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“Las sociedades son como los matrimonios, tienes que escoger muy bien a tu pareja”: Mi Gusto Es

Hace 20 años, luego de la nostalgia de recordar las carretas de mariscos de Sinaloa, Humberto Herrara, originario de Mazatlán y Edgardo Estrada, de Sonora, decidieron abrir un pequeño local en la colonia Narvarte, para traer a la Ciudad de México un pedacito de su tierra natal.

Sin experiencia en el sector restaurantero, pues Humberto es piloto aviador y Edgardo ingeniero en sistemas, iniciaron el negocio con tan solo seis sillas. Hoy, 20 años después ya cuentan con 15 sucursales a lo largo de la Republica Mexicana como Cuernavaca, Mérida, Pachuca, Puebla, Toluca y la Ciudad de México y otros restaurantes: Culichioso, Tebori y la pastelería Dulce Rojo que se ubica en Metepec.

El camino no ha sido fácil, pues a no tener experiencia en restaurantes, emprender con amigos y familia —debido a que sus esposas son parte del negocio— y enfrentar la pandemia ha traído altibajos, pero la clave ha estado en la confianza y en conocer el negocio, puesto que cada integrante del negocio conoce las entrañas de la empresa.

Cuando iniciaron el negocio se repartían los fines de semana, para tener la oportunidad de seguir atendiendo a los hijos y los compromisos, ello les permitió pasar por diferentes puestos en la compañía, desde pelar camarón, cocinar, repartir los productos en las diferentes sucursales y ser mesero.

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Las sociedades son como los matrimonios, tienes que escoger muy bien a tu pareja. La fortaleza es que nos respetamos mucho, no te digo que todo ha sido color de rosa, por supuesto que hemos tenido diferencias, como si fuera un matrimonio, pero siempre ha prevalecido el bienestar del negocio”, comentó Humberto en entrevista.

Precisó que cuando hay algún problema se reúnen para dialogar cuál sería la mejor solución y no llegan a un acuerdo acuden a un experto, a fin de que tener la mejor solución para el negocio.

¿Cómo enfrentaron la pandemia?

La pandemia también impactó en los negocios de los emprendedores, debido al cierre temporal y las bajas ventas, que llegaron a ser solo del 10 por ciento. El grupo tuvo que cerrar tres sucursales; dos de Mi Gusto Es y una de Culichioso, la sucursal de Jinetes en Tlalnepantla que había abierto en 2020.

Este año se reinauguro la sucursal de Mi Gusto Es de Santa Fe, que también tuvo que cerrar porque al ser una zona de oficinas el numero de comensales disminuyo considerablemente durante la pandemia.

Esta nueva sucursal es el inicio de una nueva era, la evolución de nuestro concepto y guía de las nuevas sucursales al futuro. La muestra de que trabajar con foco en el cliente, con respeto a nuestro sabor y con los mejores colaboradores es el camino adecuado”, comenta Edgardo.

Para sortear la pandemia los empresarios mantuvieron arreglos de hasta el 80% con los proveedores y caseros, lo cual les permitió seguir adelante con las sucursales.

“Lo más importante es nuestra gente, lo segundo los caseros, tercero, proveedores y cuarto lo demás”, por ello la empresa no cortó personal durante la pandemia, sólo no renovaron contratos temporales, pero las personas de planta se mantuvieron.

Además, para hacer frente y continuar teniendo ingresos se sumaron a las plataformas de delivery, pero aun trabajan para que el sabor sea el mismo en servicio a domicilio, debido a que muchas veces el tiempo de entrega suele tardar y la comida puede llegar fría, lo cual sale de sus manos.

“No éramos muy afines, pero no te tienes que hacer viejo en tu pensamiento, estamos preocupados de darle a la gente lo que quiere, y ahora quieren delivery. La cuestión está en que el producto siga conservando la calidad”, destacó Humberto.

20 años de retos y crecimiento

Mi Gusto Es recibe su nombre gracias a la famosa canción, característica de Sinaloa. La empresa ha pasado de 25 a 1500 clientes al día, en sus 15 sucursales. Tan sólo entre 2021 y 2022, pasaron de 480,000 a poco más de 540,000 comensales anuales; y este año durante el periodo de cuaresma, recibieron a más de 17,000 personas en sus diferentes locaciones.

Al crecer el negocio, se creó una identidad propia que no ha dejado de evolucionar, y se profesionalizó su operación, desde la implementación de un centro de distribución en Metepec que despacha más de 330 toneladas de alimento al año, hasta el Centro de Capacitación MGE, que forma a sus empleados en todas las áreas de servicio.

“Mi Gusto Es, un lugar hecho por amigos para pasarla bien y comer delicioso; somos obsesivos con la experiencia de sabor y siempre estamos en busca de nuevos platos que vayan con un estilo muy nuestro; incorporamos siempre nuevas ideas, le damos nuestro propio estilo a recetas clásicas, queremos que siempre nuestros visitantes encuentren algo que no está en ningún otro restaurante” comenta Humberto Herrera, cofundador y director de operaciones del grupo restaurantero.

La empresa tiene más de 500 colaboradores y el 25% de la plantilla laboral es originaria del municipio de Xochistlahuaca, Guerrero, una zona marginada ubicada en la sierra del estado, y que además de empleo, obtiene capacitación y apoyos para su crecimiento personal y profesional.