Yahoo Finanzas Olivia Benson, la gata de Taylor Swift que vale más que su novio, Travis Kelce
La gata Olivia Benson podría ser una mascota del común, pero ha tenido la suerte de pertenecer a Taylor Swift, que parece que convierte en oro todo lo que toca. Y si no que se lo digan a su nueva pareja, Travis Kelce, y a la Liga Nacional de Fútbol Americano (NFL), que han visto como su valor de mercado se ha disparado desde que se rumorea que la cantante mantiene una relación con el deportista. Rumores sin confirmar, porque, aunque todo confirma lo evidente, ninguno de los protagonistas ha reconocido a viva voz el idilio.
El minino de la artista tiene nombre de personaje ficticio, pero de ficticio poco. Es la segunda gata y tercer animal del mundo más rica del mundo, con un valor neto estimado de 97 millones de dólares. Esto según el ranking ‘The Ultimate Pet Rich List’, que elabora el portal web especializado en mascotas. “Olivia, mejor amiga y compañera de Taylor Swift, ha encontrado su éxito fuera del mundo de los y las mascotas ‘influencers’ de Instagram. La Scottish Fold ha amasado su fortuna protagonizando junto a su dueña varios de sus vídeos musicales, creando su propia línea de ‘merchandising’ y ha realizado cameos en multitud de anuncios de gran presupuesto, incluso para Coke Diet, de Coca-Cola, en 2014 o Ned Sneakers ”, se recoge en la publicación.
Solo por delante de la gata de Taylor Swift se sitúa Nala Cat, otro felino doméstico con 4,5 millones de seguidores de Instagram y una fortuna valorada en 100 millones de dólares. En el top de este escalafón surrealista, Gunther VI, un perro pastor alemán, propiedad de la empresa multimedia italiana Gunther Corporation, que alcanza la friolera de los 500 millones de dólares.
Volviendo a Olivia, su nombre se lo debe al personaje interpretado por Mariska Hargitay en la aclamada serie ‘Ley y Orden’, de la que Taylor Swift es seguidora. Lleva con la cantautora de Pensilvania (Estados Unidos) desde 2014. Es una scottish fold, una exclusiva raza originaria de Escocia de nariz chata y aspecto mullidito. Su apariencia es ciertamente enternecedora debido a sus grandes ojos, orejas casi imperceptibles y abundante pelaje. No es un gato apto para todos los bolsillos: su valor puede alcanzar perfectamente los 1.500 dólares si tiene pedigrí.
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No es el único felino que tiene en propiedad Taylor Swift. Olivia tiene una hermana mayor, Meredith Grey, llamada así por la protagonista de ‘Grey’s Anatomy’, y un hermano pequeño, Benjamin Button, que recibe su nombre del personaje interpretado por Brad Pitt en la película de título homónimo dirigida por David Funcher. Los tres son scottish fold.
Si el valor que se asocia a Olivia Benson es ya de por sí llamativo (obsceno, incluso), el dato es aun más significativo si se compara con el que se le atribuye a Travis Kelce, supuesto novio de su ‘mamá’ humana. El jugador es uno de los ‘tight end’ (posición defensiva en la que juega) más aclamados de la NFL. A sus 33 años, juega en el Kansas City Chiefs, con el que ha ganado dos Super Bowl en las temporadas 2019-2020 y 2022-2023. Tras obtener su primer anillo en la máxima categoría del futbol americano, logró cerrar con su equipo un sustancio contrato de cuatro años por el que se embolsa 57,2 millones de dólares. Esto se traduce a 14,3 millones por temporada. Nada mal.
Sin embargo, y a pesar de ser uno de los jugadores mejor pagados de este deporte, su patrimonio no llega, ni se le acerca, al que ‘amasa’ el gato de su chica. Frente a los 97 millones de dólares Olivia Benson, Travis Kelce “se estanca” en los 30 millones, menos de un tercio. Es te dato es previo al estallido de la noticia de su posible relación con Taylor Swift. Desde que la cantautora ganadora de 12 Grammy acudió al palco de los Chiefs de Kansas City (en dos ocasiones, por el momento), las cifras que rodean a su chico se han disparado exponencialmente. Las ventas de su camiseta oficial con el número 87 han aumentado un 400%, su podcast ya ocupa el número 1 en Apple y ha sumado en apenas unas semanas 383 mil seguidores en su cuenta de Instagram.
Pero no es el único que se está beneficiando del desembarco de Taylor Swift en el futbol americano. De acuerdo con el portal Front Office Sports, el ‘Efecto swiftie’, como ya se le ha bautizado, ha provocado un aumento del 63% en el número de espectadores pegados al televisor para ver la NFL entre los 18 y los 49 años. Lo dicho: todo lo que toca se convierte en oro…
