Banco Central de Brasil dice que la política monetaria requiere ahora serenidad y paciencia
BRASILIA, 28 mar (Reuters) - El Banco Central de Brasil comunicó el martes que la política monetaria actual requiere "serenidad y paciencia", indicando que el deterioro de las expectativas de inflación justifica su decisión de mantener una postura de línea dura de cara a futuras medidas.
En las minutas de la reunión celebrada entre el 21-22 de marzo, en la que el comité que establece las tasas de interés, conocido como Copom, mantuvo la tasa referencial en el 13,75%, el banco central señaló que el compromiso del Ministerio de Hacienda de aplicar medidas fiscales y el restablecimiento de los impuestos sobre el combustible han reducido el riesgo al alza sobre la inflación a corto plazo.
Sin embargo, las autoridades monetarias expresaron su preocupación por la posibilidad de que las expectativas de inflación se desvíen de los objetivos a más largo plazo, indicando que esta cuestión, junto con el riesgo de que una reducción más brusca de la concesión de crédito nacional y mundial afecte a la actividad económica, ocupaba un lugar central en su debate sobre la decisión de política monetaria.
"El Copom enfatizó que la ejecución de la política monetaria, en este momento, requiere de serenidad y paciencia para incorporar los desfases inherentes al control de la inflación a través de la tasa de interés y, así, alcanzar los objetivos en el horizonte relevante de política monetaria", señaló.
Los funcionarios del banco reiteraron que no dudarían en reanudar las alzas del costo del crédito si fuera necesario cuando mantuvieron la tasa Selic en su nivel más alto en seis años el pasado miércoles, pese a la intensa presión del gobierno del presidente Luiz Inácio Lula da Silva para reducir los costos de endeudamiento.
La decisión desencadenó una nueva oleada de críticas del izquierdista Lula, frustrando parte de las expectativas del mercado sobre la posibilidad de una futura relajación monetaria en medio del enfriamiento de la inflación anual, la desaceleración del crédito, la ralentización económica y las turbulencias bancarias en el extranjero.
En las minutas, las autoridades afirmaron que no existe una relación mecánica entre la convergencia de la inflación y la presentación de un esperado marco fiscal por parte del Gobierno. Aun así, subrayaron que una nueva norma creíble "podría llevar a un proceso desinflacionario más benigno a través de su efecto sobre el canal de las expectativas de inflación, las proyecciones de deuda pública y los precios de los activos".
(Reporte de Marcela Ayres; Editado en Español por Manuel Farías)