró de la actuación durante tres años. Su papel de vuelta a la gran pantalla en L.A. Confidential le dio a Basinger un Globo de Oro por mejor actriz de reparto, lo cual sirvió para reactivar su carrera (Gregg DeGuire/WireImage).

Luego de retirarse del boxeo, el excampeón de pesos pesados George Foreman fundó un centro juvenil para que los chicos con problemas entrenaran y practicaran deportes.
Incluso estando abrumado por los costos, Foreman se negó a cerrar el centro. Cuando entró en bancarrota, volvió al ring para intentar pagar sus deudas. Aunque parezca increíble, Foreman ganó su primer combate después de 10 años y se convirtió en el hombre más viejo en detentar el título de campeón de pesos pesados.
Esto llevó a Foreman a firmar un acuerdo para poner su nombre a una parrilla-grill eléctrica. En 2012, cuando tenía 63 años, estas parrillas eran su principal fuente de ingresos, por un valor de más de 300 millones de dólares. Foreman continúa dirigiendo su proyecto centrado en los jóvenes (Gary Miller/FilmMagic/Getty).

Bat Out of Hell fue uno de los álbumes más vendidos de todos los tiempos, pero Meat Loaf rápidamente se encontró al borde de la bancarrota como resultado de numerosas demandas e incluso tuvo que cancelar algunos conciertos por sus problemas económicos.
En 1986 y a la edad de 39 añoa, con unos 40 procesos de demanda en su contra y con dos exitosos discos en el mercado, terminó en bancarrota. Pero cinco años después, esta estrella del rock lanzó un nuevo album, en el que se incluyó la canción I’d Do Anything for Love (But I Won’t Do That), con la que ganó un Grammy. (Patrick R. Murphy/Getty).

El icono del soul Isaac Hayes ya había escrito unos cuantos éxitos y lanzado álbumes cuando triunfó con su banda sonora para la película Shaft.
La canción con el nombre del título le dio a Hayes un Oscar, dos Grammy y un Globo de Oro, pero 12 años después de unirse a Stax Records como músico de sesión, el sello cayó en serios problemas financieros y perdió muchos de los derechos de autor, incluidos los de Hayes.
Al mismo tiempo, Hayes tenía sus propios problemas económicos por la baja venta de discos. Debía más de 6 millones, lo que le obligó a declararse en bancarrota.
Después de tomarse un respiro de la música para seguir con su carrera de actuación, Hayes volvió a sus orígenes con un álbum que fue elogiado ampliamente en 1995, justo antes de llegar a todo un nuevo público siendo la voz del personaje “Chef” en la serie de televisión South Park (Michael Ochs/Getty).

Si bien la mayoría de famosos que cayeron en bancarrota lo hicieron cuando ya era conocidos, el caso de Cyndi Lauper es diferente.
Su primer grupo Blue Angel tuvo problemas para vender discos, y una disputa con su manager Steve Massarsky por su despido hizo que el grupo tuviera que desembolsar 80.000 dólares tras una demanda.
La demanda hizo que Lauper entrara en bancarrota en 1981 mientras trabajaba en una tienda para pagar las facturas. Dos años después, sin embargo, alcanzó el éxito con su primer álbum en solitario, que ofreció hits como Time After Time” y, el muy conveniente Money Changes Everything (Ebet Roberts/Getty).