Cómo Chiapas, México, se convirtió en una bodega del narcotráfico

En los últimos dos meses, las fuerzas castrenses de México han asegurado grandes cantidades de cocaína enviada desde Sudamérica y que, en su mayoría, tiene como destino final, el vecino país de EEUU.

Lo peculiar de las incautaciones es que, una gran mayoría, han ocurrido en el estado de Chiapas; la más reciente ocurrió el pasado 4 de febrero. De acuerdo con la FGR (Fiscalía General de la República), un juez vinculó a una persona por su presunta participación en la descarga de paquetes de cocaína en el municipio de Ocosingo, en la misma entidad.

Según las autoridades, el sujeto fue descubierto mientras ejecutaba el delito. Así lo detalló el comunicado de la dependencia: “La detención de Carlos “G”, se realizó cuando se encontraba descargando de una aeronave que hizo aterrizaje en el citado lugar, 25 paquetes con clorhidrato de cocaína con un peso de 223 kilos 966 gramos siete miligramos; además le aseguraron un arma de fuego, tres cargadores y 19 cartuchos útiles”.

En el mes de enero, la FGR incautó cientos de kilogramos de cocaína envueltos en paquetes. El aseguramiento también se realizó en el estado de Chiapas. Los elementos del orden lograron capturar a las dos personas que tripulaban la unidad aérea que transportaba los estupefacientes, entre ellos, se encontraba un menor de edad.

En este último caso y gracias a una vigilancia con los radares de la Sedena (Secretaría de la Defensa Nacional), se tuvo conocimiento de la nave intrusa que aterrizó a poco más de 20 kilómetros de la comunidad de San Quintín, también en Ocosingo, Chiapas.

El pasado 4 de enero, la Semar (Secretaría de Marina) logró el “aseguramiento de aproximadamente 895 kilogramos de clorhidrato de cocaína, a bordo de una embarcación menor; así como la detención de cuatro personas, presuntos infractores de la ley, en aguas del Pacífico mexicano, frente a la costa de Chiapas”, reveló un comunicado de la dependencia.

Semanas antes, en diciembre de 2022, la Semar había asegurado 920 paquetes de clorhidrato de cocaína con un peso aproximado de una tonelada, también frente a las costas de Chiapas.

Hasta ahora, las autoridades no han revelado la procedencia exacta de la droga incautada ni tampoco han informado acerca de la organización criminal que proveyó y solicitó esos estupefacientes, tanto en México como en EEUU.