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Van Rompuy exhorta a los eurodiputados a que no rechacen el presupuesto europeo
El presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, exhortó este lunes a los eurodiputados a "pensárselo al menos dos veces" antes de rechazar el presupuesto 2014-2020 para la Unión Europea (UE), como han anticipado.
"Les pido que se lo piensen dos veces e incluso más que dos veces", urgió Van Rompuy ante el Parlamento Europeo, que amenazó con vetar el acuerdo sobre el presupuesto plurianual alcanzado entre los dirigentes europeos el 8 de febrero, marcado por las peticiones de austeridad impulsadas por Gran Bretaña y Alemania.
Más cauteloso, el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, defendió las líneas generales de la propuesta, aunque admitió que él "hubiera preferido un presupuesto más ambicioso".
La mayoría de los cuatro partidos principales del Parlamento (conservadores, socialistas, liberales y verdes) advirtieron de que rechazan el último acuerdo que se alcanzó sobre el presupuesto para los próximos siete años. Incluso el presidente de la Eurocámara, Martin Schulz, volvió a decir que una amplia mayoría de legisladores europeos considera que el acuerdo actual es "inaceptable".
Sólo el bloque de los Conservadores y Reformistas Europeos apoyó la propuesta de presupuesto, al advertir de que "todos saldremos perdiendo" si la Eurocámara no la apoya.
Los 27 jefes de Estado o gobierno de la UE acordaron un presupuesto para el periodo 2014-2020, tras casi 26 horas de duras negociaciones, que por primera vez en la historia es inferior al marco anterior. Pero sin el acuerdo del Parlamento, el presupuesto no podrá entrar en vigor.
"Urjo al Parlamento Europeo a concluir un acuerdo", dijo Van Rompuy para que pueda ponerse en marcha el 1 de enero de 2014. De lo contrario, tendremos que "aprobar las ayudas cada año, lo que será un grave revés para los científicos, universidades, autoridades regionales de toda Europa", advirtió.
Esos recortes reflejan la misma situación que viven los países europeos, que también se están "ajustando los cinturones", señaló el presidente del Consejo Europeo. La "UE no podía ser diferente", añadió.
El acuerdo establece un techo de compromisos por 960.000 millones de euros, un 3% menos que el presupuesto anterior (2007-2013), del que los países miembros tendrán que pagar 908.400 millones.
El nuevo presupuesto, marcado por los recortes que defendieron los países más ricos del bloque, prevé tijeretazos adicionales de 13.000 millones de euros en relación a un anterior proyecto de Van Rompuy rechazado en noviembre. Pero la diferencia es de 87.000 millones de euros si se compara con la propuesta original de la Comisión (1,05 billones).
En una acalorada intervención, el vicepresidente de la Eurocámara, Gianni Pittella, advirtió de que "los recortes propuestos tendrán un impacto negativo en la vida cotidiana de todos los europeos".
