Yahoo Finanzas No solo construyó la Torre Eiffel sino que se le atribuye esta innovadora joya arquitectónica
Un naufragio en las costas de Angola permitió que esta obra maestra fuera erigida en Luanda.
El Palácio de Ferro, ubicado en la capital angoleña de Luanda, es una obra maestra de la arquitectura de finales del siglo XIX que desafío los estándares de su época por amalgamar la innovación tecnológica y la belleza.
Se trata de una excelente muestra de la época dorada de las construcciones de hierro, en la que la ingeniería y el diseño se funden en perfecta armonía para crear una estructura elegante y funcional.
El Palácio de Ferro se alza sobre una base de granito. Pero es su estructura de hierro forjado y su estilo ecléctico que muestra elementos neoclásicos y art Nouveau lo que le otorga su identidad inconfundible.
La utilización del hierro en la construcción del Palácio de Ferro permitió la creación de un amplio espacio interior. Las columnas de hierro fundido, bellamente trabajadas con patrones decorativos y detalles ornamentales, soportan la estructura y aportan una estética sofisticada.
¿Fue obra de Eiffel?
Nadie sabe a ciencia cierta quién creó el Palácio de Ferro y para qué. Los historiadores coinciden en que la estructura llegó por casualidad al Puerto de Luanda en 1890, cuando el barco que lo transportaba se hundió en aguas territoriales angoleñas.
La Companhia de Comércio de Angola, que se dedicaba a la promoción del comercio y el desarrollo en la región, adquirió el Palació a finales del siglo XIX o principios del siglo XX para utilizarlo como una estación ferroviaria, aunque terminó siendo un centro de arte.
Sus años de esplendor culminaron luego de que Angola lograra su independencia de Portugal. Durante la cruenta guerra civil que sacudió al país entre 1975 y 2002, el Palácio de Ferro fue completamente abandonado. Los indigentes se refugiaban del sol intenso en su interior y lo que alguna vez fueron hermosos jardines exteriores se convirtieron en un enorme estacionamiento.
Hasta que en 2009, la Empresa Nacional del Diamante de Angola rehabilitó el icónico edificio.
Desde que las láminas de hierro fueron rescatadas del naufragio, se especuló que se trataba de la obra del célebre ingeniero civil francés Gustave Eiffel, aunque éste nunca lo reconoció como parte de su legado.
Algunas fuentes señalan que el edificio fue prefabricado en Bélgica por la compañía de Eiffel para una feria internacional, para luego ser transportado en piezas desmontables. Esto permitiría su ensamblaje en el lugar sin la necesidad de construirlo desde cero.
Algunos escépticos consideran poco probable que Eiffel tuviera la capacidad de supervisar la creación de un diseño de hierro tan detallado cuando paralelamente estaba construyendo la Torre Eiffel para la Exposición Internacional celebrada en París en 1899.
Fue una época dura para Eiffel. No sólo porque la torre que ahora es una de las obras arquitectónicas más representativas de Francia fue criticada como ridícula por muchos intelectuales de la época, sino porque su reputación como ingeniero y empresario quedó destruida por un escándalo con el fallido contrato para construir el Canal de Panamá.
Pero la propia Embajada de Francia en Angola reconoció en 2015 que efectivamente se trata de la obra de Eiffel.
“En nombre del gobierno francés, el embajador de Francia en Angola, Sr. Sulvain Itté, certifica que el Palácio de Ferro, patrimonio angoleño, pertenece al universo estético de Gustave Eiffel y fue construido en el ámbito de la Exposición Universal de Paris en 1889”, dice una placa exhibida en el Palácio.
La pista escocesa
Se cree que al concluir la exposición, el Palácio de Ferro fue desarmado y enviado por vía marítima a Magadascar, que para ese entonces era una colonia francesa. Pero el barco se averió en una zona de difícil navegación y encalló cerca de la Costa del Esqueleto, un estrecho costero lleno de esqueletos de ballenas y barcos naufragados del norte de la vecina Namibia.
Las autoridades portuguesas lograron trasladar la carga del barco hasta Luanda.
Pero un descubrimiento reciente pone en entredicho la autoría de la edificación. La curadora y coordinadora del Palácio de Ferro, Arleth Leandro, ha declarado que no han encontrado pruebas que comprueben una vinculación entre el maestro Gustave Eiffel y el edificio.
“En este momento, los hechos apuntan a una conexión con una fábrica en Glasgow, que se habría encargado de la producción de los hierros y eso está documentado aquí”, agregó Leandro.
A finales del siglo XIX, Escocia tenía una sólida tradición en la industria del hierro y era reconocido como uno de los centros industriales más importantes del mundo.
Más allá de su origen, El Palacio de Ferro El Palácio de Ferro de Luanda es mucho más que una estructura arquitectónica. Con una estructura de hierro que desafía la gravedad, detalles decorativos que inspiran asombro y una ubicación estratégica que evoca la historia de la capital de Angola, el palacio se alza como un símbolo de la creatividad y la innovación humana.
Fuentes: Africa, Euronews, AtlasObscura, African News, Hpip
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