Yahoo Finanzas Cuándo es el mejor momento para comprar entradas para un concierto
Encontrar entradas para el próximo concierto de tu artista favorito (a un precio razonable) puede requerir algo de maña, especialmente si el espectáculo pertenece a una estrella de gran cotización en la industria del entretenimiento, como Taylor Swift, Beyoncé, BTS o Harry Styles, por solo mencionar algunos.
Cada vez con mejores producciones, más capacidades y mayor tiempo de duración, los conciertos regresaron después de meses de cancelaciones y estrictas medidas de aislamiento. Ahora están en pleno apogeo y son un artículo de altísima demanda que hay que saber “pescar” en un mar de bots de reventa y millones de fanáticos desesperados por volver a sentir la adrenalina de la música en vivo.
El momento en que compres es la clave
La pregunta no es cómo (sobran los sitios de reventa, como StubHub, Seatgeek y Vivid Seats, que garantizan una segunda oportunidad para quienes no alcanzaron los tickets por vías originales) sino cuándo hacerlo para que tu bolsillo no se vea tan afectado en el proceso.
Los precios en el mercado de reventa varían enormemente según el artista. Mientras más famoso o mientras más tiempo lleve alejado de los escenarios físicos, más de prisa se agotan las entradas. Comprar en el momento equivocado puede costarte, literalmente, cientos de dólares adicionales.
Un análisis reciente de Bloomberg basado en datos de SeatGeek intenta descifrar cuál es el mejor momento para comprar entradas, teniendo en cuenta cómo se movió el mercado durante los 100 días previos a más de una decena de espectáculos que tuvieron lugar en Nueva York este año.
“The Eras Tour” de Taylor Swift, el más caro
Está claro que casi siempre la estrategia más práctica es comprar el ticket lo antes posible. En el caso concreto de la exitosa gira “Eras Tour” de Taylor Swift, donde la estrella del pop se presenta durante más de tres horas sobre el escenario, comprar antes es mejor.
Según Bloomberg, los precios más bajos para los tres espectáculos del “Eras Tour” en el MetLife Stadium oscilaron entre US$ 690 y US$ 865 por diez semanas, antes de que Taylor finalmente agarrara el micrófono. Por escandaloso que suene, demorarse unas semanas en la compra aumentaba el costo del ticket a más de US$ 2.000 dólares. El propio día del espectáculo, esa cifra solo bajó en US$ 500.
Algo similar ocurrió con el concierto de SZA en el Madison Square Garden. Sus entradas se dispararon en los días previos al evento, de US$ 398 una semana antes de su espectáculo del 5 de marzo a US$ 671 el día del espectáculo. La gira mundial “Renaissance” de Beyoncé fue igualmente cara. Las entradas más baratas para sus espectáculos en el MetLife Stadium alcanzaron un máximo de más de US$ 400.
Drake, por su parte, realizó una serie de siete conciertos en julio junto al rapero 21 Savage. Los precios de reventa en cada uno de ellos subieron justo antes del evento. Se podía comprar boletos para el espectáculo del 26 de julio en el Madison Square Garden por US$ 207 tres semanas antes, pero esa cantidad se duplicó diez días después.
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Esperar también puede ser la respuesta (a veces)
La tendencia no fue la misma para las presentaciones de artistas como la banda Paramore, los Jonas Brothers o Depeche Mode. Un tercio de los conciertos analizados por Bloomberg bajaron sus precios a medida que se acercaba la fecha. En casos como los de las bandas mencionadas, es mejor comprar las entradas la misma semana del concierto.
“Y los devotos del K-pop podrían considerar esperar hasta poco antes de que la banda suba al escenario”, dice el artículo. Para ver al rapero Suga, miembro fundador del grupo BTS, en el Prudential Center, los fanáticos habrían desembolsado US$ 233 una semana antes del show, 22% menos que un mes antes.
Los datos respaldan otro informe del año pasado (actualizado el jueves) de FinanceBuzz, donde se asegura que en muchos casos “la paciencia es una virtud”. El estudio encontró que, aunque más de una cuarta parte de las entradas para conciertos se compran tres meses o más antes del espectáculo, a esos primeros compradores en realidad les están costando más dinero adquirir sus entradas con tanta antelación.
Según FinanceBuzz, los billetes comprados demasiado pronto cuestan casi un 14% más que el precio medio de los billetes en el mercado secundario. “Por otro lado, descubrimos que las entradas cuestan un 33% menos que el promedio cuando se compran el mismo día del concierto. Las entradas compradas el día antes del espectáculo también fueron una buena oferta, ya que costaron un 27% menos que el promedio”, dice el informe.
Los conciertos son todo un fenómeno que, particularmente en la actualidad, impacta incluso en las decisiones financieras de los más jóvenes. Un informe de junio de la firma de informes crediticios Experian reveló que el 63% de la Generación Z y el 59% de los millennials prefieren gastar dinero en “experiencias de vida” como viajes y conciertos, en lugar de ahorrar para la jubilación.
Según el informe, más de la mitad también admite tener dificultades para decirse no a sí mismos cuando realizan compras impulsivas.
