Nos veremos antes de fin de año en Miami en una pelea de Robeisy Ramírez, a quien sí apoya su comunidad

La historia de Bob Arum con los boxeadores cubanos es algo tormentosa. El legendario promotor es de la idea que los púgiles llegados en las últimas décadas nunca fueron respaldados del todo por la comunidad de Miami, pero siente que con Robeisy Ramírez todo puede ser diferente.

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Aunque no se decanta ni de un lado ni del otro, Arum no oculta que Ramírez pudiera ser el ganador de su pelea de título mundial este sábado por la pantalla de ESPN+ contra el ghanés Isaac Dogboe y llega, incluso, a ilusionarse con una defensa de la faja del peso pluma en la Capital del Sol.

Conocedor de La Habana por dos viajes realizados a la isla antes y después de la llegada al poder de Fidel Castro, Arum hasta se permite soñar con una pelea de Ramírez en suelo cubano, pero en una realidad muy distinta a la actual. Eso, para un hombre de 91 años, es un acto de fe en la vida.

¿Qué le motivó a reunirse con Ramírez?

“Ciertamente, sabíamos de lo que había pasado con él como peleador olímpico. Había ganado dos medallas de oro y eso requiere muchas habilidades, pero lo que realmente nos decidió fue que un gran boxeador nuestro, Shakur Stevenson, quien perdió con Ramírez en los Juegos y ganó plata, nos dijo: tienen que firmarlo, porque no solo es un gran peleador sino una gran persona’’.

Ramírez perdió la primera pelea con Top Rank, ¿perdieron algo de fe?

“La gente que lo trajeron a nosotros nos explicaron que él había perdido casi un año escapando del gobierno cubano y que no estaba en la mejor forma deportiva para mostrar lo que realmente tenía. Nosotros entendimos eso. Luego preparamos la revancha con el peleador que le había ganado y él lo derrotó fácilmente. Desde ese momento ha sido espectacular’’.

¿Cómo visualiza la pelea entre Ramírez y Dogboe?

“Llevamos tiempo promoviendo a Dogboe, el chico africano que vive en los Estados Unidos. Sabemos que es muy talentoso y muy agresivo. Realmente creo que la pelea entre él y Ramírez será muy atractiva para el fanático. No van a perder tiempo. Irán uno encima del otro y uno de los dos será noqueado’’.

Sé que comentaron de una potencial defensa de Ramírez en Miami.

“Sí, la historia de los boxeadores cubanos en Miami no ha sido buena, porque la comunidad nunca los arropó. A pesar de que eran muy buenos como Guillermo Rigondeaux, Yuriorkis Gamboa, Yoel Casamayor, nunca pudieron despegar, pero entendemos que Robeisy es diferente, que tiene muchos fanáticos en Miami, muchos cubanos. La pelea más grande que hice en Miami no fue con un cubano, sino con un nicaragüense: Alexis Arguello cuando enfrentó a Aaron Pryor en el viejo Orange Bowl. Nada me agradaría más, si Robeisy gana, que hacer su primera defensa en Miami’’.

También habló con Ramírez de un viaje de juventud a La Habana.

“Fue en 1957. Visité La Habana con un grupo de amigos. Obviamente, era un lugar diferente por completo. Una arquitectura hermosa. Eramos hombres jóvenes, solteros. La pasamos muy bien. Hace unos 10 años mi esposa y yo fuimos en una misión de regresar a Cuba organizada por la comunidad judía de Las Vegas. Llevamos medicinas y de todo un poco. Pasamos una semana y me quedé en shock al ver esos hermosos edificios destruidos, como si una bomba hubiera caído en La Habana, particularmente en el Malecón. Eso me puso muy triste’’.

Ojalá Ramírez pueda pelear en una Cuba diferente.

“Eso sería increíble. Los cubanos son gente buena. Llevan muchos años viviendo esta pesadilla. La causa original de todo es Fidel Castro y su idea de cómo debe ser un gobierno. Esperemos que eso cambie, porque es una isla muy hermosa con sus playas y todo. Puede ser uno de los grandes destinos turísticos en el mundo’’.

Nos veremos pronto.

“Nos veremos antes de fin de año en Miami, estoy seguro, con una pelea para Robeisy’’.