Anuncios
U.S. markets closed
  • S&P 500

    5,303.27
    +6.17 (+0.12%)
     
  • Dow Jones

    40,003.59
    +134.21 (+0.34%)
     
  • Nasdaq

    16,685.97
    -12.35 (-0.07%)
     
  • Russell 2000

    2,095.72
    -0.53 (-0.03%)
     
  • Petróleo

    80.00
    +0.77 (+0.97%)
     
  • Oro

    2,419.80
    +34.30 (+1.44%)
     
  • Plata

    31.77
    +1.90 (+6.36%)
     
  • dólar/euro

    1.0872
    +0.0002 (+0.02%)
     
  • Bono a 10 años

    4.4200
    +0.0430 (+0.98%)
     
  • dólar/libra

    1.2706
    +0.0035 (+0.28%)
     
  • yen/dólar

    155.6190
    +0.3120 (+0.20%)
     
  • Bitcoin USD

    67,233.70
    +856.23 (+1.29%)
     
  • CMC Crypto 200

    1,372.69
    -1.16 (-0.08%)
     
  • FTSE 100

    8,420.26
    -18.39 (-0.22%)
     
  • Nikkei 225

    38,787.38
    -132.88 (-0.34%)
     

El BCRA ya no pudo comprar reservas el día después del dólar soja II

El Banco Central volverá a correr de atrás a los dólares de la oferta privada?
El Banco Central volverá a correr de atrás a los dólares de la oferta privada?

El Banco Central (BCRA) cerró la primera rueda cambiaria del año con un saldo “neutro” por sus intervenciones sobre la plaza oficial, aun cuando resta un remanente del dólar soja II por liquidarse.

El dato marca el cambio de tendencia que se espera se vuelva a imponer en el mercado, ahora que culminó la segunda versión del esquema de incentivo a las liquidaciones sojeras, un estímulo que le permitió capturar US$2167 millones para sus reservas al cabo de las 22 jornadas que estuvo en vigencia al igual que, dos meses antes, le había acercado otros US$5014 millones.

Después de todo no hay operador que no sepa que, sin esa costosa rueda de auxilio, el BCRA habría cerrado el 2022 con saldo fuertemente en rojo por sus intervenciones sobre el mercado, algo que evitó por estos programas de aliento a la demanda y por haberse incluso quedado -por algunos días- sin casi nada que vender.

PUBLICIDAD

El economista Tobías Pejkovich, miembro del equipo de estrategias de Facimex Valores, explica que si se excluyen los saldos fuertemente positivos que el BCRA logró durante septiembre y diciembre, meses en que funcionó la CAM9 del MAE para tomar liquidaciones a $200 y $230 respectivamente, la entidad que conduce Miguel Pesce hubiera cerrado 2022 “con un saldo vendedor de US$1130 millones”.

Y si se considera que la experiencia de la última década muestra que septiembre era un mes en que el BCRA perdía reservas por ventas en el mercado (en diciembre solía recuperar una ínfima parte de ello), se podría inferir que el saldo negativo podría haber sido aún mayor.

La clave del desbalance que mantiene la plaza cambiaria oficial, pese a las cada vez más amplias restricciones impuestas a la demanda de divisas, pasa por el nivel que alcanzó el atraso cambiario que tuvo su cénit en el final del tercer trimestre, cuando el Índice de Tipo de Cambio Real Multilateral (ITCRM) bordeó los 87 puntos, quedando en el menor nivel desde el momento previo a la corrida que signó la suerte de la administración Macri. “Nosotros estimamos que el tipo de cambio real se apreció otro 9,5% durante el año pasado”, acota Pejkovick.

Es un factor que desalienta y condiciona la oferta de divisas y hasta la pulveriza a nivel individuos (en noviembre las ventas de personas humanas fueron por apenas US$4 millones, el menor monto en casi dos años, según el último balance cambiario).

De allí que la atención de los operadores estará centrada en establecer si esta vez podrán “cuidarse” los dólares, como había prometido el ministro de Economía, Sergio Massa, tras el fin del dólar soja I y antes de que el BCRA debiera sacrificar US$1500 millones de sus reservas en ventas en poco menos de dos meses, al menos hasta que se recomponga el flujo comercial del sector agroexportador.

Por lo pronto, el cierre de la primera rueda del año ya plantea dudas, si bien sus datos hay que tomarlos con precaución, dado que surgen de una jornada de actividad algo acotada por la coexistencia de un feriado en Estados Unidos. De hecho, el volumen operado, que venía de superar los US$500 millones en las tres ruedas precedentes, cayó hasta los U$194,8 millones en el segmento de contado.

En este marco, el BCRA habilitó una suba de $0,99 para el dólar mayorista, que cerró a $177,95/178,15 por unidad para la compra y venta, respectivamente.