Yahoo Finanzas El Netflix de los multimillonarios: 3.000 dólares por alquilar una película
Dos empresarios retirados de la industria del cine han creado una compañía para exhibir películas de estreno a una audiencia selecta y millonaria.
Fred Rosen, quien tomó las riendas de Ticketmaster en 1982 y convirtió a la compañía en un peso pesado, y Dan Fellman, el principal experto en distribución de películas de Hollywood, tuvieron la idea durante las rondas de golf que suelen jugar ambos en el Hillcrest Country Club en Los Angeles.
La compañía se llama Red Carpet Home Cinema y hasta ahora se había mantenido bajo un estricto secreto. Gracias a las relaciones de ambos empresarios, ya tiene contratos con las divisiones Warner Bros, Paramount, Lionsgate, Annapurna y 20th Century Fox y Fox Searchlight de Disney, que dan como resultado 40 películas al año, incluidos éxitos de taquilla como Aquaman y A Star Is Born.
Tal como apunta The New York Times, Red Carpet funciona un poco como un club privado. Hay un riguroso proceso de solicitud y los participantes deben tener una tarjeta de crédito con un límite de al menos 50.000 dólares. Los clientes deben comprar una caja de 15.000 dólares que se conecta a un sistema de cine en casa, instalado por un técnico, y protegido de piratería.
Los precios de los alquileres son establecidos por los estudios participantes, con tarifas más altas para blockbusters y más bajas para dramas. Cada alquiler permite dos presentaciones en un período de 36 horas.
El público objetivo
¿Quiénes pueden darse semejante lujo? Casi 46.000 estadounidenses tienen un ingreso anual de más de dos millones de dólares, de acuerdo con cifras oficiales, pero Rosen y Fellman no están interesados en una gran clientela.
“Ni siquiera estamos buscando a 10.000 personas”, dijo Rosen. Con menos de 4.000 clientes, Red Carpet podría tener 300 millones de dólares en ingresos anuales, según las proyecciones de Fellman.
Sherry Lansing, ex directora ejecutiva de Paramount, es inversionista de la compañía que ha estado operando en aproximadamente 25 hogares desde diciembre como parte de una prueba.
Los famosos y los pesos pesados de Hollywood pueden ver películas de estreno en sus casas, gratis, como parte de algo que se conoce como el Circuito Bel-Air. Los estudios permiten que un número limitado de VIP preaprobados “tomen prestadas” copias de nuevas películas.
No es a ellos, desde luego, a quienes se dirige Red Carpet.
“No estoy interesado en comenzar un negocio que interrumpa la experiencia teatral. Tal vez tengamos 400 casas en Nueva York y en Los Ángeles. Tal vez 100 en cada una de las 30 ciudades más grandes de los Estados Unidos “, dijo Fellman.
El negocio ha sido posible en parte porque Fellman y Rose dejaron que los estudios fijaran los términos. Aun así, los estudios son cuidadosos y ninguna de las compañías cinematográficas que se han registrado como socios de Red Carpet accedieron a hablar públicamente sobre la empresa. Universal, Sony Pictures y filiales de Disney también se negaron a comentar.
Red Carpet surge en un momento en que la industria del cine está experimentando un cambio radical, impulsado por Netflix (NFLX). Mientras que los propietarios de teatros insisten en un período de exclusividad de tres meses para exhibir nuevas películas, Netflix ha comenzado a ofrecer a los teatros una ventana exclusiva de tres semanas o menos para películas como “Roma” y “Bird Box”. Red Carpet, de algún modo, se suma a la tendencia…pero a un mayor costo.
Artículos relacionados que te pueden interesar:
