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Una denuncia de maltrato policial encalla el juicio del atentado de Bruselas

Bruselas, 8 dic (EFE).- El juicio por los atentados de Bruselas de 2016 quedó encallado hoy por las denuncias de maltrato policial de uno de los acusados, que dijo haber sido estrangulado durante el traslado hasta el tribunal, y que acabó abandonando la sala junto a otros seis imputados más en señal de protesta.

La vista estuvo suspendida durante una hora y media para que una médico forense pudiese examinar al acusado supuestamente agredido por la policía belga, Ali El Haddad Asufi, el mismo que ayer, miércoles, también denunció la existencia, según dijo, de cámaras de videovigilancia en los lavabos.

Tras realizar el examen clínico a Asufi, la forense avaló la existencia de lesiones en la región cervical asimilables al estrangulamiento descrito por el imputado, además de heridas en la rodilla y en la parte posterior de la cabeza.

Sin embargo, le declaró "médicamente apto" para seguir con la vista, pese a que el acusado explicó a la presidenta del tribunal, la jueza Laurence Massart, que incluso había perdido el conocimiento y que no estaba en condiciones de atender al juicio.

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Cuando la jueza pidió al acusado Asufi que se pusiera en pie para hablar con ella, este lo hizo de forma renqueante, y mientras habló su abogado, estuvo todo el rato con la cabeza reposada sobre la mesa, dentro de la cabina de metacrilato donde se encuentran los siete imputados que, como él, están en prisión provisional.

El abogado de Asufi, Jonathan De Taye, se mostró "alucinado" por la presunta agresión, y se preguntó si los policías que se encargan del traslado "habían sido formados en Abu Ghraib", la prisión iraquí donde el Ejército estadounidense cometió abusos y torturas durante la invasión del país.

De Taye aseguró que su cliente "no es un comediante" y detalló que el supuesto estrangulamiento se produjo, según dijo, en una zona del centro penitenciario donde no hay cámaras de seguridad, antes de partir hacia la sede del tribunal.

En señal de protesta, los siete acusados que están en prisión provisional (el propio Asufi, Salah Abdeslam, Mohamed Abrini, Osama Krayem, Sofien Ayari, Bilal El Makhoukhi y Hervé Bayingana Muhirwa) abandonaron la sala de audiencias, escoltados por la policía, y dejaron vacía la cabina de metacrilato que ocupan.

Aparte de ellos, en la causa hay dos acusados más que están en libertad (que sí permanecieron en la vista) y otro más que está desaparecido, pero que sigue imputado por la falta de pruebas formales que demuestren su supuesta muerte en Siria en 2017. En total, pues, son diez los acusados por los atentados.

Esos ataques dejaron 32 fallecidos el 22 de marzo de 2016 en Bruselas, primero con dos explosiones en el aeropuerto de Zaventem, a las afueras de la ciudad, y después con otra detonación en la estación de metro de Maelbeek de la capital belga, a unos 200 metros de la sede de la Comisión Europea.

El ataque en el aeropuerto causó 16 muertos y el del metro otros 16, en unos atentados que, en conjunto, también provocaron alrededor de 300 heridos.

Tras el receso por la denuncia de estrangulamiento, la Fiscalía federal remarcó durante la vista de hoy que los dos atentados fueron "coordinados y simultáneos", por lo que instó al jurado popular que tendrá que decidir sobre la culpabilidad de los acusados a analizar ambos sucesos "como un único escenario".

Los fiscales Paule Sommers y Michel Bernard siguieron avanzando con la lectura de sus escritos de acusación, centrados, sobre todo, en las figuras de Salah Abdeslam (el único superviviente de los atentados de París de 2015) y Osama Krayem, nacido en Suecia, y que, según dijeron, no llegó a Bélgica hasta 2015.

Por esta razón, el Ministerio Público expuso, a partir de los interrogatorios realizados, que los otros miembros de la célula recurrían más a menudo a Krayem para comprar los productos para la fabricación de explosivos, dado que él no era tan reconocible para la policía belga.

La Fiscalía acusó tanto a Krayem como a Abdeslam, ambos ya condenados en Francia por los atentados de París de 2015, de ser también "coautores" de los ataques de Bruselas de marzo de 2016.

Con todo, durante la vista de hoy, la presidenta del tribunal también certificó la baja de un miembro suplente del jurado popular y atendió a las quejas por el funcionamiento del servicio de traducción simultánea del juicio, que se realiza en francés. EFE

bfm/cat/fpa

(c) Agencia EFE