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Llegó al campo y se sorprendió por el ataque de un animal que hace cada vez más daño

El silobolsa que rompieron los jabalíes
El silobolsa que rompieron los jabalíes

En septiembre último, el productor agropecuario Gonzalo Chacón recibió el llamado de un vecino al cual con su máquina le había embolsado soja: el mensaje era que los bolsones estaban rotos. Desconcertado, se dirigió al establecimiento, ubicado en el departamento de Quemú Quemú, en la provincia de La Pampa, en donde estaban los silobolsas.

“Estaba muy preocupado y quería saber si el problema era la embolsadora, pero a mí me parecía raro porque yo también la utilicé para mis granos y mis bolsones estaban perfectos”, indicó. Al llegar al lugar, se encontró con que los tres bolsones de aproximadamente 180 toneladas de soja “estaban todos mordidos” por jabalíes.

Chacón grabó con su celular la escena y compartió el video en un grupo de Whatsapp que tiene junto a otros productores de la zona. Pocos minutos después ya eran varias las respuestas de otros productores que manifestaban haber sufrido las mismas consecuencias.

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En rigor, según dijo, se trata de una problemática que se repite en muchos de los campos de la zona. Hay cada vez más jabalíes e inclusive en lugares donde antes no solían aparecer. Aseguran que son “incontrolables” y son mayores los daños que causan porque, además de que en los lotes sembrados se comen el maíz y dañan los alambrados, empezaron a romper los bolsones en busca de alimento.

“Es impresionante lo que está pasando porque antes pasaba solo en el monte y ahora toda la pampa húmeda se está llenando de jabalíes”, describió, por su parte, Federico Cobreros, de la Sociedad Rural de Quemú Quemú. Comentó que mientras en el invierno hociquean los lotes y hacen pozos, en el verano la piara rompe el maíz sembrado para hacer una especie de círculos en donde habitan.

Algo similar planteó Jorge Arocena, integrante de la Comisión Directiva de la Sociedad Rural de General Pico y vicepresidente segundo de la Confederación de Asociaciones Rurales de Buenos Aires y la Pampa (Carbap). Señaló que desde hace cinco años que en los campos de la zona empezaron a encontrar estos animales, algo que fue “novedoso” para los productores. Allí también ven cada vez más pumas.

Ha habido como un corrimiento de la especie que antes estaba solo en los montes, ahora los campos sembrados también se convirtieron en su hábitat. Principalmente, están en los maizales”, indicó el productor.

Impacto económico

“Todavía no estamos en una instancia de combatirlos, muchos los cazan o los ahuyentan, pero están ya haciendo daño más que todo en las áreas sembradas y atacan los bolsones”, sostuvo.

En un proyecto sobre diversas especies invasoras que afectan a la producción, el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) concluyeron que el jabalí causa por año una pérdida económica de US$1380 millones.

Se trata de una especie originaria del Norte de África, se diseminó por toda Europa y Asia. Fue introducida en 1905 en la Argentina por Pedro Luro, que la trajo de Francia a su propiedad ubicada en la provincia de La Pampa para la caza. Pero luego de unos años hubo una fuga de muchos ejemplares. Eso los convirtió en animales silvestres que luego, con el apareamiento con cerdos domésticos, se volvieron cimarrones.

Asimismo, al desarrollarse en el país, la especie logró tamaños mucho más grandes que los ejemplares europeos, debido a la facilidad que tenían para alimentarse y a la escasez de depredadores. Sus crías tienen el lomo amarronado con franjas longitudinales blancas y cuando crecen todo su pelaje se vuelve oscuro. Los machos tienen colmillos característicos, codiciados como trofeo de caza. Se han convertido, por un lado, en buscados por cazadores y, por el otro, en plaga para los productores.

Esta nota se publicó originalmente el 11 de septiembre de 2022