El futuro de la creatividad

La creatividad es una herramienta clave en el nuevo contexto que trajo la pandemia, ya que la realidad en constante cambio brinda un espacio donde hay situaciones complejas de índole exponencial. Las nuevas ideas pueden brindar soluciones a estos problemas, y para ello hay que librarse de creencias y sesgos que obstaculizan la creatividad. Sebastián Campanario da cuenta de esta situación y brinda consejos personales y profesionales para dar rienda suelta a las nuevas ideas.

José Del Rio, secretario general de Redacción de LA NACION y moderador del capítulo de “Innovación” dentro de “Negocios del Futuro”, presentó a Campanario, economista, periodista y escritor, quien fuera protagonista desde el primer capítulo de este ciclo de especiales de LA NACION. Campanario, quien en octubre de 2015 publicó Ideas en la ducha, libro sobre creatividad, que agotó sus primeras tres ediciones, comenzó su disertación explicando que se abordará el cruce de agendas entre futuro, innovación y creatividad y se detuvo en el último concepto que le da nombre a aquel libro: “Uno tiene sus mejores ideas en momentos cuando el foco se afloja”. Esta idea se comprobó científicamente, y se verificó que la gente tiene sus mejores ideas cuando está bajo la ducha, cuando pasea al perro, o en distintas actividades donde está relajado.

“Vamos a meternos de lleno en algunas tendencias que para mí hablan de una nueva era de la creatividad”, introdujo Campanario, y luego se detuvo en la definición de este concepto, que es simplemente “la unión de puntos, que nadie había unido, con un valor agregado de originalidad”. Y completó: “Es decir, los puntos sin estar unidos son solo conocimiento, unidos por líneas rectas son experiencia, y unidos de manera creativa son un dato. Los puntos son exactamente los mismos, depende lo que uno haga con ellos tienen un resultado creativo distinto”.

Para dar algunos ejemplos concretos de esta dinámica de unión de puntos, Campanario comentó la génesis de la famosa “chocotorta” que nace como estrategia de marketing en los años 80 que une a las chocolinas y el mendicrim. “Estas epifanías contado expost parece algo fácil, pero no lo es”, sentenció. Otro ejemplo es el de ponerle rueditas en las valijas, que se hizo recién un año después de que el hombre llegará a la luna.

La creatividad entonces tiene un rol protagónico en esta era, y esto se debe a muchos motivos, uno de ellos es el deterioro exponencial. Cuando uno habla de exponencialidad tiende a hablar de tecnología, de inteligencia artificial, de cripto, pero también hay deterioro exponencial. Justamente para “teclear” estos problemas, es que uno tiene que usar soluciones disruptivas, fuera de la caja. “Cuando todo cambia tanto, debe tener mucha imaginación para vislumbrar un escenario a futuro a cinco o 10 años”, expresó Campanario, y en esto la creatividad es clave.

Cuando uno habla de innovación, también habla de cambios culturales a partir de todas las tecnologías emergentes que se están viendo, como Web 3.0, la descentralización y el mundo crypto, son todas grandes “agregadores de puntos”, dijo el economista.

El metaverso, por ejemplo, es una dimensión entera de puntos para agregar de otra manera. Machine learning es también una nueva dinámica de generación de ideas, esto ocurre porque antes los avances eran más azarosos, pero ahora se pueden tener más información.

Y la dinámica de unir puntos se puede ver no solo en los productos, sino también en modelos de negocios. “La industria de videojuegos es más grande que todo la industria de entretenimiento sumada (teatro, cine, música)”, expresó Campanario, pero esto no quiere decir que haya 10 veces más fanáticos: es un sector más poroso a la innovación de modelos de negocios.

Ahondando en el contexto actual, Campanario dijo que en esta era tiene mucho más protagonismo la persistencia. “La suerte es una combinación del azar, pero la otra parte es la velocidad de interacción con el azar”, explicó, e hizo referencia a la importancia de hacer cosas nuevas todo el tiempo para generar cisnes negros positivos. Para ello dio el ejemplo de Isaac Asimov, escritor que hacía una novela cada dos semanas, o Jerry Seinfeld, productor y guionista de “Seinfeld”, la serie más exitosa de todos los tiempos, que mostró en un experimento cómo los borradores de sus chistes ocupaban más de una cuadra de lugar.

En esta última instancia, Campanario dio lugar a diferentes tips personales para generar creatividad. Por ejemplo, y citando a Andrei Vazhnov, dijo que hay que elegir proyectos que tengan alta tasa de retorno de aprendizaje. “Hay que trabajar con extraterrestres”, explicó, lo que hace referencia a trabajar con gente lo más distinta a nosotros posible. Para dar cuenta de esto, Campanario contó que se junta muy seguido con personas de edades muy distintas a la suya. Todo esto limita el “sesgo de confirmación”, que es lo que nos inclina a juntarnos con personas que piensan igual que nosotros.

Para el siguiente valor que hay que incentivar, Campanario citó a la obra The Diversity Bonus, de Scott E. Page. “La diversidad no importa tanto en sí misma, sino que en el equipo hayan personas con estilos cognitivos distintos. Este valor logra equipos creativos exitosos”, aseguró.

La economía del comportamiento, que data de los años 70, da cuenta de más de 200 sesgos que se suelen cometer de manera inconsciente y que son pernicioso para la creatividad. Campanario se detuvo en algunos. El statu quo, solo actuar con lo que en el pasado funcionó y la aversión a la pérdida. “Tendemos a valorar psicológicamente distinto al fracaso del éxito”, explicó, y detalló que en la cultura de Latinoamérica, y especialmente en la Argentina, “somos crueles con el fracaso”.

Otro sesgo es el de la autoconfianza excesiva, es decir tener un ego excesivo. Eso hace recaer en el “sesgo del cepillo de dientes”, que es solo amar nuestras propias ideas. “Cuando hablamos de ego y de percances, toda convicción es una cárcel”, expresó el periodista, citando al filósofo alemán Nietzsche.

Para terminar, Campanario comentó que con la pandemia surgieron con fuerza las herramientas para la cooperación. Haciendo referencia al escritor Steven Johnson, “más del 90% de las ideas exitosas aparecen de manera colaborativa”. Por ello, explicó que, en este contexto, es importante romper los silos, con los congresos solo de una profesión. “Nunca fue tan necesario promover equipos multidisciplinarios”, sentenció.

Campanario también mencionó la económica de la pasión: durante la pandemia surgieron nuevas herramientas de oferta y demanda de productos creativos en plataformas que permiten hacerlo. Esto genera una clase media creativa con mucho menor desigualdad que antes. Cameo es una plataforma que permite que una persona compre un regalo de cumpleaños. Y tuvo una cifra récord de dinero recaudado un famoso personaje de The Office, quien juntó un millón de dólares por solo mandar saludos de cumpleaños

Las redes sociales como el TikTok se presentan como plataformas donde los chicos editan y graban videos y se convierten en desarrolladores audiovisuales. “Hoy no existe grabar algo e ir a una isla de edición, se hace en tiempo real”, explicó.

“Hoy hay billones de ideas, de modelos de negocios, de ideas, no hay tiempo de contar de historias para contar la innovación”, cierra el expositor y citó su frase favorita para incentivar la creatividad: “Es imposible competir con la gente que se divierte haciendo lo que hace”.