Yahoo Finanzas La batalla contra la gentrificación en la Ciudad de México
En noviembre del 2022, Alexandra Dunnet dio a conocer, por medio de su cuenta de Twitter, que el edificio en la colonia Condesa de la Ciudad de México (CDMX) en donde habitaba, había sido desalojado.
Ella era la última inquilina de uno de los 18 departamentos del inmueble, antes de que el resto fuera publicado en la plataforma de rentas de corta estancia Airbnb, con un precio de alquiler de 85,000 pesos al mes, cuando ella pagaba cerca de 10,000 pesos mensuales.
Desde hace unos meses, los habitantes de la capital han tenido que enfrentarse a la gentrificación, ya que los precios de la vivienda, tanto de compra como de renta, han aumentado al grado de expulsar a los habitantes locales.
A pesar de que no es nuevo, el término “gentrificación” se volvió popular desde hace meses, cuando miles de extranjeros eligieron a México como un destino ideal para trabajar a distancia.
De acuerdo con la plataforma Tasvalúo, es posible señalar que este fenómeno se da con frecuencia en sitios muy deseados para vivir, donde el perfil urbano con viviendas económicas es sustituido por inversiones inmobiliarias que expulsan a la población original.
Actualmente, la calle Ámsterdam hace honor a su nombre y parece ser un territorio ajeno a México, en el que el idioma español es raro y decenas de extranjeros hacen ejercicio, trabajan y pasean.
En los 23 años que Alejandra Kiewek ha vivido en esta calle, ha sido cercana a personas de otras nacionalidades. Asegura que la colonia Condesa está abierta a nuevas culturas, pero la dinámica con los nómadas digitales se percibe diferente.
“Esta zona es muy inclusiva con los extranjeros. El problema no es que usen este espacio para vivir, sino que sólo vienen de paso. Contrario a nosotros los mexicanos, ellos no hacen mucho esfuerzo por mezclarse”, comentó la también representante de la Comisión de Participación Comunitaria (Copaco).
El efecto en rentas
Según cifras oficiales, de enero a noviembre del 2022, el volumen de extranjeros con residencia temporal o permanente en la Ciudad de México incrementó 23.8%, para alcanzar un total de 43,868 foráneos.
Al querer aprovechar esta dinámica, el gobierno capitalino firmó un acuerdo con Airbnb para capitalizar la derrama económica que los nómadas digitales generan, la cual se calcula en más de 3,000 millones de dólares al año.
El convenio desató una serie de inconformidades, ya que, además de los cambios en la convivencia social, se tendrían otras consecuencias, como un mayor incremento en el valor de la vivienda y el desplazamiento de habitantes locales.
De acuerdo con el portal Inmuebles24, el precio de alquiler de departamentos en la colonia Condesa incrementó 66% en los últimos 24 meses.
La renta mensual promedio pasó de 16,043 pesos en mayo del 2021 a 26,740 pesos en el mismo mes del 2023.
Francisco Andragnes, director general de Homie.mx, explicó que, si bien el encarecimiento del arrendamiento responde a la inflación generalizada, también impacta la demanda de extranjeros y nómadas digitales.
“(El tema) se complicó por el aumento de las viviendas ofertadas en Airbnb. Hay zonas que tienen más departamentos en renta en este sitio que en el mercado tradicional”, comentó el especialista.
Al ver la demanda de foráneos, el interés de los propietarios de los edificios habitacionales ha ido en ascenso, quienes han optado por desalojar inquilinos locales para atender a aquellos que ganan en euros o dólares.
En las calles aledañas al domicilio de Kiewek, al menos, seis inmuebles han sido reconvertidos en Airbnb u hotel. Sus vecinos locales no se han pronunciado hasta el momento, pero considera que no falta mucho tiempo para eso.
“Algunos todavía no dimensionan el efecto de todo esto, pero creo que se pronunciarán en un futuro no muy lejano. Todo se ha encarecido: los restaurantes, los comercios y, obviamente, la vivienda”, afirmó la representante de Copaco.
Daniela Sánchez, coordinadora de la Clínica Jurídica sobre Derecho a la Vivienda, expuso que en la Ciudad de México se ha suscitado un proceso de mercantilización que deja a la vivienda como un bien para especular y obtener ganancias, por lo que le deslinda de su función vital: dotar de un techo y seguridad a las personas.
Así, la gentrificación se observa en la transformación de colonias como Juárez, Roma o Condesa, donde se ha documentado el desalojo de decenas de familias. El gobierno capitalino solo prometió analizar la situación y estudiar una posible regulación.
