Wall Street amplía el castigo del viernes ante el miedo a las subidas de tipos de la Fed

El DOW JONES abre con un retroceso de un 0,78% hasta los 32.030 puntos, mientras que el S&P 500 se deja un 0,82% hasta marcar 4.024 puntos. El NASDAQ 100, por su parte, baja un 0,91% hasta los 12.035 puntos.

Wall Street sufrió una fuerte venta el viernes, cuando las breves y contundentes declaraciones del presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, en Jackson Hole (Wyoming) parecieron extinguir las esperanzas de que el banco central cambie su agresivo curso de subidas de tipos en los próximos meses.

El presidente de la Fed avisó de que la institución no bajará el ritmo de subidas de tipos, al tiempo que reconoció que esta política causará “cierto dolor” a empresas y hogares. La respuesta de Wall Street fue inmediata: el Dow cayó 1.008 puntos, o algo más del 3%, en su peor día desde mayo. El S&P 500 y el Nasdaq Composite cayeron un 3,4% y un 3,9%, respectivamente, en sus peores días desde junio. La caída borró las ganancias de agosto para los tres índices.

“Los inversores volvieron a recortar su reciente posicionamiento Risk-On, lo que respalda nuestra opinión de que es demasiado pronto para calificar su reciente apetito por el riesgo como una postura más permanente, y ahora es más probable que les haya costado mucho”, reflexiona Rick Bensignor, de Bensignor Investment Strategies, en una nota a los clientes.

“Mantenemos nuestra opinión de que la Fed subirá los tipos en otros 100 puntos básicos de aquí a finales de año, con riesgo de más si la inflación no se ralentiza en línea con nuestras previsiones”, apunta por su parte Mark Haefele, director de inversiones de UBS Global Wealth Management. “Con la probabilidad de que los tipos se mantengan más altos durante más tiempo, nuestro caso base es que haya más volatilidad, rebajas de beneficios y tasas de impago más altas de lo esperado en el transcurso del próximo año”.

Esta semana entrante habrá más discursos de la Reserva Federal, entre ellos el de la vicepresidenta Lael Brainard el martes, antes del informe de nóminas no agrícolas de agosto el viernes.

Mientras tanto, en Europa los funcionarios del BCE siguen un guion similar. Tanto el austriaco Robert Holzmann como su colega holandés Klaas Knot mencionaron la posibilidad de una subida sin precedentes de tres cuartos de punto en su reunión de septiembre. Isabel Schnabel, miembro del Comité Ejecutivo, advirtió que la probabilidad de que las expectativas de inflación se desanclen es incómodamente alta. Así, ha advertido de que los bancos centrales deben seguir luchando contra la inflación, incluso si eso lleva a las economías a la recesión.

En el plano empresarial, entre las empresas protagonistas de la jornada se encuentra 3M, que deberá hacer frente a más de 230.000 demandas que la acusan de vender tapones defectuosos al ejército estadounidense, después de que un juez estadounidense dictaminara el viernes que la quiebra de una filial no detenía las demandas contra la empresa matriz que no estaba en quiebra.

Las empresas que se declaran en quiebra suelen recibir un indulto inmediato de las demandas, y la filial de 3M, Aearo Technologies, argumentó que la ampliación de esas protecciones a 3M le daría tiempo a Aearo para hacer frente a sus deudas y objetivos de reestructuración. Aearo y 3M habían argumentado que la quiebra ofrecía una forma más rápida y justa de compensar a los veteranos que dicen que los tapones fabricados por Aearo les causaron pérdida de audición. Pero el juez de quiebras Jeffrey J. Graham, de Indianápolis, cree que la reestructuración de la quiebra de Aearo podía proceder en paralelo a las demandas.

Las acciones de 3M caen un 0,88% en la apertura de Wall Street tras haberse desplomado un 9,54% en la sesión del viernes.

Caídas también para las acciones de Netflix. La plataforma está estudiando un precio mensual de entre 7 y 9 dólares para el servicio con publicidad que estrenará en breve, según una información adelantada por Bloomberg. La cifra se compara con el precio de 15,49 dólares del actual plan sin publicidad más popular de la compañía.

Tampoco Qualcomm logra escapar del pesimismo. Y eso que los inversores han desayunado con la noticia adelantada por Reuters de que los reguladores antimonopolio de la UE no recurrirán la sentencia judicial que anula la multa de 997 millones de euros impuesta al fabricante de chips estadounidense.

El Tribunal General, con sede en Luxemburgo, fue crítico con la gestión del caso por parte de la Comisión Europea, diciendo que las irregularidades procesales habían afectado a los derechos de defensa de Qualcomm. Los jueces también invalidaron el análisis de la Comisión de que los pagos realizados por Qualcomm a Apple eran anticompetitivos porque el regulador no había tenido en cuenta todos los hechos relevantes.

Etsy es protagonista ante las informaciones que apuntan a que exigirá a los vendedores estadounidenses que utilicen la plataforma online que verifiquen por sí mismos sus cuentas bancarias o que proporcionen a la plataforma su nombre de usuario y contraseña para esas cuentas. La medida estaría provocando el rechazo de los vendedores, algunos de los cuales están considerando abandonar Etsy. Las acciones caen 1,1% en los primeros compases de la negociación.

En otros mercados, el bitcoin se deja llevar también por el pesimismo y cae por debajo del nivel de 20.000 dólares, que algunos ven como un indicador de una caída más profunda en el sentimiento de los inversores.

El oro retrocede también en la mañana de este lunes, mientras que el petróleo gana terreno por los riesgos de la oferta con el barril de West Texas en 94,33 dólares. Mientras tanto, los precios del gas natural en Europa registraron la mayor caída desde abril, después de que Alemania dijera que sus almacenes de gas se están llenando más rápido de lo previsto de cara al invierno.

En los mercados de renta fija, muy sensibles siempre a la política monetaria, la rentabilidad del bono estadounidense de deuda a diez años sube en ocho puntos básicos hasta alcanzar el 3,123%, mientras que la rentabilidad del bono a 30 años escala hasta el 3,257%. El rendimiento del bono a dos años sube hasta el 3,47%, en zona de máximos desde 2007, al inicio de la crisis financiera.