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Congelados: la marca argentina que apunta a los flexitarianos

Los fundadores de Frizata son Adolfo Rouillon y José Robledo, ambos emprendedores Endeavor.
Andrea Salerno Jacome

Sus fundadores, Adolfo Rouillón y José Robledo vienen del mundo tecnológico -crearon y vendieron a un grupo mexicano, la firma AmTech- y después saltaron a la industria alimenticia. Son los creadores de Congelados del Sur, que se dedica al desarrollo e innovación de alimentos para grandes compañías y, además, tienen su propia marca, Frizata (une la inteligencia artificial y agricultura celular en la fabricación de alimentos) que ya opera en Chile, Brasil y Estados Unidos.

“Estamos en los ‘tres santos’ -se ríe Rouillón- Santiago de Chile, San Pablo y San Francisco. Cumplimos el objetivo de 2021 que era demostrar que el modelo de negocios que tenemos es altamente replicable y escalable; llegamos a tres ciudades diferentes entre sí con una propuesta de valor que resulta atractiva”.

Las tres elegidas para escalar son áreas metropolitanas con más de seis millones de habitantes; el de San Francisco es el mercado más maduro y competitivo y en todos los casos las mayores competencias son las marcas tradicionales de alimentos que están en los supermercados. “Nosotros llegamos por el canal alternativo, directo a la casa, con unos 60 productos flexitarianos y congelados; vamos aprendiendo qué es lo que la gente busca, lo que más le interesa”, apunta Rouillón.

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El portafolio completo de la marca es de 80 productos, con lo que llegan con una buena parte a los mercados externos. Todo lo que se vende afuera se produce en la fábrica de Rosario, donde trabajan unas 200 personas que producen 3.700 toneladas al año. A Brasil y Chile envían por flete terrestre y a Estados Unidos por transporte marítimo. La facturación anual ronda los US$15 millones.

En cada uno de los países la marca cuenta con equipos liderados por locales. En los próximos meses el foco está puesto “en aprender y crecer en donde estamos; vamos a profundizar el potencial de cada mercado. Una vez que vayamos entendiendo las palancas de crecimiento iremos avanzando en otras ciudades”, dice el empresario. El plan son 200 en una década.

A comienzos de 2021, Frizata cerró de una ronda de inversión de US$5 millones liderada por SP Ventures, el fondo de venture capital brasileño líder en agri-foodtech en Latinoamérica. Además, participaron inversores como Marcos Galperin, fundador de Mercado Libre; Jaime Soler Bottinelli, ex CEO global de Cencosud; Gonzalo Ramírez Martiarena, ex CEO global de Louis Dreyfus, CEO de Swiss Pampa e inversor de alimentos sustentables; y Glocal AgriFood Tech, entre otros.

La marca apunta con sus productos a los flexitarianos, consumidores que buscan comer menos carne.
Andrea Salerno Jacome


La marca apunta con sus productos a los flexitarianos, consumidores que buscan comer menos carne. (Andrea Salerno Jacome/)

Rouillón asegura que, desde el inicio, pensaron en salir al mundo: “Nacimos pensando en escalar el modelo, en construir una plataforma global para acercar una nueva generación de alimentos innovadores”.

“Somos una compañía nativa digital que integra todos los procesos: somos responsables desde la producción, desarrollo de marca, comercialización (a través de la tienda online), hasta la distribución, y garantizamos una experiencia completa al consumidor. Este contacto directo con el cliente nos permite innovar sin límites y a velocidad digital”, describe.

Este modelo de negocio se conoce como DNVB (Digitally Native Vertical Brand) y permite ahorrar costos entre la fábrica y el consumidor y producir alimentos de calidad. A modo de ejemplo, desde la empresa indican que la hamburguesa sin carne que producen, “cuesta 25% menos que cualquier hamburguesa promedio en el supermercado y tiene un tamaño superior”.

La marca apunta a los flexitarianos, consumidores que buscan reducir el consumo de carne, y que en Estados Unidos representa la mitad de la población joven, y desembarca en un momento donde este país es el segundo mercado de e-commerce a nivel global. Sus productos no contienen conservantes, ya que el proceso de ultracongelado permite conservar todas las propiedades de los alimentos.

En la Argentina Frizata está presente en cinco ciudades (Ciudad y Gran Buenos Aires, La Plata, Rosario y Córdoba); cuenta con una gran oferta Meat-Free, una categoría de productos que recrea la experiencia de comer carne, pero sin carne. Esta línea se complementa con los más de 40 alimentos veggie, y son una opción para los flexitarianos.