Esta universidad históricamente negra creó su propio sistema de pasantes en el sector tecnológico

Buscar un puesto de pasante en una compañía tecnológica líder o en una empresa emergente puede ser una hazaña deprimente para muchos estudiantes universitarios, pues requiere un esfuerzo continuo de seis meses que a menudo no logra gran cosa, salvo una serie de rechazos.

Ahora, la Universidad Estatal de Bowie, una universidad históricamente negra en Bowie, Maryland, ha creado su propio programa de prácticas. Y no requiere que los estudiantes universitarios sorteen los obstáculos habituales de Silicon Valley, como dedicar innumerables horas a estudiar para los exámenes de programación de las empresas o someterse a evaluaciones técnicas de alta presión mientras un entrevistador de una de esas empresas tecnológicas solo te mira.

“Para serte sincera, es un proceso brutal”, afirmó Rose Shumba, directora del departamento de informática de la universidad, refiriéndose al proceso de solicitud de pasantías en muchas grandes empresas tecnológicas. Describió cómo intentaba animar a los estudiantes estresados mientras se preparaban para entrevistas técnicas que, en su opinión, no evaluaban sus aptitudes ni su potencial profesional. “Aquí en Bowie vemos las cosas de forma muy diferente”.

Con el fin de ampliar las oportunidades de los estudiantes, el departamento de informática creó el año pasado su propio programa de prácticas en colaboración con varias empresas y organismos públicos. El objetivo del programa es poner en contacto directo a estudiantes con empresas que buscan pasantes. También organiza sesiones de formación para estudiantes sobre técnicas de entrevista y talleres sobre temas de actualidad como el aprendizaje automático.

El método de Bowie ofrece a los estudiantes una alternativa al sistema impersonal y masivo de solicitud de pasantías de muchas grandes empresas tecnológicas. En este proceso suelen participar decenas de miles de estudiantes universitarios que envían sus currículos en frío a portales en línea, donde los candidatos primero son categorizados por un software que lee y clasifica currículos.

En la Universidad Estatal de Bowie, las empresas participantes acuden con frecuencia al campus para conocer, orientar, entrevistar y contratar directamente a estudiantes para puestos de pasantes; un proceso que es más íntimo que las sesiones informativas breves que las empresas tecnológicas suelen organizar con los centros vocacionales de las universidades. Además, el proceso de Bowie por lo general no incluye pruebas técnicas de alto nivel de estrés. Esto ha evitado que muchos estudiantes, algunos de los cuales tienen trabajos de medio tiempo, tengan que pasar decenas de horas no remuneradas aplicando para programas de prácticas en Silicon Valley.

Fundada en 1865, la Universidad Estatal de Bowie es una potencia académica en informática entre las universidades históricamente negras. La escuela es conocida a nivel nacional por su experiencia en educación sobre ciberseguridad. El otoño pasado, el número de estudiantes universitarios de Bowie que estudiaban ciencias de la computación ascendió a 332, un 75 por ciento más que en 2019.

Pero en los últimos años, solo unos pocos estudiantes de Bowie han logrado avanzar en el proceso de selección para obtener pasantías en empresas tecnológicas líderes como Amazon, Microsoft y Oracle, dijo Shumba.

La competencia llega a ser bastante dura. Adobe, fabricante de Photoshop, afirma que suele contratar a unos 600 pasantes de entre los más de 100.000 candidatos que se presentan cada año a su programa de prácticas de verano en Estados Unidos.

El verano pasado, con el nuevo programa en marcha, 60 estudiantes de informática de Bowie hicieron prácticas en empresas como Deloitte, agencias federales como la NASA y nuevas empresas locales. Una de ellas fue Dejai Brown, ahora estudiante de último año, interesada en la ciberseguridad.

Antes de empezar a aplicar a pasantías, Brown trabajaba de medio tiempo en Chick-fil-A. El año pasado, después de que Shumba la animara a solicitar una autorización de seguridad del gobierno, Brown entró como pasante en el Comando Cibernético de las Fuerzas del Cuerpo de Marines. También hizo prácticas en Battelle, un gigante de la investigación tecnológica sin fines de lucro.

“Los reclutadores en Battelle se pusieron en contacto conmigo, me entrevistaron a través del proceso de la universidad, y al final me contrataron”, contó Brown, de 21 años. “Eso fue mucho menos estresante de lo que hubiera podido ser una entrevista con pruebas de programación”.

El programa de la Universidad Estatal de Bowie sortea las barreras socioeconómicas —como la falta de experiencia laboral técnica o de contactos en la industria— que a veces impiden que algunos estudiantes sean aceptados en puestos de prácticas profesionales.

Para ayudar a los más jóvenes a adquirir experiencia, Shumba organizó en el campus prácticas de investigación informática. El año pasado, también llevó a un grupo de estudiantes en un viaje con todos los gastos pagados a la Grace Hopper Celebration de Florida, una importante conferencia anual de mujeres en el sector tecnológico. Seis estudiantes regresaron al campus con ofertas de pasantías o trabajo de Apple, Bank of America, Citibank y otras empresas.

Entre ellas estaba Roxan Rockefeller, una estudiante de tercer año que el verano pasado trabajó como becaria de ingeniería de software en la empresa tecnológica Tata Consultancy Services. Luego, el otoño pasado, en la conferencia, asistió a una sesión informativa del gigante farmacéutico Eli Lilly. Esto la llevó a una entrevista para ingresar como pasante.

“Me apasionan los datos y empecé a hablar de que quiero explorar tantos campos como sea posible con mi título de informática”, cuenta Rockefeller, de 21 años. “Al día siguiente, recibí una llamada de uno de los reclutadores diciéndome por teléfono que había conseguido el puesto de becaria”.

Este año, Adobe inició su propio programa de prácticas con la Universidad Estatal de Bowie, enfocado en la ciberseguridad. Las prácticas forman parte de un esfuerzo más ambicioso de la empresa para ayudar a preparar a más estudiantes negros y latinos para carreras tecnológicas.

Este verano, alrededor de una docena de estudiantes de Bowie trabajarán como pasantes de ciberseguridad en Adobe. Esto hará que los estudiantes de Bowie puedan aspirar a ofertas de trabajo de tiempo completo en Adobe después de graduarse, al igual que cientos de otros becarios de verano en la empresa.

c.2023 The New York Times Company