Alarma en Nueva York: detectan el virus de la polio en las aguas residuales

NUEVA YORK.- La poliomielitis detectada en las aguas residuales de la ciudad de Nueva York es otra señal de que la enfermedad, que no se había observado en Estados Unidos en más de una década, se está extendiendo silenciosamente entre las personas no vacunadas, afirmaron este viernes las autoridades sanitarias.

“La presencia del poliovirus en las aguas residuales de la ciudad sugiere una probable circulación local del virus”, declararon los departamentos de salud de la ciudad y del estado de Nueva York.

La Dra. Mary T. Bassett, comisionada de Salud del estado, dijo que la detección del poliovirus es “alarmante pero no sorprendente”.

“El riesgo para los neoyorquinos es real, pero la defensa es muy sencilla: vacunarse contra la poliomielitis”, señaló en un comunicado el Dr. Ashwin Vasan, comisionado de Salud de la ciudad de Nueva York. “Con la poliomielitis circulando en nuestras comunidades, simplemente no hay nada más esencial que vacunar a nuestros niños para protegerlos de este virus, y si usted es un adulto no vacunado o incompletamente vacunado, por favor elija vacunarse ahora. La polio es totalmente prevenible y su reaparición debería ser una llamada a la acción para todos nosotros”.

El mes pasado un caso de polio fue detectado en Nueva York, lo que encendió las alarmas de las autoridades sanitarias. Según declaró el miércoles a CNN un alto funcionario de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC), esto es “solo la punta del iceberg” y un indicio de que “debe haber varios centenares de casos en la comunidad circulando”.

El caso de poliomielitis se encontró en el condado de Rockland, que tiene una tasa de vacunación contra esa enfermedad asombrosamente baja.

“Propagación silenciosa”

El doctor José Romero, director del Centro Nacional de Inmunización y Enfermedades Respiratorias de los CDC, señaló que la mayoría de las personas con poliomielitis no presentan síntomas, por lo que pueden contagiar el virus sin saberlo. “Hay una serie de individuos en la comunidad que se han infectado con el poliovirus. Están diseminando el virus”, indicó. “El contagio siempre es una posibilidad porque la propagación va a ser silenciosa”.

Un equipo de detectives de enfermedades de los CDC viajó la semana pasada desde la sede de la agencia en Atlanta hasta el condado de Rockland. “Estamos bastante nerviosos” porque la polio “podría salirse de control muy rápidamente y podríamos tener una crisis en nuestras manos”, dijo a CNN un líder de salud de la comunidad.

Los funcionarios de Nueva York han dicho que están abriendo clínicas de vacunas para ayudar a los residentes no vacunados a recibir su dosis.

La polio solía ser la enfermedad infantil más temida. Puede atacar al sistema nervioso y, en pocas horas, dejar a alguien paralizado. Si llega a paralizar los músculos del pecho, la persona no puede respirar. El pulmón de acero, una máquina en forma de sarcófago que usa fuelles para mantener al paciente respirando, fue en su época una máquina muy común en los pabellones hospitalarios dedicados a la polio.

Puede aparecer a cualquier edad, pero la mayoría de los afectados son niños de tres años o menos.

La poliomielitis a menudo es asintomática y las personas pueden transmitir el virus incluso cuando no parecen estar enfermas. Sin embargo, puede producir síntomas leves parecidos a los de la gripe que pueden tardar hasta 30 días en aparecer.

Todo esto suena a una época lejana y olvidada. Y por una buena razón. La enfermedad fue casi borrada de la faz de la tierra.

Alarma en Londres

Esta semana el gobierno británico anunció que a todos los niños de entre uno y nueve años que viven en el área metropolitana de Londres se les ofrecerá, en cuestión de semanas, una vacuna contra la poliomielitis.

La decisión se produjo luego de que se detectaran rastros del virus en las aguas residuales de ocho distritos de la capital de Reino Unido.

La campaña buscará inmunizar a casi un millón de niños, incluidos aquellos que ya la han recibido.

“Reconozco que los padres y tutores estarán preocupados (...) sin embargo quiero tranquilizarlos: no se ha diagnosticado a nadie con el virus y el riesgo para la población en general es bajo”, declaró el ministro británico de Sanidad, Steve Barclay.

El último paciente con poliomielitis natural en el Reino Unido se dio en 1984.

“De cualquier manera, acepto el consejo del Comité Conjunto de Vacunación e Inmunización (JCVI) de ofrecer a los niños de 1 a 9 años de Londres un refuerzo”, añadió en Twitter.

Vacunación

No hay cura para la poliomielitis, que alguna vez fue una de las enfermedades más temidas dada su capacidad para causar parálisis irreversible en algunos casos, pero se puede prevenir con una vacuna disponible desde 1955.

Desde su desarrollo, a principios de la década de los 50, las vacunas han transformado por completo la poliomielitis. Sin este avance, unos 20 millones de personas que hoy caminan habrían quedado paralizadas, estima la Organización Mundial de la Salud (OMS).

Esta enfermedad pasó de ser un problema global en la década de 1980 a estar localizada en solo un par de países. Y esto incluye el destacado triunfo de África, que se declaró libre de polio en 2020.

Pero aunque Afganistán y Pakistán son los únicos dos países donde la polio sigue circulando, esta enfermedad endémica sigue siendo una amenaza para el resto del mundo.

En primer lugar porque estos países pueden sembrar brotes en otros lugares. El primer caso de polio salvaje en África durante más de cinco años se notificó en una niña de tres años en Malawi. Era la misma cepa encontrada en Pakistán, aunque nadie está seguro de cómo se propagó. En febrero, Malawi tuvo que declarar un brote de polio salvaje.

En segundo lugar, la vacuna utilizada tanto en países donde la polio es endémica como en aquellos que enfrentan un brote puede por sí misma crear un problema. Y esto es lo que está afectando al Reino Unido y a otros países.

La vacuna más potente contra la polio es una que se usa en forma de gotas orales y posee una forma debilitada, pero viva, del poliovirus.

Es barata, fácil de administrar y conlleva una excelente inmunidad, así que la hace ideal para responder a los posibles brotes.

Sin embargo, uno de sus efectos es que provoca infección estomacal, por lo que se encuentra en las heces humanas y puede así propagarse a otros.

En un primer nivel puede ser algo ventajoso, porque indirectamente se inmuniza a otros. Pero si pasa de persona a persona, puede mutar hasta causar parálisis. Esto es lo que se conoce como poliovirus derivado de la vacuna.

Con información de AP y BBC Mundo