Cristina Kirchner estira la definición del candidato pero alimenta la danza de nombres y se desmarca del Gobierno

La vicepresidenta Cristina Kirchner tuvo su reaparición en Santa Cruz tras el acto que encabezó el 25 de mayo y volvió a esquivar la definición de un candidato presidencial que esperan sus seguidores y todo el oficialismo. Sin embargo, a la vez que exhibió el punto de no retorno en la lucha interna con el presidente Alberto Fernández demostró una vez más que política y economía son para ella parte de lo mismo y con ello contribuyó a la danza de nombres.

El plazo para inscribir las candidaturas vence el sábado 24 de junio y, mientras Daniel Scioli marcha rumbo a las elecciones primarias (PASO) como precandidato con sello "albertista" -a pesar de que él y el mismo Presidente lo niegan- el tándem que armaron Cristina y el ministro de Economía, Sergio Massa, todavía no tiene un nombre firme más allá de que Eduardo "Wado" de Pedro avanza con su campaña.

Sin haber señalado en Santa Cruz a un candidato, la expectativa se posa en el 20 de junio, fecha patria que además conmemora a su prócer favorito, Manuel Belgrano, según circula en el oficialismo, aunque también empezó a correr la versión de que la vicepresidenta podría, directamente, no señalar explícitamente a nadie.

En esa hipótesis, la decisión se tomaría en privado o bien por omisión, dado que en cualquier caso, quien enfrente a Scioli en las PASO será ubicado como el candidato del eje cristinista massista, sobre todo con la distancia que tomó la vicepresidenta de la gestión de Fernández al criticar el acuerdo que firmó con el FMI y señalar que no hubo funcionarios "que funcionen" entre "los que estaban manejando la Economía y la tarasca".

Cristina Kirchner estira la definición y se centra en la economía, donde aparecen Massa y Kicillof

Entre las críticas a Fernández por la posición que tomó su sector en el cierre de las alianzas y los cuestionamientos al manejo de la economía previo a la llegada de Massa, Cristina Kirchner volvió a poner la necesidad de un programa por encima de las candidaturas. Con ello estiró un poco más el suspenso y alimentó, indirectamente, las especulaciones que corren sobre su definición.

"Tenemos que solucionar el problema de la falta de dólares en la Argentina. El problema que hoy tenemos es que no tenemos dólares los necesitamos no solo para pagar la deuda sino también para sostener la industrial, la inversión en tecnología", lanzó la dirigente que no desconoce que el encargado de atender ese problema es Massa, quien suele machacar sobre el mismo tema.

En Río Gallegos Cristina Kirchner volvió a estirar el suspenso pero dejó una llamativa mención sobre Kicillof

Además, consideró que es necesario "que haya diálogo entre todas las fuerzas políticas para abordar el terrible tema del endeudamiento con el Fondo Monetario" y agregó: "No los trajimos nosotros. Es más, cuando se discutió en la Cámara de Diputados si se pagaba lo que demandaban los fondos buitre, fue el diputado (Axel) Kicillof el que advirtió que se iba a terminar una vez más en el FMI y hoy estamos ahí".

Hasta ahora, la vicepresidenta había evitado mencionar al actual gobernador bonaerense en sus apariciones públicas. Si bien esa referencia a Kicillof no puede ser interpretada del todo como un guiño a la candidatura presidencial que quiere cargarle Máximo Kirchner y que el mandatario rechaza, la dirigente mostró una vez más su predilección por quien fuera su ministro de Economía.

Además de "Wado" De Pedro, tanto Massa como Kicillof forman parte de las opciones que se manejan en el sector del oficialismo que espera por la definición de Cristina. Ambos están vinculados con el manejo de la economía que para ella es central a la hora de encarar un proyecto político-electoral y, en el caso puntual del actual ministro, también a la negociación con el FMI.

Sin un señalamiento concreto, nadie puede hacer más que interpretar los discursos de la vicepresidenta -que se caracteriza por el hermetismo en el que toma sus decisiones- y esperar, como máximo, una semana más para conocer al candidato. Pero, con intención o sin ella, Cristina Kirchner alimentó un poco más las especulaciones en la recta final.

