Temor a la delta: Mendoza reduce el lapso entre dosis para acelerar la campaña de vacunación

MENDOZA.- Frente al avance de la variante delta del coronavirus en todo el país y para mitigar sus efectos, la provincia busca acelerar el plan de vacunación. Así, para completar más rápido los esquemas de inoculación decidió reducir al mínimo los intervalos entre dosis de todos los laboratorios. Con esta medida, se dejan atrás las diferencias de hasta tres meses entre cada componente y se baja a menos de un mes, dependiendo de la vacuna.

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“Esta decisión tiene que ver con acelerar los procesos de vacunación, como una forma de adelantarnos al impacto que puede tener la variante delta. Es verdad también que la disponibilidad de vacunas es diferente a la que teníamos antes”, explicaron a LA NACIÓN voceros del Ministerio de Salud provincial.

La decisión fue ratificada tanto por la titular de la cartera, Ana María Nadal, como por la directora de Inmunizaciones de la provincia, Iris Aguilar, quienes confirmaron que se hizo un pedido al gobierno nacional y llamaron a la población a completar a la brevedad los esquemas, sobre todo a los mayores de 18 años y menores de 50, que representan la franja de población que tiene menos cumplimiento de ambas dosis. Todos podrán presentarse de manera espontánea, sin turnos, solo con el DNI y el carnet de vacunación.

Con esta medida, la segunda aplicación de la vacuna china Sinopharm se podrá realizar a los 21 días cumplidos desde la primera dosis. Lo mismo se permitirá ahora con la Sputnik. En el caso de AstraZeneca y Moderna se podrá suministrar a los 28 días. En cuanto a Pfizer será a los 21 días.

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Tiempos

A fines de 2020, cuando llegaron las primeras vacunas –Sputnik, en su mayoría–, los intervalos entre dosis eran los que Mendoza empezó a aplicar ahora. Sin embargo, a comienzos de este año el Ministerio de Salud de la Nación decidió extender los tiempos sorpresivamente, bajo el argumento de que se buscaba proteger con un solo componente a la mayor cantidad de población posible. Así, a los 21 días iniciales establecidos entre las dos dosis de Sputnik V, se pasó rápidamente a dos meses y luego a tres meses. Es más, hubo personas que superaron ese lapso por falta del segundo componente, e incluso hoy esperan que arriben los sueros de Moscú para completar el esquema y rechazan la posibilidad de combinar productos. Tal como contó LA NACIÓN, actualmente hay más de 150.000 mendocinos en estas condiciones.

De hecho, el 25 de marzo pasado, en el marco de una reunión de la Comisión Nacional de Inmunizaciones y posteriormente con el consenso del Consejo Federal de Salud, el Ministerio definió priorizar la aplicación de primeras dosis de vacunas contra Covid-19 en la población objetivo, y difirió los segundos componentes de cualquiera de los fármacos disponibles en el país en ese momento (Sputnik V, AstraZeneca/Covishield y Sinopharm) a un intervalo mínimo de 12 semanas (3 meses) desde la primera dosis.

Estrategia

La última recomendación del gobierno nacional en cuanto a los intervalos se conoció en julio último. Así, a través de un memorándum fechado el 5 de ese mes, al que accedió LA NACION, se propuso en todo el país acortar la distancia entre dosis, sobre todo en personas de 40 años y mayores, “con el fin de fortalecer la búsqueda activa de la población priorizada que aún no se ha vacunado”. Por lo tanto, se recomendó para vacunas basadas en plataformas de vectores virales (AstraZeneca/Covishield) respetar un intervalo mínimo de 8 semanas entre la primera y segunda dosis. En el caso de las basadas en plataformas de virus inactivados (Sinopharm) se sugirió respetar un lapso mínimo de cuatro semanas. “Es necesario remarcar que estas últimas recomendaciones surgen en función de la situación epidemiológica vigente en la Argentina y en el resto del mundo, del grado de avance de vacunación en la población objetivo, del riesgo potencial que implican las variantes virales de preocupación y de la disponibilidad actual de vacunas”, señalaron en el escrito. Además, indicaron: “Esta nueva realidad, aun con los resultados mencionados de efectividad de la estrategia de priorización de primera dosis, impone el desafío de redoblar los esfuerzos para completar todos los esquemas de vacunación, principalmente en mayores de 40 años, y personas entre 18 y 59 años con condiciones de riesgo”.

Sin embargo, la provincia ahora fue un paso más allá y en las últimas horas achicó aún más esa brecha para anticiparse a los efectos que pueda producir la temida y contagiosa cepa originada en la India y que tiene en vilo al mundo. En Mendoza, solo se han detectado 11 casos de la nueva variante.