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Fráncfort (Alemania), 28 may (EFE).- El Banco Central Europeo (BCE) cumple el próximo 1 de junio su 25 aniversario con el reto de luchar contra la elevada inflación y sin desencadenar que la economía de la zona del euro entre en recesión.
Asimismo, la zona del euro debe completar la unión bancaria y progresar en la de los mercados de capital para reforzarse en situaciones de crisis como la financiera global y la de endeudamiento soberano, que no la mataron, sino que la hicieron más fuerte.
Por ello, la unión bancaria cuenta desde 2014 con la supervisión única de los bancos a cargo del BCE y de la resolución única de bancos en quiebra para que el coste para el contribuyente sea mínimo.
Pero falta aprobar un sistema común de protección de los depositantes. La Comisión Europea (CE) presentó en abril de 2023 una propuesta legislativa centrada en los bancos medianos y pequeños.
También queda trabajo en la unión de los mercados de capitales y en la soberanía fiscal de la zona del euro en su totalidad, que no existe todavía y se da sólo en cada Estado miembro.
AHORA LA PRIORIDAD ES LA LUCHA CONTRA LA INFLACIÓN
La presidenta del BCE, Christine Lagarde, enfatizó en la celebración el miércoles del 25 aniversario que la prioridad es que la inflación vuelva al 2 %.
El director de Información de AXA IM en Italia y miembro del grupo de contacto del mercado de bonos del BCE, Alessandro Tentori, considera que es posible que la economía "haya entrado en un nuevo régimen, en el que la inflación no sólo es más alta durante más tiempo, sino también mucho más rígida que en el pasado".
Por lo tanto, las herramientas habituales orientadas a la demanda podrían no ser adecuadas.
"No está claro que una recesión sea condición suficiente para enfriar la inflación", dijo Tentori.
EL BCE PREPARÓ LA INTRODUCCIÓN DEL EURO
El BCE es desde hace 25 años el guardián del euro, la moneda que usan oficialmente como forma de pago casi 350 millones de ciudadanos en veinte países europeos.
Se creó el 1 de junio de 1998 con el objetivo de preparar la introducción del euro.
Para celebrar estos veinticinco años Lagarde invitó el pasado miércoles a los principales líderes políticos europeos y a sus predecesores Mario Draghi y Jean-Claude Trichet.
El primer presidente del BCE, el holandés Wim Duisenberg, que presidió la entidad desde junio de 1998 hasta finales de octubre de 2003, murió el 31 de julio de 2005.
Fue el canciller alemán, el socialdemócrata Olaf Scholz, quien se mostró convencido de que el euro es "irreversible" y que más países adoptarán el euro.