La vice se mete en la interna: crítica a la PASO y un comentario con aroma chicana

Si la dura negociación entre Máximo Kirchner y Scioli por el piso de votos para integrar las listas de Unión por la Patria luego de las PASO dejó un clima de pelea sin retorno con la Casa Rosada, Cristina Kirchner terminó de confirmarlo al repetir las críticas que lanzó el PJ bonaerense contra la posición que tomó el ala albertista.

La vice fue directa y señaló que no le gustó nada que "desde el propio espacio político" amenazaran "con ir al Partido Judicial" por la discusión en torno a las listas y agregó: "Esta discusión de que si hay PASO o candidatura única, la verdad que cuando uno tiene responsabilidades de gobierno la responsabilidad es gobernar y tratar de que haya la menor conflictividad posible, esa es mi idea".

Cristina Kirchner mostró que la pelea con Alberto Fernández no tiene vuelta atrás y se desmarcó de su gestión

Además de apuntar también contra los llamados que, según el kirchnerismo, hizo Alberto Fernández a dirigentes del interior del país, lanzó una chicana contra el Presidente al destacar la presencia del ministro de Obras Públicas, Gabriel Katopodis, un funcionario que hasta hace algunos meses era considerado "albertista" pero que en el último tiempo se acercó cada vez más a ella.

"Este hombre es uno de los funcionarios que sí funcionan, debo decirlo", expresó la vicepresidenta mientras le tocaba el brazo a Katopodis, quien se sentó junto a ella y la gobernadora de Santa Cruz, Alicia Kirchner, en la inauguración de la ampliación del Hospital Regional de Río Gallegos. "El problema es que no tuvimos a los que funcionaban entre los que estaban manejando la economía y la tarasca".

No fueron, sin embargo, los únicos gestos de su desacuerdo sin retorno con el Presidente. Cristina Kirchner también habló de "recuperar la representación política" para que "cuando a uno lo votan sepa qué está votando y que ese voto va a ser honrado sentado en una banca o en la Casa Rosada", al tiempo que con sus críticas a la gestión del acuerdo con el FMI por el préstamo contraído por el ex presidente Mauricio Macri filtró, una vez más, su total desacuerdo con el madnatario.

Cristina Kirchner se desmarca del Gobierno de Fernández: frases filosas sobre su rol como gobernante

En ese orden, la vicepresidenta trazó una comparación entre las crisis de 1989, de 2001 y la actual y recordó que le obsequió a Fernández el libro de Juan Carlos Torre, "Diario de una temporada en el quinto piso", sobre la situación que enfrentó Alfonsín y 1989. "Espero que el Presidente lo haya leído, aunque no sé, me parece que no", lanzó.

Y continuó: "Yo recuerdo ese diciembre de 2021 cuando advertí ‘ojo con lo que se firma’ y me dijeron ‘tranquila, Cristina está todo bajo control’. Tenés que decirle a la sociedad la verdad". Con esa frase, la dirigente volvió a cargar contra la forma en la que el jefe de Estado manejó la negociación con el FMI cuando Martín Guzmán era su ministro de Economía y, por elevación, cuestionó su capacidad de gobernar.

"Si tenés que firmar porque tenés la 45 en la cabeza tenés que decirle a la sociedad eso porque este préstamo no lo tomó este gobierno. Lo sufre este gobierno. Si te pusieron la pistola en la cabeza, no le digas a la sociedad que está todo solucionado y bajo control, porque entonces sobrevienen después las crisis de representación política y las propuestas de que van a quemar aquello o lo otro", lanzó la vicepresidenta.

Como ya se dio a entender en el comunicado que explicó el cambio de nombre del Frente de Todos a Unión por la Patria de cara a las elecciones, el kirchnerismo entró en una etapa de desmarcarse de la gestión de Fernández, a la vicepresidenta le atribuye buena parte de la responsabilidad por la situación adversa que enfrenta el peronismo.