Yahoo Finanzas Por qué las propinas están fuera de control y cómo actuar al respecto
Cuánto dar de propina es la pregunta que seguramente no deja dormir por estos días a la mayoría de los estadounidenses. Nadie quiere ser “la persona que no da propinas”, de ahí que los negocios han comenzado a exigir más dinero y muchos clientes, entre confundidos e indignados, se sienten presionados a dejar hasta un 20% o 30%.
Ocurre en todos lados, desde restaurantes de comida rápida, servicios de plomería, minoristas online, estadios deportivos o incluso las máquinas de autopago. “Creo que se está saliendo un poco de control”, dijo a NPR Sean Jung, profesor de la Escuela de Administración Hotelera de la Universidad de Boston.
Jung explica que el poder de la presión social es una fuerza económica real y medible, y que se siente como recibir un “codazo” discreto de alguien en la fila para pagar. “Si tienes un sistema que te lleva a hacer algo, se siente como una opción, pero no lo es”, señaló.
Por qué ahora dejamos más propina
Las propinas en los Estados Unidos se han incrementado hasta casi un 20% en promedio, según el sistema de pago de restaurantes Toast, y hay tres razones principales que lo explican.
Primero, la pandemia, momento en el que muchos comenzaron a dar más propinas de lo habitual como una forma de apoyar a los trabajadores esenciales en un momento de crisis. En segundo lugar, la tecnología, que ha cambiado la forma en la que dejamos propina.
“Ahora gira una pantalla delante de ti, quien te dio el servicio está frente tuyo y existe una presión social”, agregó Shubhranshu Singh, profesor de la escuela de negocios Johns Hopkins.
Empresas como Square, la compañía detrás de muchas de las pantallas de pago electrónico, están ganando mucho dinero a costa de esta confusión: se quedan con una parte de cada transacción, incluida la propina.
El mercado laboral en medio de una inflación podría ser el tercer motivo. “El salario que reciben los trabajadores no es suficiente”, dice Jung. “Así que ahora los negocios usan esta forma extraña de aumentar los salarios, manteniendo el mismo precio de menú”.
Punto de inflexión, ¿qué dicen los expertos?
En otras palabras, dar propina es una forma de pagar más a los trabajadores sin pagarles más... para que los restaurantes puedan mantener los precios bajos y que los clientes no se pongan nerviosos ante cualquier señal inflacionaria.
Pero la cultura de las propinas podría estar llegando a un punto de inflexión, analiza NPR. Una encuesta de Bankrate encontró que dos tercios de los clientes ahora tienen una visión negativa de las propinas. Y este año, las propinas han bajado casi un 10% para los camareros de los restaurantes.
Entonces, mientras damos propinas para bocadillos en el aeropuerto, estamos dando menos a los trabajadores cuyo salario depende más de las propinas.
Expertos en etiqueta como Thomas Farley, también conocido como Mister Manners, llaman al fenómeno “tipflation” (inflación de la propina, en inglés). “Ahora todo es caro y además te preguntan cuánto te gustaría dejar de propina”, dijo a CNBC.
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Cuánto dar de propina en los restaurantes
En los EEUU, casi todo el mundo está de acuerdo en dejar propina en los restaurantes, ya que a menudo los meseros, cantineros y otro personal de hospitalidad ganan un salario mínimo significativamente más bajo que el salario mínimo federal regular.
Si te sientas a comer en un restaurante, deja una propina del 15% al 20%, dijo a CNBC la experta en etiqueta Diane Gottsman, fundadora de la Escuela de Protocolo de Texas. Incluso si te quedas en casa y te entregan la comida a domicilio, deberías dejar propina, señaló Gottsman, quien recomienda al menos US$5 por un pedido típico.
Las propinas, especialmente en los restaurantes, reflejan tu experiencia con un servidor, explica, por otro lado, Douglass Miller, profesor de administración de restaurantes en la Escuela de Administración Hotelera Nolan de la Universidad de Cornell.
“Si sentiste que el servicio fue insatisfactorio, sigue siendo amable de tu parte dejar una propina, pero está bien escuchar tu instinto”, dice.
Cuánto dar de propina en vacaciones
Gottsman opina que cuando viajas siempre debes dejar una propina para los aparcacoches, los botones, el personal de limpieza y los conductores de transporte. “El ama de llaves trabaja por propinas, y el valet trabaja por esa propina, al igual que el conductor del servicio de transporte”, explicó.
“Pueden ser entre US$2 a US$3 para su botones por la primera bolsa y otro dólar o dos por cada bolsa adicional. Si el botones te lleva el bolso a la habitación, recomiendo una propina mínima de $3”.
Para los conductores de valet, “US$3 a US$5 es estándar, a menos que esté solicitando un servicio especial, como dejar el automóvil por adelantado mientras llega al hotel”, dice Gottsman. “Entonces dales de $5 a $10, incluso si hay una tarifa por el servicio de aparcacoches”.
También recomienda dejar de US$3 a US$5 por día en la habitación del hotel para los servicios de limpieza y dejar una propina todos los días en lugar de solo al final, ya que es probable que haya un nuevo miembro del personal cada vez.
Cuándo NO dejar propinas
Como regla general, no necesitas dar propina a nadie que gane un salario o realice un oficio, como médicos, abogados, maestros, plomeros o técnicos de cable. “No solo no se esperaría, sino que sería muy poco ortodoxo y muy incómodo”, sugiere Thomas Farley.
Además, en ciertas situaciones, “podría parecer que intentas conseguir algún tipo de favor o que podría tratarse de algún tipo de soborno”. Dar propina a quienes trabajan detrás de un mostrador, como un barista o un cajero, tampoco es un requisito en lo que respecta a los expertos en etiqueta.
Elaine Swann, experta en estilo de vida y fundadora de la Escuela de Protocolo Swann agrega los eventos de barra libre a la lista. “Ten en cuenta que el anfitrión de ese evento probablemente ya se haya ocupado de eso”, dijo a CNBC.
Tampoco tienes que dar propina dos veces por el mismo servicio, insiste Swann, quien se refirió a los clientes que entregan propinas a quien les provee un servicio y, más tarde, al negocio en cuestión. “Eso es solo el establecimiento tratando de sacarte más dinero”.
