Yahoo Finanzas AmCham alerta por influencia del crimen
CIUDAD DE MÉXICO, julio 30 (EL UNIVERSAL).- El impacto del crimen organizado en empresas estadounidenses que operan en México preocupa a directivos, pues 17% considera que están muy afectadas, de acuerdo con un ejercicio de opinión realizado por American Chamber México (AmCham).
Además, entre los resultados destacó que 1% de los directivos de empresas consultados consideraron que la delincuencia organizada tomó el control total de su organización, mientras que 12% dijo que se trata de un control parcial.
De acuerdo con el Sondeo de Seguridad Empresarial 2024 del organismo que agrupa a más de mil 450 empresas con capital estadounidense en México, las cuales tienen una participación de 21% en el Producto Interno Bruto (PIB) del país, 81% de los encuestados dijo que hay nada o poca coordinación entre las instancias de gobierno encargadas en la seguridad.
Durante la presentación de los resultados, el director nacional de Relaciones Externas y Comités de AmCham, Guillermo Bernal, dijo que cada vez se busca menos notificar a las autoridades mexicanas sobre los hechos de inseguridad que sufren.
El ejercicio también mostró que 17% de los encuestados redujeron sus inversiones en México por motivos de seguridad, mientras que 3% trasladó sus operaciones a otro país, como China, o a zonas de Estados Unidos como Texas y Arizona.
El sondeo de AmCham, que se integró con base en entrevistas de 80 preguntas a 218 ejecutivos de empresas responsables de la seguridad corporativa, arrojó también que 58% de las empresas invierten entre 2% y 10% de su presupuesto anual en temas de seguridad, mientras que sólo 4% de ellas invierte más de 10%.
Sin embargo, sólo 4% de las empresas aseguraron que, en términos absolutos, su presupuesto en seguridad disminuyó respecto al sondeo anterior, mientras que para 52% se mantuvo y en 44% aumentó.
Por su parte, el presidente del Comité de Seguridad de AmCham, Dagoberto Santiago Toledo, dijo que los resultados de mejora de seguridad tienen que ver con las acciones que tomaron las empresas como tener guardias armados, patrullas de custodia o uso de GPS.
Los principales delitos que se registraron fueron asalto o robo con violencia contra empleados, robo a cadena de suministro, extorsión virtual, manifestaciones, bloqueos, disturbios sociales, ataques cibernéticos, ilegalidad, fraude o robo interno, así como intrusión de instalaciones.
