"2024 será un año de menor crecimiento económico en EEUU que 2023, pero de mejor naturaleza"

Previsiones macro semanales

Lo más destacado son los precios ligados al consumo, que es el indicador preferido de la Reserva Federal; creo que ahí podemos ver un nuevo descenso, quizás del 3,4 o el 3,2%, que es interesante. Pero los mercados estarán buscando más detalles y estos se dan finalmente en el sector de servicios; será un muy buen dato que podrá dar confianza a los mercados respecto al futuro de las tasas de interés. En segundo lugar, por orden de relevancia, tendremos el PMI Manufacturero, donde podría regresar a los niveles cercanos al 50, su referencia precisamente de inercia. Y la confianza del consumidor que, de momento en noviembre parece que no va a perder ímpetu, creo que van a seguir las señales de un consumo robusto, pero con señales de desaceleración muy gradual. Y, por último, en el PIB probablemente tendremos revisiones mínimas, 2,9% de crecimiento anual, 4,9% anualizado. Y recordemos aquí la clave es que sigue siendo el consumo el que seguirá apoyando el crecimiento de esta economía.

El consumo ha aumentado estos días con el Black Friday, Cyber Monday... y en un momento en el que las ventas minoristas de octubre cayeron un 0,1%

En efecto, las ventas minoristas se desaceleraron, pero dentro de la volatilidad usual de ese indicador, recordemos que los avances anuales no se comportan en línea recta, y veíamos un indicador que venía dando señales de crecimiento entre el 1,5 y el 2% anual. Creo que ese será el caso. Algunos indicadores respecto a este fin de semana revelan un consumo que parecería congruente con un 2%. Creo que aquí hay que puntualizar más que adelantar un comportamiento futuro del consumo, es decir, más que este fin de semana sea un adelanto de lo que viene, suele ser una buena fotografía del estado del consumidor y de sus patrones de consumo. Y es lo que hemos visto este fin de semana: un consumidor que ha preferido compras en efectivo o las promociones que empiezan a ser cada vez más populares de lléveselo ahora y pague después, tratando de evitar el financiamiento con tarjetas de crédito por las altas tasas de interés. Hemos visto más tráfico físico en las ventas minoristas en los establecimientos, algo que ha venido creciendo desde la pandemia, pero también hemos visto que se han quedado en el corazón de los consumidores las ventas por internet. Con todo eso podemos empezar a adelantar los patrones de consumo, todavía robusto. Si se da una desaceleración en el consumo es muy gradual.