Cómo protegerse de estafas en campañas digitales de recaudación de fondos

Dice un nuevo estudio de Juniper Research que para el año 2023 las pérdidas por fraude en internet alcanzarán los 48.000 millones de dólares, el doble de los 22.000 millones previstos para este 2018.

Hablamos de estafas a través del simple comercio electrónico, de la venta de billetes de avión, de las transferencias de dinero y de otros tipos de servicios bancarios. Pero una modalidad bastante reciente ha estado llamando la atención de las autoridades: la que se produce a través de las campañas de ayuda a personas necesitadas, o crowdfunding.

Según estimados, si bien siete de cada diez consumidores que han contribuido a una campaña de crowdfunding le han donado dinero a la persona verdaderamente necesitada, los otros tres han sido víctimas de estafas. Y este desvío, a la larga, ha tenido un valor de unos 400.000 dólares, todos mediante campañas malintencionadas a través de la plataforma GoFundMe.

Es por ello que los expertos recomiendan que los consumidores analicen la campaña en la que desean participar y que consideren su efectividad en el contexto más amplio de sus donaciones caritativas.

La idea, claro está, es que el sentimiento de ayuda que nos lleva a donar parte de nuestro dinero no tenga consecuencias indeseadas.

El caso que desató la alarma

Este tema ahora mismo está en todas las noticias, a raíz del juicio a una pareja de Nueva Jersey que se puso de acuerdo con un desamparado para lanzar una campaña de donación de fondos.

En 2017, Mark D’Amico y Kate McClure, crearon la campaña “Pay It Forward” en GoFundMe para supuestamente ayudar a Johnny Bobbitt Jr., quien decían que le había entregado a McClure los últimos 20 dólares que tenía luego de que su auto se quedara sin combustible.

En su momento la campaña recaudó unos 400.000 dólares, pero luego se supo que todo era un montaje, por lo que los tres han sido llevados ante la justicia.

“Toda la campaña se basó en una mentira”, declaró el fiscal del condado de Burlington en una conferencia de prensa, según la NBC.

Por su parte, la plataforma GoFundMe le aseguró a CNBC que todos los donantes de la campaña recibirán un reembolso completo conforme a la política del portal.

Para el portavoz de la empresa, Bobby Whithorne, semejante uso indebido es raro, y representa menos de una décima parte del 1% de todas las campañas, aunque “una campaña fraudulenta ya es demasiado”.

“Tenemos una política de tolerancia cero ante el comportamiento fraudulento –declaró Whithorne-. Si se produce un fraude, los donantes son reembolsados, y trabajamos con los funcionarios encargados de hacer cumplir la ley para recuperar ese dinero”.

Persona sin hogar pide en Escocia. Foto: PA

No obstante, según Stephanie Kalivas, analista de la empresa tasadora sin fines de lucro Charity Watch, este es “un ejemplo perfecto de lo que puede salir mal con el financiamiento colectivo”.

“Hay muchos riesgos y debilidades inherentes”, aseguró.

Es por ello que todos debemos tener en cuenta qué vamos a hacer, mucho antes de colocar nuestro dinero sobre la mesa y entregárselo a una buena causa.

Ayudar a un caso conocido

Según los expertos, las campañas de financiamiento y ayuda más seguras son aquellas en las que el donante conoce a las personas involucradas: esto nos hará sentirnos más seguros de que la necesidad del beneficiario es legítima y que el organizador de la campaña (en caso de tratarse de una tercera persona) es confiable para recibir los fondos recaudados.

En caso de que no exista una conexión personal, debemos examinar la campaña para conocer detalles como el vínculo entre el organizador y el beneficiario, además de cómo se utilizará el dinero. Muchas veces al leer los comentarios de los donantes, nos ponemos al tanto de las preocupaciones o reclamos de los demás.

Compruebe el estado fiscal

Solo las donaciones caritativas hechas directamente a una organización sin fines de lucro califican para una deducción de impuestos, estimó para NBC Annette Nellen, profesora de la Universidad Estatal de San José. Si esto es importante para usted, busque detalles en la plataforma y la campaña que indiquen que el destinatario es una organización benéfica que reúne los requisitos.

Como la mayoría de las campañas se realizan para beneficiar a una persona necesitada, ya sea para ayudarle con las facturas médicas o en la reconstrucción de un hogar luego de un desastre natural, estas ayudas son consideradas como regalos personales, y por lo tanto no son deducibles fiscalmente.

Evalúa tus objetivos

Cada vez que participamos en una campaña que nos llega a través de las redes sociales para ayudar a una persona, hay muchas otras historias similares que dejan de recibir nuestra atención.

Un estudio publicado en 2017 por la revista Social Science & Medicine descubrió que, de 200 campañas en GoFundMe que buscaban fondos para solventar gastos médicos, nueve de cada diez no cumplieron con su objetivo.

Según los investigadores, el buen manejo de las redes sociales, así como las habilidades con el marketing, ayudaron a muchos a impulsar una campaña exitosa.

Es por ello que Kalivas aprueba mucho más la colaboración directa con una organización benéfica reconocida que tenga un historial comprobado de trabajo en función de una causa en particular.

“Ellas poseen formas de asegurarse de que los fondos que usted ha donado se usarán de manera justa entre las víctimas”, concluyó.

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