¿Liderazgo sin brillo?: Consejos para superar la desmotivación

Cuando hacemos tareas o actividades con entusiasmo, es inevitable contagiar a los demás y esto provoca que las personas se acerquen más, lo cual es un buen indicativo dentro del liderazgo.

Pero también ocurre lo mismo en el caso contrario, porque cuando esta desmotivado se afecta a los colaboradores, lo que provoca bajos niveles de productividad, alterar la salud mental y en algunos casos, rotación de personal.

Alejandra Costa, psicóloga y coach de alto rendimiento, explica que todos necesitamos dos cosas básicas dentro de las organizaciones: el sentido de pertenencia y sentirse visto. El cual también aplica en aquellos que están en cargos de mandos medios y alta dirección.

“Cuando no tenemos eso, aunque ganemos mucho dinero te empiezas a desmotivar porque nadie ve el esfuerzo, nadie lo nota, nadie lo dice y comienza la desvinculación con la empresa y con el trabajo”.

Asimismo, una baja remuneración económica es signo de desvalorización, porque el líder siente que su trabajo no es apreciado, pero en caso de que la empresa opte por subir el sueldo y la desmotivación sigue ahí, es necesario profundizar en el problema.

5 tipos de motivación

Aunque el contexto sea diferente, por ejemplo, la falta de reconocimiento, problemas con algún colaborador, entre otros. El resultado es el mismo porque el líder se siente desmotivado.

En este sentido, David Pons, consultor en liderazgo menciona que existen cinco tipos de motivación:

1. Extrínseca: Se motiva a través de cosas externas como el dinero, bonos, reconocimientos y premios dentro de la organización.

2. Intrínseca: Refiriéndose a lo interno, se relaciona con el hecho de sentirse bien, cuando el problema se ve como un nuevo desafío y hay pasión en lograrlo.

3. Contributiva: Nace internamente de la motivación, pero el enfoque está hacia afuera, es decir, nace la motivación cuando se hace algo por los demás.

4. Institucional: Surge dentro de la organización y sucede cuando se asignan tareas en donde la persona se siente valorada y que contribuye a la misma.

5. Relacional: Explicado empresarialmente, se presenta cuando existe una buena relación con el líder. Por ejemplo, en el caso de los mandos medios se guían a través de la alta dirección.

De esta forma, cada líder se puede sentir motivado de diferente manera y por ello es importante que las empresas no se enfoquen en un solo método para motivar al personal.

Por otra parte, Alejandra Costa recomienda crear propósitos tanto personales como a favor de la empresa. Por ello, desacelerar las circunstancias ayuda a que el líder se tome el tiempo necesario para pensar en qué es lo que le falta y si la organización está en la misma sintonía.

“Es mucho más importante que te sientas parte de un lugar, que te sientas parte de un proposito, no (solo importa) el dinero, no el bono”, dice Alejandra Costa.

4 pasos para no perder la motivación

David Pons comenta que después de identificar el perfil motivacional, se puede hacer lo siguiente para encontrar el propósito:

1. Siempre buscar desafíos con base en el perfil motivacional.

2. Pensar en metas específicas, alcanzables, que vayan más allá de la organización, es decir, metas personales.

3. Involucrarse más en la definición del puesto. El líder puede sacar provecho de sus capacidades y ponerlas a prueba en el cargo que ejerce.

4. Utilizar las fuerzas de carácter, por  ejemplo las juntas pesadas y difíciles usar la fuerza de carácter, como la empatía, puede aligerar la situación con preguntas personales, sin caer en lo invasivo.