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El gasoducto Barcelona-Marsella tardará entre 4 y 5 años en construirse, según España

FOTO DE ARCHIVO. Personas trabajan en la terminal de gas natural licuado (GNL) de Enagás en la Zona Franca de Barcelona, Cataluña, España

MADRID, 21 oct (Reuters) -El proyecto de gasoducto marítimo que conectará los puertos de Barcelona y Marsella no contribuirá a aliviar la crisis energética europea a corto plazo, ya que, según España, podría tardar al menos cuatro o cinco años en estar plenamente operativo.

El proyecto conjunto de España, Portugal y Francia, acordado el jueves y bautizado como BarMar, sustituye al anterior gasoducto MidCat que atraviesa los Pirineos y que, según España, podría estar listo en 2023, pero fue vetado por Francia en favor del BarMar. El nuevo gasoducto se utilizará principalmente para bombear hidrógeno verde y otros gases renovables a la red europea.

Los tres países dijeron que el gasoducto también debería permitir temporalmente el transporte de algo de gas natural para ayudar a paliar la crisis energética de Europa derivada de la invasión rusa de Ucrania, dijeron los tres líderes el jueves, aunque ese alivio aún está a unos años de distancia.

"Es un proyecto que debe ser enormemente seguro. (...) Nuestro cálculo es que tardaríamos en torno a 4 ó 5 años y todavía se debe completar con la interconexión con Francia, también desde el primer punto de entrada en Marsella hasta que conecta con el gran esqueleto de tuberías de hidrógeno del centro de Europa", dijo el viernes a la prensa la ministra española para la Transición Ecológica, Teresa Ribera.

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Añadió que las conexiones entre España y Francia, así como entre el punto de entrada en Marsella y la red de gasoductos de hidrógeno en Europa central, están aún por completar.

Se ha fijado un plazo hasta diciembre para que las empresas encargadas de la construcción del gasoducto presenten un plan más detallado con su coste y duración previstos, dijo Ribera.

La ministra confía en la capacidad del operador español de la red de gas, Enagas, pero también es necesaria la participación de sus homólogos francés y portugués.

"El hecho de que se hable de 'no antes de 2030' significa que todavía hay divergencias sobre este tema", dijo Ribera, en referencia a las informaciones de los medios de comunicación franceses del viernes.

El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, tampoco dio detalles sobre el nuevo plan.

"Lo importante ahora es dejar trabajar a los técnicos, encontrar los recursos, fijarnos tareas, plazos y fechas, y cómo repartirnos los costes de esta oportuna inversión", dijo.

Fernando García, analista de servicios energéticos de RBC Capital Markets con sede en Londres, dijo que la ruta de BarMar no solucionaría "claramente" los problemas de suministro de Europa a corto plazo.

"Es probable que Europa tenga problemas de suministro de gas hasta al menos 2024, incluido", dijo, y añadió: "Puede que la producción de hidrógeno verde sea más barata en la Península Ibérica que en el norte de Europa, pero los precios, los costes y la infraestructura están aún en pañales".

El gasoducto BarMar es también un sustituto del enlace submarino entre España e Italia que se barajó en su día, dijo Ribera a Antena 3 el viernes.

Ribera dijo que, en su lugar, España está considerando establecer un nuevo enlace marítimo entre Barcelona y el puerto italiano de Livorno para transportar gas natural licuado entre ambos países.

(Información de David Latona e Inti Landauro; editado en español por Benjamín Mejías Valencia y José Muñoz en la redacción de Gdansk)